Proponen permitir corridas de toros, pero sin herirlos ni matarlos
Los partidos de izquierda de Baleares (España) presentarán en el Parlamento regional una propuesta de ley que se podría aplicar ya este verano y que permitirá los espectáculos de toros en las islas, pero los animales no podrán ser banderilleados ni matados.
La faena de cada toro durará un máximo de diez minutos y, una vez terminada, el ejemplar será devuelto a la ganadería que lo facilitó, que debe estar geográficamente próxima a Baleares (Mediterráneo) para evitar a los animales largos desplazamientos.
Esta iniciativa legislativa también prohíbe los circos con animales salvajes y el uso de animales en fiestas o espectáculos que tengan "por objeto o la componente de la muerte, tortura, maltrato, daño, burlas, sometimiento o tratamientos antinaturales, durante o después de la fiesta o espectáculo".
La iniciativa de las formaciones de izquierdas Podemos, PSOE y los econacionalistas MÉS respeta la sentencia del Tribunal Constitucional que impide la prohibición en España de las corridas de toros por ser la tauromaquia un Bien Cultural Inmaterial, pero permite a las comunidades autónomas ejercer sus competencias en materia de bienestar animal y regular los espectáculos.
Así lo explicaron hoy los diputados de MÉS Margalida Capellà y Josep Castell, de Podemos Carlos Saura y del PSOE Damià Borràs, que invitaron al resto de formaciones políticas del parlamento balear a que presenten sus propuesta para aprobar esta ley, que esperan que esté vigente este próximo verano.
En resumen, la ley velará para que en ningún espectáculo se maltrate ni se mate a los animales y, en el caso de las corridas de toros, se eleva de 16 a 18 años la edad para presenciarlas.
La futura ley prohíbe las novilladas y establece que los toros de lidia, tras ser transportados desde la península, descansen 48 horas antes del espectáculo.
Además no habrá presencia de caballos en ninguna corrida y los toros no podrán ser encerrados en los chiqueros debido a su falta de luz y estrechez, por lo que deberán pasar de los corrales a la plaza.