Dodgers ante difícil tarea
Si los Dodgers han de volver a Los Ángeles con la Serie Mundial empatada a un triunfo por bando, tendrán que encontrar la manera de completar una tarea que se le ha hecho bien difícil a los equipos de la Liga Nacional: Ganar en el Fenway Park.
Los campeones del Viejo Circuito perdieron el Juego 1 por 8-4 en un partido que se mantuvo bastante cerrado hasta que los Patirrojos anotaron tres carreras en la parte baja del séptimo inning. El Juego 2 esta noche representa otra oportunidad para que los azules salgan de Boston con una victoria poco común.
Los números corroboran esa historia. Los equipos de la Liga Nacional han estado jugando en el histórico estadio de Boston durante la temporada regular desde que empezaron los Juegos Interligas en 1997. En ese tiempo, los Medias Rojas tienen el mejor récord en casa en enfrentamientos interligas, con 132-71 (.650), incluyendo 5-1 contra los Dodgers. El dominio de Boston en ese sentido se refleja más en el diferencial de carreras.
Mayor diferencial de carrera en casa
en juegos interligas (1997-presente)
1. Medias Rojas: +296
2. Atléticos: +201
3. Yankees: +196
4. Tigres: +159
5. Azulejos: +157
El paso por el Fenway Park se ha vuelto aun más difícil en los últimos años. Desde la temporada del 2015, los Medias Rojas tienen marca de 32-8, la mejor de Grandes Ligas, en su estadio contra equipos de la Liga Nacional, incluyendo foja de 7-3 esta temporada.
La advertencia aquí para los Dodgers es que los Medias Rojas han tenido éxito a través de los años contra equipos de la Liga Nacional, en cualquier sede, a la vez que le ha ido bien en casa sin importar el oponente.
En la historia de los Juegos Interligas, Boston también tiene el mejor récord en la ruta (111-89, .555) y se encuentra en el segundo lugar en diferencial de carrera en la ruta (+150). Los Medias Rojas tienen el tercer mejor porcentaje de victorias en casa desde 1997 y el segundo mejor diferencial de carreras (+1,440).
No es difícil ver cómo un oponente de la Liga Nacional sin experiencia podría ser vulnerable a los retos singulares que presenta en Fenway Park. Además del ruido y la concurrencia, hay ángulos que no existen en ningún otro estadio de Grandes Ligas. El Monstruo Verde se alza imponentemente en el bosque izquierdo, está el triángulo en el bosque central y el Pesky Pole - el apodo del palo de foul- en el bosque derecho, posiblemente obligando a los lanzadores y bateadores a cambiar su estrategia y creando caos para los defensores.
Previo a la Serie Mundial, la última vez que los Dodgers jugaron en el Fenway Park fue en el 2010. De los cinco jugadores de Los Ángeles que vieron acción en los jardines en el Juego 1 - Cody Bellinger, el boricua Enrique Hernández, Joc Pederson, el cubano Yasiel Puig y Chris Taylor - sólo Taylor había jugado en el Fenway Park y había sido en calidad de campocorto.
Tras un jonrón de tres rayas del dominicano Eduardo Núñez en el séptimo inning, los Medias Rojas ganaron, mejorando su marca en casa en sus últimas cuatro Series Mundiales a 7-1. Aunque en ese tramo Boston también tiene foja de 6-1 en juegos del Clásico de Otoño en la ruta, el club ha dominado más en el Fenway, superando 56 a 23 carreras a sus oponentes, para un diferencial de +33. (Boston tiene diferencial de rayitas de +15 en la ruta en ese tramo.)
En los juegos de Serie Mundial entre el 2004, el 2007 y el 2013 en el Fenway Park, los Patirrojos batearon .272, mientras que sus oponentes batearon .217.
Aunque los números en el Juego 1 el martes estuvieron más parejos, un equipo de la Nacional volvió a qujedarse corto en el estadio más viejo de Grandes Ligas. Y ahora, a horas del Juego 2, los Dodgers deben superar esa tendencia o volver a Los Ángeles con las manos vacías.