El velerista yucateco Cristóbal Hagerman Haro señaló que se encuentra listo para viajar a Europa, en donde competirá en el Campeonato Mundial de Tablavela (RS:X), el cual otorga pases a los Juegos Olímpicos Tokio 2020. 

“El objetivo es ir y clasificar al país junto a David Mier y Terán y todos los mexicanos que iremos a hacer lo mejor posible para que el país esté en Tokio”, mencionó. La cita mundialista está programada en Torbole, Italia, del 22 al 28 de septiembre, pero el competidor se trasladará a la sede en julio próximo para arrancar con el periodo de aclimatación. Hagerman Haro, quien se convirtió en monarca de la Olimpiada Nacional 2019, expresó su confianza de hacer un buen trabajo para cumplir con el sueño de representar a México en unos Juegos Olímpicos. 

“El evento es en septiembre, pero me voy el 26 de julio, vamos a estar entrenando varios días para hacer un buen papel y poner a México en lo más alto”, expuso. Hagerman Haro relató que entrenar a lado del experimentado David Mier y Terán es un extra para cumplir con los objetivos, “confío en que va a lograr sus objetivos porque está muy bien preparado para Lima 2019”.

El IMOCA60 ‘MASCF’ de la navegante franco-alemana Isabelle Joschke, primera clasificada en categoría femenina (undécima en la general), comunicó a las 21:23 (hora peninsular) de ayer que abandonaba la Vendée Globe -Vuelta al Mundo en Solitario- por la rotura de un cilindro hidráulico de su quilla, ya reparado anteriormente.

El pasado 3 de enero, Joschke ya sufrió la pérdida del vástago del cilindro hidráulico y se reparó de manera provisional. desde entonces su quilla pivotante estaba fija en el centro del casco.

Ayer tarde, navegando con viento de 30-35 nudos (58 a 68 km/h) y con un mar muy agitado, el posicionamiento de la quilla ya quedó fuera de control por la pérdida del cilindro, que provoca una leve fuga a bordo de su IMOCA.

La rotura se produjo a 850 millas (1.570 km) al Noreste de las Malvinas. Esta mañana, un cambio de dirección del viento le permitirá dirigirse más hacia el noreste para escapar de la actual depresión y un mar más ordenado podría facilitar las cosas. La navegante se encuentra en perfectas condiciones físicas. En la segunda de las seis que iniciaron la competición que se retira. 

Delante, la brecha entre el, líder Yannick Bestaven (Maître CoQ IV ) y Charlie Dalin (Apivia) se ha reducido a 208 millas (395 km), pero Bestaven, que ayer tarde viró más al noreste. Ahora navega a 250 millas (480 km) al Sureste de Río de Janeiro y ha sido el promero en entrar en el flujo de viento esta mañana, navegando ahora ya a 16 nudos (30 km/h).

El ‘Apivia’ de Charlie Dalin había logrado colocarse a solo 175 millas (324 km) del líder, pero cayó en la misma área antociclónica por la que pasó Bestaven y tanto él como el ‘LinkedOut’ de Thomas Ruyant, navegan a apenas 10 nudos (18 km/h). Además, Ruyant ha sido superado en el tercer puesto por el ‘Apicil’ de Damien Seguín que, 100 millas (185 km) más al Este ha ganado velocidad.

A 850 millas (1.575 km) al Oeste del cabo de Hornos, el ‘One Planet One Ocean’ del español Didac Costa, a solo 50 millas (90 km) al norte de la Zona de Exclusión de Hielos (ZEH) avanza firme a una media de 14 nudos (26 km/h) bajo viento del Suroeste de 18 nudos (34 km/h). Como avanzó el patrón catalán, el martes día 12 podría cruzar el cabo.

Una veintena de veleros de Cuba y EE.UU. compitieron hoy en la segunda edición de la regata "Torreón de la Chorrera", vistoso espectáculo a lo largo del Malecón habanero en el que participan competidores de la carrera St. Petersburg (Florida)- La Habana, que por primera vez en 59 años incluyó un barco cubano.

Las embarcaciones siguieron un recorrido que comenzó a la altura del Castillo del Morro, a la entrada de la bahía habanera, y concluyó frente al Fuerte de La Chorrera, en la desembocadura del río Almendares.

Antes realizaron una parada náutica desde la Marina Hemingway (al oeste de La Habana) hasta El Morro, para deleite de los cientos de personas que frecuentan habitualmente el Malecón, el más famoso paseo marítimo de Cuba.

Los veleros partieron el 26 de febrero desde St. Petersburg y arribaron a La Habana entre el miércoles y el jueves pasado, en un itinerario retomado en 2017 tras el "deshielo" en las relaciones de ambos países, que reanudaron nexos diplomáticos en 2015.

Como novedad este año la regata incluyó al velero Micara, la primera embarcación con bandera y tripulación cubanas en participar en una competencia náutica entre el país norteño y la isla en casi 60 años.

Las regatas oficiales entre EE.UU. y Cuba dejaron de celebrarse en 1959, el año del triunfo de la Revolución en la isla, y fue precisamente una competencia de velas entre las ciudades St. Petersburg y La Habana -un circuito que comenzó en 1930-, la última realizada antes de la suspensión.

Desde 2015 se han realizado las regatas Copa de la Amistad, Havana Challenge, la Bone Island Race y Tampa-Habana, y Miami-La Habana.

También se han establecido dos nuevos récords mundiales de velocidad desde Cayo Hueso a La Habana, primero el alemán Roger Klüh en agosto de 2015 (1 hora y 30 minutos) y dos años después los pilotos estadounidenses Nigel Hook y Jay Johnson (1 hora y 18 minutos).

La edición 70 de la Regata Newport Beach–Ensenada contó con la participación de 190 participantes, a diferencia del año pasado cuando fueron 236, situación que se atribuyó a la inseguridad pública que se vive en Ensenada y a las alertas que se generaron en los Estados Unidos en ese tema sobre el territorio de Baja California, informó Jorge Menchaca Sinencio, presidente de la Cámara de Comercio de Ensenada.

 

Indicó que entre los participantes existe malestar en la regata, además de la inseguridad por el cobro que les aplican las autoridades migratorias.

 

“El cobro corresponde a los extranjeros que están por más de cinco días en el país y aunque los veleristas sólo vienen por un día o dos a la competencia, se les obliga a realizar ese pago como si permanecieran más días”, señaló. 

 

Menchaca Sinencio lamentó la disminución del número de participantes en la regata, ya que dijo además de ser una de las más antiguas de la Costa Este de los Estados Unidos y del mundo, solía ser también una de las más importantes en cuanto al número de participantes con sus yates, que superaba las cifras de 300 o hasta 400 embarcaciones.

 

El presidente de la Canaco local destacó que en esta edición de la regata se logró recaudar nueve mil dólares en apoyo al Centro de Atención Especializada para Autistas de Ensenada, aportación que desde hace dos años en distintos montos vienen realizando los directivos de Newport Ocean Sailing Association.