Con muchos problemas México derrota a Nueva Zelanda
Pidiendo la hora México venció 2-1 a Nueva Zelanda, con lo que subió al primer lugar del grupo A en la Copa Confederaciones.
El Tri llega a 4 puntos, los mismos que Portugal pero con mejor diferencia de goles.
Chris Wood abrió el marcador para Nueva Zelanda a los 42 minutos, pero en la segunda parte de la mano de Raúl Jiménez a los 53’ y Oribe Peralta a los 72’ dieron la vuelta.
Juego rudo que le costó mucho al equipo mexicano, ya que Carlos Salcedo salió por luxación de hombro y Héctor Moreno también se resintió de una lesión.
Ahora el Tricolor definirá su calificación en Kazán al enfrentarse contra el anfitrión Rusia, el próximo sábado.
Héctor Herrera dijo que la palabra exceso de confianza estaba prohibida en el Tricolor.
La realidad es que aunque no se dijo, la Selección Mexicana sí actuó de esa manera al inicio del juego, actuando como perdona vidas, sin la seriedad que correspondía a un juego de Copa Confederaciones.
Oribe se la pasa riendo, como tomando a broma el juego. Cada balón que recibe y falla lo remata con una gran sonrisa, digna de anuncio de pasta de dientes.
Pero Nueva Zelanda no ríe. Encima, aprieta, golpea, no da pelota por perdida, y México las pierde todas y al sentir el ímpetu del rival quiere competir en lo físico.
Ahí no gana.
Carlos Salcedo se barre y se lesiona el brazo derecho. Los de Nueva Zelanda en vez de detener el juego, en muestra de Fair Play, siguen la jugada. Wood queda mano a mano con Alfredo Talavera, el delantero tira abajo y el portero de Toluca hace una gran atajada.
Pero la acción no termina ahí. Juan Carlos Osorio reclama desesperado, primero al árbitro asistente, después al técnico neozelandés por su falta de juego limpio. La televisión expone mundialmente al colombiano quien grita un "mother fucker" antes de ser detenido por su entrenador de porteros Mario Marín.
La lesión pone aún más nervioso al equipo mexicano, que tiene nulo control de la media cancha y nula seguridad en la salida, por eso Néstor Araujo rechaza al centro, donde Clayton Lewis recupera y de primera intensión filtra la pelota a Chris Wood quien con clase vence, ahora sí a Talavera.
En piernas vacilantes, el Tricolor terminó la primera parte lleno de dudas, lleno de miedos y lleno de desesperación. Los cambios jugaron en su contra.
Héctor Herrera quien se quedó a calentar en el descanso, parecía la solución.