Los Philadelphia 76ers aceptaron la renuncia de Bryan Colangelo, anunció el equipo el jueves.

El entrenador de los Sixers, Brett Brown, supervisará las operaciones de manera interina.

La decisión se produce después de que una historia de The Ringer sacó a la luz la posibilidad de que Colangelo tuviera múltiples cuentas anónimas de Twitter que se utilizaron para autoelogiarse y criticar a los jugadores actuales y anteriores de los 76ers.

Colangelo, dos veces ex ejecutivo del año de la NBA, ha discutido con los dueños y la alta gerencia la posibilidad de que su esposa, Barbara Bottini, haya estado involucrada en la publicación de los tweets de las cuentas señaladas, según fuentes de la liga dijeron a ESPN Adrian Wojnarowski y Zach Lowe.

Colangelo les ha dicho a los colaboradores cercanos que cree saber quién es el responsable de los tweets, pero ha insistido a los que están dentro y fuera de la investigación que no tuvo nada que ver con las publicaciones y no los conoció hasta que The Ringer los envió la atención de los Sixers antes de la publicación de la historia esta semana, dijeron fuentes de la liga.

Los Sixers anunciaron el miércoles pasado que estaban llevando a cabo una investigación interna de la información presentada en la historia.

Algunos de los tweets se centraban en el comportamiento fuera de la cancha del centro estrella Joel Embiid. Otros aseguraron que el ex centro Nerlens Noel era un problema en el vestuario y que los problemas de lesiones de Jahlil Okafor podían haber afectado a los pelícanos.

Los tweets incluyen defensas del desempeño laboral de Colangelo y comentarios despectivos sobre su predecesor con los Sixers, Sam Hinkie, y su sucesor como presidente de los Raptors de Toronto, Masai Ujiri. Otros tweets aludieron a información confidencial sobre los eventos que condujeron a los extraños tiros de la temporada de Markelle Fultz.

Colangelo hizo una declaración oficial:

"Si bien estoy agradecido de que la investigación independiente realizada por los 76ers haya confirmado que no tenía conocimiento o participación en la actividad de Twitter realizada por mi esposa, impugno enérgicamente la afirmación de que mi conducta fue de alguna manera imprudente. En ningún momento compartí deliberada o directamente ninguna información sensible, no pública, relacionada con el club con ella.

"Sus acciones fueron un esfuerzo seriamente equivocado para defenderme públicamente y apoyarme, y aunque reconozco cuán inapropiadas fueron estas acciones, ella actuó de manera independiente y sin mi conocimiento o consentimiento. Además, el contenido que compartía estaba lleno de imprecisiones y conjeturas que de ninguna manera representan mis propios puntos de vista u opiniones. Si bien esto fue obviamente un error, somos una familia y vamos a trabajar en esto juntos.

"Aunque no soy directamente responsable de las acciones, lamento que haya ocurrido este incidente y entiendo que se ha convertido en una distracción para el equipo. Por lo tanto, la organización y yo hemos acordado dividirnos", afirmó Colangelo.

Los tuits que mencionan a los Sixers tienen imágenes de video, presumiblemente de sus instalaciones de práctica, del entrenador de Fultz, Keith Williams, instruyendo a Fultz para que dispare mientras está sentado en una silla tumbado boca arriba.

Solo un pequeño círculo de Sixers habría tenido acceso a esa información.

El comisionado de la NBA Adam Silver respondió a la confusión que rodea a Colangelo y los Sixers en su conferencia de prensa anual de las Finales de la NBA el jueves, advirtiendo contra una prisa por juzgar la controversia.

"La idea aquí era vere qué está pasando", dijo Silver. "Hay que separar el tipo de charla y más o menos lo que los fanáticos o, francamente, los medios dicen de los hechos. Y lo primero que tenemos que hacer aquí es determinar cuáles son los hechos reales en esta circunstancia".

Devin Booker perdió muchos juegos en sus primeras cinco temporadas en la NBA. Eso es parte de lo que hace que estas últimas semanas sean aún más dulces.

Booker anotó 36 puntos, Chris Paul agregó 18 puntos y 10 asistencias y los Phoenix Suns en ascenso vencieron a los Philadelphia 76ers 120-111 el sábado para su quinta victoria consecutiva.

"Es tan agradable, hombre", dijo Booker. "Somos profundos. Siento que tenemos 15 años. Todos pueden jugar y todos están listos para jugar ".

Los Suns han ganado ocho de sus últimos nueve juegos y han mejorado a 16-9. Obtuvieron un gran juego desde su banca contra Philadelphia, especialmente de Dario Saric, quien anotó 15 puntos en su primer juego después de fallar 13 seguidos.

Saric se perdió alrededor de un mes porque estaba en el protocolo de salud y seguridad COVID-19 de la liga y también lidiaba con un dolor de tobillo.

"Ahora que finalmente estoy de regreso, jugar con este grupo de muchachos que son realmente talentosos y de mente positiva, es un placer", dijo Saric.

Joel Embiid anotó 35 puntos en 12 de 23 lanzamientos para los Sixers, que han perdido dos seguidos pero aún mantienen el primer lugar en la Conferencia Este con 18-9. Ben Simmons y Tobias Harris agregaron 18 puntos.

Tobias Harris anotó 27 puntos y Furkan Korkmaz añadió 17, incluyendo los encestes de la ventaja en el cuarto periodo, para ayudar a los 76ers de Filadelfia a completar una frenética remontada el domingo con una victoria de 119-110 sobre los Pacers de Indiana.

Los 76ers perdían por 16 al inicio del último cuarto, pero acortaron la distancia con una racha de 31-6 para apuntarse su sexto triunfo en siete partidos —esta vez sin si pívot All-Star Joel Embiid, que se ausentó por dolor de espalda.

La ofensiva de Indiana fue liderada por Malcolm Brogdon con 25 puntos y Domantas Sabonis con 21. Pero los Pacers han perdido cinco de ocho juegos.

Los Pacers dominaron la mayor parte de los primeros tres periodos después de conceder los primeros ocho tantos del encuentro.

Y cuando el enceste de Aaron Holiday a 8:16 minutos del final puso a Indiana arriba 104-88, parecía que los Pacers se enfilaban a su cuarta victoria consecutiva en la serie.

Sin embargo, los 76ers remontaron para irse al frente con un largo disparo de Korkmaz con 2:30 minutos por jugar. Korkmaz continuó el ataque con otro tiro de larga distancia que puso la pizarra 109-106, y los Pacers nunca se recuperaron.

En el partido once fuera del Staples Center se acabó el invicto de Los Angeles Lakers como visitantes en la NBA y tuvo que ser con una canasta de último segundo de Philadelphia 76ers para definir el partido 107-106, cortando la mejor racha de todos los tiempos de los angelinos fuera de casa para comenzar una temporada.

Tobias Harris fue quien encestó con dos segundos en el cronómetro ante la marca de Alex Caruso para unos Sixers que solamente han perdido un juego en casa y que se presumen como los de mejor récord en la Conferencia Este (12-6), mientras los Lakers conservan el sitio de privilegio (14-4) pese al descalabro.

Ben Simmons registró un triple-doble con 17 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias, Joel Embiid fue el mejor anotador con 28 y el citado Harris marcó 24, incluida la canasta ganadora.

Entre LeBron James y Anthony Davis anotaron más de la mitad (57) de los 106 puntos de los Lakers, que habían ganado ocho de sus últimos nueve, con la única derrota en ese lapso ante los Warriors de Stephen Curry con un fenomenal regreso.

El partido del domingo por la noche entre el local Thunder de Oklahoma City y los 76ers de Filadelfia ha sido pospuesto con apego al protocolo de la NBA para lidiar con la pandemia de COVID-19.

La NBA indicó que debido al continuo rastreo de los 76ers de contactos con personas contagiadas de coronavirus, el equipo no cuenta con los ocho jugadores disponibles necesarios para llevar a cabo el encuentro.

Durante toda la semana la NBA ha sufrido de problemas del mismo tipo y se desconoce cuándo se jugarían los encuentros pendientes, y todo pinta para que continúen con estos inconvenientes de calendario debido a la misma pandemia.

Se supone que el primer día del campo de entrenamiento de la NBA irá acompañado de un optimismo desbordante, un momento para que los jugadores y entrenadores den los primeros pasos hacia lo que esperan sea un campeonato.

Tal fue el caso el martes, de una manera muy moderada.

Los primeros campamentos de pretemporada de la era del coronavirus están formalmente abiertos, con equipos limitados por ahora a sesiones individuales con un entrenador y un jugador en una canasta, todo esto comienza a suceder a medida que la pandemia continúa y más y más estadounidenses dan positivo.

"Estoy muy preocupado sobre si podemos lograr esto", dijo el entrenador de Filadelfia, Doc Rivers.

Probablemente no esté solo en ese pensamiento.

El entrenador de Washington, Scott Brooks, dijo que los Wizards ya vieron a un jugador dar positivo por coronavirus, y el entrenador de Orlando, Steve Clifford, dijo que el pívot del Magic, Mo Bamba, quien dio positivo hace varios meses, todavía está "muy lejos" de estar listo para jugar nuevamente. Más tarde el martes, el gerente general de Golden State, Bob Myers, dijo que dos Warriors dieron positivo, lo que significa que el club no comenzará la práctica a gran escala hasta al menos el lunes, apenas seis días antes de su primer partido de pretemporada.

Probablemente habrá más elementos que den positivos. Probablemente muchos más.

Rivers, al señalar que el virus se está convirtiendo en un problema importante para el futbol americano universitario y la NFL en términos de conseguir partidos jugados, dijo que el efecto en un equipo de la NBA que pierde a uno o dos jugadores clave, incluso por un período corto, podría arruinar una temporada.