Cinco exporristas demandaron a los Texans de Houston alegando que el equipo no las compensó como exige la ley y las sometió a un ambiente de trabajo hostil en el que fueron hostigadas, intimidadas y obligadas a vivir con miedo.

La demanda, presentada en el Tribunal Federal de Houston, acusa a la franquicia de pagarle a las mujeres menos de los 7,25 dólares por hora que les prometieron.

Agrega que no las compensaron por hacer apariciones públicas ni por realizar otras tareas relacionadas con sus trabajos y además que el equipo creó un lugar de trabajo en el que las mujeres fueron amenazadas con ser despedidas si se quejaban.

En conferencia de prensa, Hannah Turnbow indicó que "mis compañeras y yo fuimos tratadas como las más bajas entre las más bajas".

Dijo que "a los Texans se les pagaron miles de dólares para que nos presentáramos en varias instalaciones de todo Texas, pero no nos proporcionaron seguridad ni transporte".

Recordó que después de que sufrió rasguños en el hombro cuando fue atacada por un aficionado durante un partido, el equipo le dijo que "sólo resiste".

Una de sus excompañeras, Ainsley Parish, dijo que "fuimos acosadas e intimidadas por sólo 7.25 dólares la hora".

El equipo inmediatamente dio a conocer su posición al respecto a través de su portavoz Amy Palcic, quien dijo que los Texans constantemente evalúan el programa de animadoras y hacen cambios "según sea necesario para que el programa sea agradable para todos".

Agregó que "estamos orgullosos de nuestro programa de animadoras y hemos tenido cientos de mujeres que han participado y disfrutado de su experiencia a la vez que han tenido un impacto positivo en la comunidad local".

Gloria Allred, abogada de derechos de la mujer y que representa a las porristas, indicó que a sus clientes se les pagaba "muy poco o nada" por la mayor parte del trabajo que hacían debido a su género.

Indicó que "el dueño de los Texans, Bob McNair puede encontrar entre su presupuesto de cientos de millones de dólares, dinero suficiente para pagarles a estas mujeres un salario justo, en vez del mínimo".

Allred decidió no dar a conocer qué busca la demanda, pero indicó que planea presentar la próxima semana una carta al comisionado de la NFL, Roger Goodell, en la que le pide que revise las quejas que sus clientes y porristas de otros equipos hacen sobre sus condiciones de trabajo.

Esta es la segunda demanda presentada contra los Texans, luego de que tres exporristas entablaron una en el tribunal federal de Houston, acusándolos de no pagarles el salario mínimo, no pagar salarios por horas extras.

Los Houston Texans están perdiendo a otro miembro de alto rango de la organización.

 El presidente de los Texans, Jamey Rootes, está renunciando a su puesto dentro de la organización a partir de hoy, informó el experto de NFL Network, Ian Rapoport.

 El equipo luego confirmó la noticia.

 "Agradecemos sinceramente las múltiples contribuciones de Jamey a la franquicia de los Texans durante su mandato y esperamos verlo triunfar en sus nuevas empresas", dijo el presidente y director ejecutivo de los Texans, Cal McNair, en un comunicado. "Ahora construiremos sobre esta base y avanzaremos con un compromiso audaz e inquebrantable de ganar campeonatos, crear experiencias memorables para nuestros fanáticos y hacer grandes cosas por Houston".

La separación de caminos se produce cuando Rootes busca oportunidades adicionales, agregó Rapoport. En su comunicado de prensa anunciando la noticia, los Texans dijeron que Rootes planeaba "perseguir sus intereses como escritor, orador público, consultor y profesor en la Universidad de Houston".

"Creo que la organización está en un gran lugar desde una perspectiva empresarial", dijo Rootes a John McClain del Houston Chronicle el miércoles por la mañana. "Tenemos un gran equipo de liderazgo. Pensé que era el momento adecuado para hacer algo diferente. Soy lo suficientemente joven para encontrar una nueva oportunidad para crear algo nuevo".

Rootes, de 54 años, contratado por el difunto propietario, Bob McNair, pasó dos décadas con la organización de los Texans, principalmente supervisando los aspectos comerciales y administrativos del club.

Rootes le dijo a McClain que había estado pensando en seguir adelante por un tiempo.

"Amo a Cal como a un hermano", dijo Rootes. "Esta idea (renunciar) no es nueva para mí. Cuando la salud de Bob comenzó a deteriorarse, pensé que era importante para la organización tener estabilidad durante esta ventana. Cuando Bob falleció, sentí que le debía a Cal estar aquí."

La partida de Rootes es el último cambio dentro de la organización de Houston en los últimos meses, incluida la contratación del nuevo gerente general Nick Caserio y el entrenador David Culley. Los tejanos también despidieron al popular V.P. de comunicaciones Amy Palcic. Más recientemente, el equipo se separó del muy querido gerente de equipo Mike Parsons y el director de administración de fútbol Kevin Kracjcovic, entre otros cambios en la organización.

Varios entrenadores y jugadores de los Houston Texans creen firmemente que J.J. Watt no seguirá en el equipo de cara a la próxima campaña de la NFL.

Se espera que el defensivo estrella juegue con otro equipo, aunque todavía no hay un anuncio oficial de las partes involucradas.

Watt ha sido una de las grandes figuras de los Texans en las últimas campañas, pero parece que la relación con el conjunto texano no es la mejor.

En otro caso que involucra a los Texans, el gerente general del equipo afirmó que no desean pactar un cambio por Deshaun Watson. Mucho movimiento en las oficinas de los Texans, cuando apenas está iniciando la temporada baja.

Lovie Smith está de regreso en la NFL.

Smith se unirá al personal del nuevo entrenador en jefe de los Texans, David Culley, en Houston como coordinador defensivo, informó Ian Rapoport, de NFL Network. La incorporación de Smith y la contratación de Tim Kelly como coordinador ofensivo y Pep Hamilton como entrenador de mariscales de campo deberían finalizarse más tarde este viernes, según Rapoport.

Smith pasó los últimos cinco años intentando cambiar el programa en la Universidad de Illinois, pero fue despedido después de terminar con un récord de 17-39. Su última etapa en la NFL fue como entrenador en jefe de los Tampa Bay Buccaneers, donde tuvo marca de 8-24 en dos temporadas.

Antes de sus luchas de la última media década, Smith estaba entre los entrenadores más respetados y exitosos de la NFL. Saltó a la prominencia como coordinador defensivo en St. Louis, donde ayudó a los Rams a mejorar desde el puesto 23 en yardas permitidas y el 31 en puntos permitidos en 2000 al tercero y séptimo, respectivamente, en 2001, la primera temporada de Smith en St. Louis.

Ese cambio le valió el trabajo de entrenador en jefe en Chicago, donde llevó a los Bears a tres apariciones en playoffs, un título de la NFC y una aparición en el Super Bowl XLI. Liderados por una defensa increíblemente tacaña y sofocante, los Bears ganaron 15 juegos (13 en la temporada regular, más dos juegos de playoffs) antes de caer ante los Indianapolis Colts de Tony Dungy en un asunto empapado por la lluvia.

Un año antes, Smith ganó los honores de Entrenador del Año AP después de ayudar a los Bears a cambiar su récord de 5-11 en su primera temporada a 11-5 en el segundo año. Smith permaneció en Chicago hasta el 2012 antes de ser despedido después de que los Bears se fueron 10-6 pero se perdieron los playoffs.

Los Texans necesitan desesperadamente una nueva dirección a la defensiva después de terminar 32º en yardas terrestres permitidas por juego, 30º en yardas permitidas por juego y 27º en puntos permitidos por juego. Si Smith puede diseñar un cambio incluso remotamente similar a los que dirigió en St. Louis y Chicago, esta habrá sido una buena contratación para Culley.

Cuando se filtró la contratación del nuevo entrenador de los Texans de Houston, su quarterback, Deshaun Watson, solicitó su transferencia a otro equipo de la NFL.

Anoche se comunicó que David Culley, quien fue asistente de Jon Harbaugh en los Ravens de Baltimore, se convertirá en el nuevo head coach de la franquicia texana, que no habría consultado las opciones con su estrella.

Esta mañana de jueves, diversos reportes desde la Liga confirmaron que Watson ya pidió su salida de Houston, incluso, que lo realizó hace varias semanas.

El egresado de la Universidad de Clemson firmó un lujoso contrato por 160 millones de dólares –111 mdd de ellos asegurados– con los Texans y ahora busca, como sea, su partida de la organización, propiedad de la familia McNair.

Desde que terminó la campaña 2020, se filtraron rumores de que Watson ya no deseaba continuar con el equipo por diversas molestias con la administración.

La contratación de Culley, quien ha tenido una carrera de 25 años y seis equipos en la NFL, no habría sido del agrado del talentoso pasador. Los Jets de Nueva York, Dolphins de Miami, Bears de Chicago, Lions de Detroit y el equipo de Washington serían los principales interesados en firmarlo para este 2021.

Watson terminó el 2020 con 4 mil 823 yardas por aire, 33 pases de anotación, una efectividad del 70 por ciento, 444 yardas por tierra y un par de touchdowns por la misma vía y tiene un convenio que lo vincula con Houston hasta el 2025.

El quarterback estelar Deshaun Watson solicitó su canje a los Houston Texans, dijeron fuentes de la liga a Adam Schefter de ESPN este jueves.

Deshaun Watson realizó la solicitud al equipo hace semanas, dijeron las fuentes a ESPN.

La contratación del nuevo entrenador en jefe de los Texans, David Culley, no ha cambiado ni cambiará el pensamiento de Deshaun Watson, señalaron las fuentes a ESPN.

Deshaun Watson no ha hablado con el nuevo gerente general de los Texans, Nick Caserio, ni con el ejecutivo Jack Easterby, señalaron las fuentes a ESPN.

Deshaun Watson, quien firmó una extensión de contrato por cuatro años y 156 millones de dólares en septiembre, se encuentra bajo contrato hasta la temporada del 2025. Tiene una cláusula de no canje en su acuerdo, pero debido a la duración del contrato y la posibilidad de colocarle la etiqueta franquicia por tres años, los Texans podrían optar por no canjearlo y tendrían control de sus derechos hasta la campaña del 2028.

La solicitud de canje se produce luego que Deshaun Watson no estuviera satisfecho con el proceso utilizado por el equipo para contratar a Caserio a principios de enero.

Después que Deshaun Watson firmó su extensión de contrato el año pasado, estuvo emocional cuando comentó lo feliz que se sentía de comprometerse con la franquicia y la ciudad.

"Es un momento increíble para mí poder extender mi carrera en un lugar, un hogar, que diría que mi familia y yo amamos", declaró Deshaun Watson en septiembre. "Quiero seguir sumergiéndome en la comunidad sobre todo y simplemente seguir construyendo mi legado, simplemente construir nuestro legado como conjunto y hacer algo que nunca hemos hecho antes".

Deshaun Watson estableció marcas personales la temporada pasada en yardas aéreas, touchdowns y porcentaje de pases completos. También lanzó siete intercepciones, la menor cifra de su carrera. Sus 33 touchdowns y 4,823 yardas aéreas también fueron récords de franquicia.

La mejor campaña individual del quarterback llegó en una temporada en la que el equipo terminó 4-12 y despidió al entrenador en jefe y gerente general Bill O'Brien luego de un inicio 0-4.

Aunque solo ha jugado cuatro temporadas (54 partidos), los 104 pases de touchdown y 14,539 yardas aéreas de Deshaun Watson se ubican en la segunda posición en la historia de la franquicia de los Texans, detrás de Matt Schaub (124 touchdowns y 23,221 yardas aéreas en 90 partidos).

Deshaun Watson actualmente es el líder de todos los tiempos en porcentaje de pases completos de la NFL detrás del quarterback de los New Orleans Saints, Drew Brees. En el 2020, se convirtió en el jugar N° 11 en la historia de la NFL en completar al menos el 70 por ciento de sus pases en una sola temporada.