Después del triunfo, medallistas piden ayuda
El romance que vive el deporte mexicano tras lo conseguido en Barranquilla 2018 es sólo la contraparte de la realidad que aqueja a los atletas nacionales, pues luego de realizar un papel histórico en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, algunos de los campeones jaliscienses alzaron la voz ante las situaciones adversas que han vivido por causa de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).
Jorge Luis Martínez, campeón mundial en patinaje de velocidad y ahora también campeón centroamericano, no tuvo empacho para expresar la molestia que le generó el incentivo económico que le otorgó la Conade por haber conseguido el título mundial en 2016, mismo que, según afirma el deportista, le pareció una suma ridícula.
“Mi estímulo económico por parte de Conade por haber sido campeón del mundo con todo y récord mundial fue de 22 mil pesos, y eso muchos de los que están aquí pueden confirmar que es una nada. Para ejemplificar lo que digo hay que recordar que los patines que utilizo cuestan 25 mil pesos, y los juegos de ruedas que yo uso en competencia cuestan aproximadamente tres mil pesos. Realmente me sirvió para nada, me pareció una burla”, compartió.
A los reclamos de Martínez se unió la arquera Linda Ochoa, quien no dudó en hacer público el recorte que sufrieron sus becas por el hecho de que consiguió un patrocinador que le apoyara con sus gastos.
“Creo que podríamos pasar aquí toda la tarde hablando de lo mismo, pero por nombrar otro caso, a mí no me dieron absolutamente nada cuando logré el récord mundial; tengo una beca de Conade que el año pasado me la bajaron a pesar de estar en mis mejores años. Este 2018 fui la mejor mexicana en Copas del Mundo y de cara a los Juegos Centroamericanos me dijeron que a mí no me darían nada porque yo tengo patrocinadores. Es una burla y estoy tomando cartas en el asunto”.
Otra atleta que ha conseguido ayuda de la iniciativa privada, pero que no ha contado con el respaldo de la Conade en los últimos años, es la esgrimista Nataly Michel, quien afirma haber gastado cerca de 100 mil pesos en su preparación para Barranquilla 2018.
“Lamentablemente yo no he encontrado muchos patrocinadores y al igual que Linda (Ochoa) este año me he pagado todas mis competencias, realmente la Conade me pagó sólo una, todas las demás las cubrí yo: campamentos, entrenamientos, todo lo pagué yo. Gasté cerca de 80 o 100 mil (pesos) de mis ahorros, pero encontré gente que me ayudó bastante”, finalizó Nataly.
Ante a estas situaciones, que han generado cierta molestia pese a los buenos resultados deportivos, los medallistas jaliscienses confían en que con la llegada de Ana Gabriela Guevara al timón de la Conade para la próxima administración federal, la situación sea diferente y los apoyos fluyan de mejor manera.
Presumen sus logros
Medallistas centroamericanos visitaron la redacción de EL INFORMADOR y aprovecharon para tomarse la foto del recuerdo en el Centro tapatío. EL INFORMADOR/F. Atilano
El ganar medallas de todos colores y sabores en los recién terminados Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, Colombia, no fue impedimento para que la crema y nata del deporte se hiciera presente en la redacción de EL INFORMADOR. Los mejores atletas, no sólo de Jalisco o México, sino en algunos casos del mundo, atendieron la invitación de la casa editorial, para platicar su experiencia en la justa regional.
Un total de 16 atletas que uno a uno fueron llegando, Luis Montoya, Job Castillo y Haramara Gaitán, de bádminton; Ahtziri Sandoval, de gimnasia; Claudia Rivas, de triatlón; Alejandra Zavala, de tiro deportivo; Aseret Zetter, de boliche; Nataly Michel, Raúl Arízaga y Juan Unda, de esgrima; Daniela Rodríguez, de taekwondo; Jorge Luis Martínez y Mike Páez, de patinaje; Iván García y Paola Espinosa, de clavados, y Linda Ochoa, de tiro con arco, ofrecieron una interesante entrevista, para luego acudir al Teatro Degollado para tomarse la foto oficial y por qué no, la imagen del recuerdo.
Sorpresa fue la que se llevaron los transeúntes en el Centro Histórico de Guadalajara, específicamente en la explanada del Degollado, quienes al ver a los medallistas vestidos de gala, no dudaron en pedirles una foto, un autógrafo o simplemente se acercaron a saludarlos y felicitarlos por sus logros en Colombia.
Pero los propios atletas comprendieron que era un momento de relax, y accedieron a acercarse a sus fans y claro, entre ellos se divirtieron con la tradicional selfie, intercambiaron puntos de vista de sus experiencias, tanto en el evento, como en lo que sucederá con el deporte nacional, con el nombramiento de Ana Guevara al frente de la Conade para la próxima administración federal.
Uno a uno se fueron retirando, prometiendo que volverán a EL INFORMADOR a seguir “presumiendo” sus logros en un futuro, tanto en Panamericanos, como en los Olímpicos de Tokio en 2020.
Como en familia...
Pese a que no es jalisciense por nacimiento y vivió sus mejores años mientras entrenaba en la capital del país, Paola Espinosa se muestra contenta por haber sido arropada por el equipo tapatío de clavados, mismo que es comandado por el entrenador Iván Bautista.
“Ha sido una experiencia muy padre, de verdad que sí, el cambio de equipo me vino muy bien. El profe Iván Bautista es una gran persona antes de ser un gran entrenador, es un gran motivador.
“La primera persona que me llenó de confianza después de mi embarazo fue él, me convenció de que lograríamos lo que quisiéramos. Estamos haciendo las cosas muy bien juntos. El ambiente es muy padre, totalmente distinto al que estaba acostumbrada. Es divertido y bueno estar en este equipo”, finalizó Espinosa.
Paola se colgó dos medallas de plata en los Juegos de Barranquilla, colaborando para el título de la delegación mexicana en la justa regional.