Barrio de La Merced. Julio César Chávez regresa al centro de la capital del Estado de México. Acompaña a su hijo al segundo entrenamiento con Ignacio Beristáin que será en el gimnasio General Agustín Millán. “La leyenda del boxeo mexicano” camina por Avenida Hidalgo y calle Andrés Quintana Roo. Los recuerdos lo golpean, Toluca es una ciudad “mágica” para Chávez. 

Todas las veces que se preparó en la altura mexiquense consiguió el triunfo. Ahora vuelve para apoyar a su primogénito. Antes de entrar al centro deportivo, “El César del boxeo” es reconocido, le piden autógrafos y fotografías a las que siempre accede.

“Me llena de nostalgia regresar a Toluca, es una ciudad mágica para mí. Hace como 10 años que no venía al Agustín Millán”, señala Chávez.

De hecho fue a principios de marzo de 2004 cuando el sonorense piso por última ocasión el Millán. En aquel momento se alistaba para el tercer pleito contra Frankie Randall, el estadounidense que lo había destronado y le había quitado el invicto el 29 de enero de 1994. 

La memoria de Chávez lo hace ir a un local de nieves. A unos metros de la Alameda, Julio acudía a refrescarse. La mayoría de las veces no tenía problemas con el peso y podía darse el lujo de tomar el postre. 

“Siempre que terminaba de entrenar aquí en Toluca me comía una nieve de limón con fresa. Me llegan mucho los recuerdos y quiero ir a saludar a la señora”, dice con nostalgia el tres veces campeón del mundo en diferentes categorías.

Con el conocimiento de las bondades que otorga entrenar en la altura de la capital del Estado de México, Julio César sostiene que cuando le dijo a su hijo que nunca perdió un pleito que preparó en esta ciudad, el Jr. se motivó.

“Yo le dije que nunca perdí una pelea cuando me metí en el Otomí y pasé por Toluca. Eso lo motivó, pero él solito fue el que quiso que viniéramos a hacerla. Habló con ‘Nacho’ Beristaín y concordaron en que sería aquí la estancia”, explicó Julio César Chávez.

A diferencia de otros campamentos que realizó, el padre externa que ve concentrado al Jr. y capaz de doblegar a Saúl “Canelo” Álvarez el próximo 6 de mayo.

En un podcast del periodista Aldo Farías, Carlos Alberto Aguilar, hoy narrador en Televisa, aseguró que el excampeón mundial mexicano de boxeo Julio César Chávez era un drogadicto y en ocasiones llegaba en malas condiciones a las transmisiones de boxeo.

Durante varios años, Aguilar fue parte del grupo de transmisiones de boxeo en Azteca, al que todavía pertenece el "César del Boxeo".

"Del otro lado, un Julio César Chávez disparatado, drogadicto, se metía alcohol, se metía todo... Llegaba bien pedo a veces a las transmisiones y yo tenía que ejecutarlo", detalló. "Gracias a Dios, Julio vive una transformación a través de la televisión. Lo vimos mentando madres, pedo, borracho, 'coco' y -de repente- empezó a bajar ese ritmo".

Eso sí, Aguilar afirma que Chávez lleva "11 años" limpio.

También habló de Eduardo Lamazón, otro de sus excompañeros y quien tuvo un cargo en el Consejo Mundial de Boxeo.

"Ocupaba a mi Eduardo Lamazón para que fuera mi faceta de la verdad", presumió. "Todo el mundo le creía a Lamazón por ese gran antecedente que ha tenido en el boxeo: secretario ejecutivo del CMB".

Sobre él, asegura que "me gusta narrar como si fuera un concierto de música".

Desde hace algunos meses, Aguilar trabaja en TUDN, donde narra boxeo, futbol y hasta fue la voz en off del programa "Guerreros 2020".

Si llego a 80 mil Seguidores antes de la Pelea,🥊 Prometo darle la chinga de su Vida al Viejo Picudo @Jcchavez115 ahora sii le voy a faltar el respeto, se acabó tanta adulación🤬 al Más Grande; anda muy crecido Che Viejo, Se siente inmortal, ya siente que Vuela 🦅 pic.twitter.com/h4QhEaBWjx

— Jorge Arce (@TraviesoArce) August 14, 2020

Jajajajajaja No creoooo pinche dienton pic.twitter.com/WONAiNAfST

— Julio César Chávez (@Jcchavez115) August 14, 2020

Jorge "Travieso" Arce empezó a calentar la tercera pelea de exhibición contra Julio César Chávez, de quien dijo que en esta ocasión no tendría la ventaja del público que lo apoyara, porque el pleito se realizará a puerta cerrada.

"Viejito picudo, agárrate. Ahora sí voy por todo. Eres el más grande ídolo de todo México y con el público te sientes respaldado. Pero aquí a puerta cerrada, te voy a poner una ajustadita buena", sostuvo Arce.

La pelea será con fines benéficos, como las dos anteriores. Mientras Chávez beneficiará a diez personas para que se internen en su clínica de adicciones de forma gratuita, Arce aportará cuartos para personas con bajos recursos.

El combate se realizará el 25 de septiembre en el hotel Las Torres de Tijuana. La cartelera se realizará a puerta cerrada por la situación sanitaria y se podrá ver en modo pague por evento, pero vía streaming.

"Dios te bendiga, Viejo picudo. Vamos a hacer una buena pelea", agregó en otra parte de su video el otrora pentacampeón del mundo.

En la cartelera, también pelearán los hijos de Chávez, Julio César Jr. y Omar. Será la primera ocasión que los tres forman parte de una misma cartelera.

Entre gritos de apoyo y admiración, Julio César Chávez culminó una gran noche boxística en el Auditorio Municipal de la Ciudad de Tijuana. 

Enfrentó en una pelea de exhibición a Jorge 'Travieso' Arce a beneficio de la recuperación del hijo de José Luis Castillo, Christian, quien sufrió un derrame cerebral hace unos meses. 

Poco más de 5,000 espectadores estuvieron presentes en el inmueble para ver a los boxeadores de Fábrica de Campeones, al mismo José Luis, a Julio y al 'Travieso', entre otros. 

Las clásicas bandas rojas en la cabeza se veían entre los aficionados, la emoción no se detenía. 

Los especial de gala también tuvo a Érik 'Terrible' Morales presente; se le entregaron las "Llaves de la Ciudad" previo al combate estelar, por parte del presidente municipal, Arturo González y, además Julio César fue reconocido como "Huésped Distinguido" de Tijuana. 

Previo al combate, Luis Antonio 'Mimoso' López de la Banda El Recodo cantó "México Lindo Y Querido" para acompañar a Chávez; cabe mencionar que el cuerpo de bomberos también reconoció un apoyo por parte del Ayuntamiento de 50,000 pesos.

La locura se vio cuando comenzó el combate esperado, con gritos de apoyo para ambos peleadores y más todavía, al ver los movimientos que nunca se olvidan por parte de los grandes boxeadores. 

El combate fue tan entretenido que inclusive no hicieron caso a la campana y continuaron sus ataques, esto ante la algarabía del público. 

Al terminar la pelea la gente se les entregó y Chávez se llevó la mayoría de los gritos. 

Al finalizar y con micrófono en mano, Julio César Chávez retó al 'Terrible' a una pelea de exhibición de tres rounds por una buena causa; Morales aceptó y la gente estalló en júbilo. 

Cabe mencionar que el 'Travieso' estuvo acompañado por un equipo de grabación que está documentando una serie de su vida.

Los asesinos de Rafael Chávez González, hermano mayor del ex tricampeón mundial de Box, Julio César Chávez, presuntamente sabían que Rafael acudía cada domingo a recoger el dinero que obtenía de los pagos de los pacientes del centro de rehabilitación para adictos y alcohólicos que abrió hace siete años.

Su hermano mayor, el ex pugilista Rodolfo Chávez González, comentó que los dos hombres que ingresaron al hogar del finado, uno de ellos armado, obligaron a su esposa e hija a encerrarse en el baño, mientras le exigían la entrega de dinero.

El mayor de la dinastía de boxeadores de la familia Chávez González no descartó que los homicidas de "El Borrego", como se le conocía a su hermano, pudieran ser personas que estuvieron en el centro de rehabilitación, ubicado en la plaza comercial, conocida como el Palmito.

Rodolfo Chávez manifestó que los datos que conocen del hecho, registrado la noche del domingo pasado, es que forcejeó con uno de los delincuentes, el cual accionó en varias ocasiones el arma que portaba.

Juan José Ríos Estavillo, fiscal general del Estado, explicó que las primeras investigaciones de estos hechos, registrados en la calle Juan de Dios Bojórquez, en la parte sur-poniente de la ciudad, marcan una línea de un aparente asalto.

Según los indicios consignados en la carpeta de investigación, Rafael, de 54 años de edad, ex boxeador y actual administrador de un centro de rehabilitación para adictos a las drogas y al alcohol, recibió varios disparos.