Natación mexicana, llena de ilusión
Motivación y liderazgo significa Nuria Diosdado para los seleccionados nacionales que participarán en el Campeonato Mundial de Natación.
Es de las primeras en llegar a la Terminal 1 del aeropuerto de la Ciudad de México. Su maleta está llena pero la lleva sin problema. La veterana en nado sincronizado ya quiere subirse al avión rumbo a Budapest, Hungría. Llama y reúne a sus compañeras. Siempre al pendiente si ya falta una o si otra necesita algo.
"El liderazgo no lo tomo como presión", asegura Diosdado. "Al contrario, para mí es un honor que lleguen y me pidan consejos. Hice lo mismo en mi momento".
La sirena mexicana quiere que sus compañeras gocen de la experiencia.
"Tienen que estar muy concentradas, no fijarse en las rutinas de otros países porque la nuestra no se cambia. Es un Mundial y que lo disfruten. Después de Juegos Olímpicos, es lo máximo".
Nuria reitera que el objetivo es llegar a las finales y ubicarse entre las mejores ocho del orbe."Se abre el ciclo olímpico y tenemos que hacerlo muy bien. No se aceptan los errores", concluye la tricolor.
Un clavadista mexicano, de 15 años de edad, debutará en una justa de gran importancia. Randall Willard no se achica ante los mejores del mundo.
"Ya tengo una idea de lo que será y me motiva mucho", indica el adolescente antes de abordar.
El saltarín comenta que compartirá cuarto con Jahir Ocampo y asegura que el atleta olímpico lo mantiene centrado antes de su debut, la próxima semana.
"Me da muchos consejos. No de clavados, más bien de cómo controlar los nervios en los momentos clave", admite Willard.
Rommel Pacheco es de los últimos en llegar al aeropuerto. El clavadista está listo para la revancha, tras no conseguir medalla en los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro.