Fernando Valenzuela nuevo Comisionado de LMB

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Ciudad de México, Mexico, 

En una reunión de dueños de equipos de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), los empresarios decidieron nombrar al ex ligamayorista Fernando Valenzuela como su nuevo Comisionado.

Con autonomía y labores meramente deportivas, “El Toro” Valenzuela trabajará de la mano de Javier Salinas, presidente de LMB, para sacar adelante todas las necesidades del circuito veraniego.

“Hemos tomado la decisión de nombrar como Comisionado de la Liga Mexicana de Beisbol a Fernando Valenzuela. Él está muy contento del nombramiento, y ha aceptado la petición de todos los dueños de que él sea el nuevo Comisionado”, declaró Gerardo Benavides, propietario de los Acereros de Monclova y presidente del Consejo de Administración de la LMB.

Benavides dejó en claro que la labor de Valenzuela es netamente en el aspecto deportivo, mientras que Javier Salinas se mantendrá al frente del circuito en los temas administrativos.

“El Comisionado no tiene absolutamente nada que ver en los temas administrativos de la LMB, y está separado de la presidencia de la Liga Mexicana. Con autonomía total para tomar de decisiones que él deba de tomar a nivel deportivo”, señaló Benavides.

El mismo presidente del Consejo de Administración de la LMB indicó que buscarán reanudar las negociaciones con las Grandes Ligas sobre el convenio de transacciones de peloteros “estamos abiertos a platicar para darle el seguimiento al tema de Grandes Ligas”, argumentó Benavides.

“Yo creo que todo es manejable, de alguna manera afecta a todo mundo, pero hay soluciones y se van a dar soluciones. Pronto les vamos a dar buenas noticias sobre ese tema”, agregó.

Por primera ocasión desde el 16 de octubre de 2017 que fue nombrado presidente de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), Javier Salinas no estuvo presente en una junta oficial del circuito, en la que uno de los temas centrales fue el análisis de su continuidad.

Salinas estuvo presente a temprana hora de este jueves en el recinto que fue sede de la junta de dueños en un hotel de Monterrey, pero después abandonó el recinto para dar paso a que los directivos llevaran a cabo su reunión.

Vía: Roberto Espinioza/PuroBeisbol





Valenzuela tiene una semana redonda

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Ciudad de México, Mexico, 

Fernando Valenzuela recibió ayer con orgullo la noticia de que había sido seleccionado como uno de los ganadores al Premio Nacional del Deporte, en una semana de festejos para él, la cual inició con el título de Dodgers el pasado martes y que tendrá su gran cierre este domingo al celebrar sus 60 años.


    Me hablaron para darme la noticia de que había sido elegido como ganador del Premio Nacional del Deporte y me puso muy contento esa noticia porque hay tantos jugadores y atletas muy destacados en México y el ser elegido es un orgullo para mí”, dijo emocionado El Toro Valenzuela en entrevista telefónica con Excélsior.


El máximo beisbolista mexicano recibirá la distinción el próximo 20 de noviembre en una ceremonia encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en el marco de los festejos por el aniversario de la Revolución Mexicana.


    Esperemos que todo esté bien, que la situación actual que hay de covid-19 lo permita para poder viajar. Esperemos poder estar allá y saludar a todos”.


Valenzuela dijo que la postemporada se la pasó “encerradito en casa” debido a la pandemia y fue de esa forma como vio la coronación de los Dodgers.

    Es una semana bastante agradable. Dodgers ganó la Serie Mundial. Los aficionados siempre habían estado apoyando y no se había podido concretar. Ahora que ganó el equipo la gente está contenta en el área de Los Ángeles”, expresó.  


El Toro de Etchohuaquila dijo que la clave para el título fue que Dodgers jugó como un auténtico equipo, mientras que destacó la participación de los mexicanos Julio Urías y Víctor González.


    Julio siempre ha tenido confianza, pasó por una cirugía de su brazo de lanzar y  es un mérito grande para él seguir lanzando porque es una rehabilitación bastante fuerte y debes tener la concentración para no perder el ánimo de seguir y hacer bien las cosas. Ahorita estamos viendo lo que trabajó para recuperarse, ojalá le sigan dando oportunidades que es lo que merece por esta actuación.


    A Víctor no lo conocía mucho, pero es un pitcher que tiene valor y desafía al bateador, que es lo más importante, tener esa confianza en sus lanzamientos”.


Valenzuela, quien actualmente se desempeña como comentarista de televisión en español de los Dodgers, opinó que hay una base de jugadores para pensar que el equipo angelino pueda ganar más campeonatos.


    Hay juventud, algunos jugadores estarán por los menos cinco años en la organización, así que esperemos que vengan otros campeonatos”.


-¿Recibirá anillo de campeón?


    Eso esperamos, en las ocasiones que Dodgers fue campeón de Liga Nacional sí me tocó anillo. Es parte del honor de ser campeón, aunque es muy diferente ganarlo en la lomita”.


EL DATO


    Fernando Valenzuela recibirá por primera ocasión el Premio Nacional del Deporte y será en la categoría de trayectoria deportiva.

    El sonorense generó la Fernandomanía en 1981 al ganar el Cy Young, Novato del Año y la Serie Mundial.

    Es el mexicano con más victorias en Grandes Ligas con 173.

    Fue seleccionado a seis Juegos de Estrellas.

    Sumó 2,074 ponches en su carrera de 17 temporadas.

    Ingresó al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano en 2018.

    Fue incluido en la selección de mejores latinos de todos los tiempos de Grandes Ligas.

    Su número 34 está retirado de todos los equipos de Liga Mexicana de Beisbol.




Fernando Valenzuela pronosticó, ante sus compañeros juego sin hit ni carrera

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Al estilo de Babe Ruth, quien presagió uno de sus famosos cuadrangulares en plena Serie Mundial, Fernando El Toro Valenzuela pronosticó, aunque como una broma ante sus compañeros de los Dodgers, el único juego sin hit ni carrera que lanzó en las Grandes Ligas frente a los Cardenales de San Luis, hace exactamente 30 años.


Todo comenzó a dos mil 500 millas de Los Ángeles, en otro país y a media hora de que los Dodgers iniciaran su partido. En Toronto, Canadá, Dave Stewart, un poderoso lanzador que había sido compañero de Valenzuela en los Dodgers en el título de la Serie Mundial de 1981, era ya un pitcher estelar con los Atléticos de Oakland.


El diestro completó el doble cero en la victoria de 5-0 sobre los  Azulejos, acciones que fueron seguidas desde un televisor en el clubhouse de los Dodgers.


    Bueno, ya vieron uno en televisión, ahora van a ver uno en vivo”, dijo Fernando Valenzuela a sus compañeros antes de salir a calentar al bullpen.


La peculiar anécdota fue revelada por el propio manager de los Dodgers, Tommy La Sorda, al término del encuentro del 29 de junio de 1990, mientras que El Toro aceptó que “lo hice bromeando”. A lo que el experimentado manager le respondió: “sí, pero sucedió, así que fue una predicción bastante buena”.


Lo cierto es que el zurdo sonorense, quien había batallado desde dos temporadas atrás por una lesión en el hombro izquierdo, salió inspirado aquella calurosa noche de verano en el Dodger Stadium para completar una hazaña más en su ilustre trayectoria con una imagen inusual al portar anteojos dorados tipo aviador, que por un corto tiempo lució en la loma.


Fue la primera ocasión en la historia moderna de las Grandes Ligas que se lanzaron dos juegos sin hit ni carrera en el mismo día y la primera vez con pitchers de ambas ligas.


Valenzuela y Stewart fueron los héroes de aquella jornada, que además fue la primera doble cartelera que transmitió la cadena deportiva ESPN a nivel nacional en los Estados Unidos.


Ambos lanzadores tuvieron situaciones en común más allá de ser compañeros con los Dodgers. Los últimos bateadores que eliminaron para completar el doble cero fueron dominicanos: Tony Fernández, de los Azulejos de Toronto, y Pedro Guerrero, de Cardenales de San Luis.


Como parte del equipo angelino, Valenzuela y Stewart fueron testigos del sin hit ni carrera que les tiró Nolan Ryan en el Astrodome en la temporada 1981.


Pero el dato más significativo es que ambos lanzadores portaron el famoso 34 en sus franelas en aquella jornada memorable de hace tres décadas.

El Toro Valenzuela estuvo a punto de que su joya no se diera incluso desde el primer bateador. El veloz Vince Coleman pegó un rodado difícil a las paradas cortas que fue fildeado en forma magistral por el dominicano Alfredo Griffin, quien con un certero disparo al primera base, Eddie Murray, puso out, en una jugada muy cerrada, al seis veces campeón de bases robadas de la Liga Nacional.

En esa primera entrada también hubo un batazo corto de Pedro Guerrero al jardín izquierdo el cual no pudo ser atrapado por Kirk Gibson y que se marcó error.

Después de esa jugada, el zurdo mexicano retiró a 17 bateadores consecutivos hasta que en la séptima entrada, con un out, regaló par de pasaportes a Guerrero y Todd Zeile, pero luego salió de la amenaza al dominar a Terry Pendleton con elevado al izquierdo y a José Oquendo con un rodado a la tercera base.

Como suele ocurrir en un partido sin imparables, hay una o varias situaciones que marcan el rumbo del encuentro. Además de las jugadas en la primera entrada, hubo otro momento clave ya en el octavo episodio. Con dos fuera, se paró en la caja de bateo el emergente Craig Wilson, quien por primera ocasión en su carrera enfrentaba al Toro Valenzuela. En cuenta de una bola sin strikes, conectó un largo batazo entre jardín central y el izquierdo. El patrullero Stan Javier, con una veloz carrera, logró darle alcance a la esférica muy cerca de la barda para completar una sensacional atrapada y ponerle el punto final al penúltimo episodio.

Javier había llegado unas semanas antes a los Dodgers en un cambio con los Atléticos. El dominicano no estaba contemplado para jugar ese partido ante Cardenales y minutos antes fue incluido en el line up, como jardinero central, debido a que Kal Daniels presentó una dolencia en la espalda.

La ofensiva de Dodgers apoyó a El Toro Valenzuela desde la primera entrada con una carrera, luego llegaron cuadrangulares de Hubie Brooks y Juan Samuel, mientras que el zurdo mexicano aportó también con el madero al pegar imparable en la séptima entrada y luego anotó por sencillo impulsador de Kirk Gibson.

Con la pizarra de 6-0 llegó la emoción de la novena entrada.

Valenzuela contabilizaba 107 lanzamientos y lucía agotado, pero nada lo iba a detener. El Toro se acomodaba sus gafas y la gorra en repetidas ocasiones. Se notaba más tenso que incluso la novena entrada del partido de la Serie Mundial que le ganó a Yanquis en su temporada de novato.

Coleman apareció a la caja de bateo y se fue ponchado sin tirarle ante el reclamo del veloz jardinero, quien consideró fuera de zona el tercer strike, lo que fue su tercer chocolate de la noche. Los 38 mil 538 aficionados celebraban como en los años de la Fernadomanía y esperaban ansiosos los dos outs. Willie McGee recibió pasaporte en cuatro lanzamientos para aumentar la tensión y el destino puso en la caja de bateo a Pedro Guerrero, excompañero y amigo de Valenzuela, pero que esa noche quería ser el aguafiestas y celebrar, curiosamente, su cumpleaños 34, el famoso número del Toro.

En cuenta de cero bolas y dos strikes, el sonorense lanzó una recta alta al dominicano, quien sacó un fuerte rodado que amenazó con partir el diamante. Valenzuela, ganador de un Guante de Oro en su carrera, reaccionó rápido y alcanzó a meter su manopla para desviar el viaje de la esférica que le cayó ideal al segunda base Juan Samuel, quien sólo pisó la segunda colchoneta y completó el doble play en la inicial para consumar el out 27.

    Fue una bola rápida arriba y la golpeé bien por enmedio, pero él (Valenzuela) consiguió rozarla. Si no la frena, creo que habría pasado”, expresó Guerrero tras la derrota de los Cardenales.

Fernando Valenzuela fue abrazado por su eterno catcher Mike Scioscia, mientras que lo rodearon sus compañeros en la loma. Luego de 119 lanzamientos, siete ponches y tres bases por bolas, había completado su primer juego sin hit ni carrera en su trayectoria, lo que a la larga fue un digno colofón a su paso con los Dodgers, equipo que lo dio de baja en plena pretemporada de 1991.

    Realmente estoy muy feliz de tener este juego”, dijo Valenzuela. “En México, jugamos dobles juegos y tuve un sin hit en siete entradas y muchos juegos de un hit. Esto es más emocionante, porque tienes que enfrentar a todos los buenos bateadores”, agregó el zurdo mexicano al término del encuentro que duró 2 horas con 41 minutos.

Lo que esa noche comenzó como una broma de Valenzuela terminó por completar una de las hazañas más recordadas en las Grandes Ligas.
 
En el diamante

    El Toro Valenzuela llegó a Los Ángeles para hacer historia. El zurdo no desaprovechó aquel juego ante los Cardenales.
    El de Fernando Valenzuela fue el juego sin hit 222 en la historia de Grandes Ligas y el primero para Dodgers desde 1980.
    La franquicia de los Dodgers es la que más dobles cero ha concretado con 26, incluyendo uno combinado en Monterrey en la temporada 2018.
    Valenzuela tenía sólo un triunfo en sus últimas seis salidas antes del sin hit.
    En esa temporada promediaba 9.2 hits por cada nueve entradas lanzadas antes del doble cero.
    Randy Johnson (2 de junio) y Nolan Ryan (11 de junio) también lanzaron doble cero en ese mismo mes de 1990, lo que marcó un récord al igual que los siete totales en esa temporada.



A 29 años del inicio de la "Fernandomanía"

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NTX,  Estados Unidos, California, Los Angeles, 

El 9 de abril es una fecha que quedará marcada en la historia del beisbol mexicano, ya que hace 29 años Fernando Valenzuela hizo su primera apertura en el las Grandes Ligas, con los Dodgers de Los Ángeles, dando inicio a la "Fernandomanía".


En aquella temporada de 1981, ante la lesión del abridor Jerry Reuss 24 horas antes, el manager Tommy La Sorda decidió darle la pelota al oriundo de Etchohuaquila, Sonora, a pesar de las múltiples criticas por su falta de experiencia y novatez.


Tradicionalmente, en el Opening Day, las organizaciones y los managers depositan su confianza en un pitcher, mandando un mensaje al resto de los equipos de la liga sobre quien será su caballo de batalla para toda la temporada.

Para un lanzador, ser abridor del primer juego de la campaña significa un honor, ya que representa ser el líder de la rotación abridora y el principal serpentinero de su equipo.

Valenzuela subió a la lomita del Dodger Stadium ante más de 50 mil almas presentes para enfrentar a los Astros de Houston, quienes fueron maniatados severamente por el "Toro de Etchohuaquila" durante todo el encuentro.


En el primer episodio, Valenzuela Anguamea permitió un imparable; mientras que en el segundo y tercero solo regaló una base por bolas, pero sin permitir daño y colgó el cero.

Fue hasta el cuarto inning cuando Fernando consiguió su primer chocolate en su primera apertura, ante César Cedeño, y aunque en el sexto rollo recibió par de imparables, sus compañeros le ayudaron para mantener la blanqueada.

Tras tolerar un imparable en la novena entrada, el sonorense cerró con broche de oro y con un lanzamiento de "tirabuzón", su pitcheo estrella, consiguió el out 27 para provocar la algarabía de la afición y dar inicio a la "Fernandomanía".

Acto seguido, el cátcher Mike Scioscia, el mánager Lasorda y sus demás compañeros corrieron a felicitar al mexicano, debdio a que había brindado un recital de pitcheo en su primer inicio en las Ligas Mayores de Beisbol.

Aquella tarde, el "Toro" tiró una joya de pitcheo durante nueve entradas, permitiendo cinco hits, dos pasaportes y recetando cinco ponches para silenciar a los bates de los siderales y apuntarse su primera victoria en la "Gran Carpa".

Tras esa salida, la temporada del 81 sería inolvidable para Fernando, quien se convirtió en un ídolo en Las Mayores, y firmó una campaña de ensueño al convertirse en el primer jugador en ganar el premio al Novato del Año y el Cy Young en un mismo año, además de ganar la Serie Mundial con los californianos.

Con motivo de aquel 9 de abril de 1981, los Dodgers de Los Ángeles recordaron aquella hazaña a través de un vídeo en el cual se observa el ponche de Valenzuela a Dave Roberts para culminar con el partido y las felicitaciones de sus compañeros.

"¡Qué manera de empezar! ¡Fernando Valenzuela consigue su primera victoria en su primera salida en la MLB, y con una blanqueada!", fueron las palabras del narrador Vin Scully al término del juego.



Fernando Valenzuela celebra 59 años como leyenda del beisbol

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Ciudad de México, Mexico, 

Fernando Valenzuela celebrará su cumpleaños 59 como uno de los mejores pitchers en la historia del beisbol mexicano, recordado por su legado en Los Dodgers de los Ángeles de la Ligas Mayores del Beisbol.

Nacido el 1 de noviembre de 1960 en Etchohuaquila, una localidad del municipio de Navojoa, Sonora, inició su carrera representando a Ciudad Obregón en un juego de estrellas, siendo ganador del premio al Jugador Más Valioso, cuando apenas tenía 17 años.

Fue lanzador de Mayos de Navojoa y de los extintos Tuzos de Silao, pero fue hasta su etapa con Leones de Yucatán cuando llamó la atención del cubano Mike Brito, cazatalentos de Los Dodgers de Los Ángeles que lo adquirieron en 1979 para mandarlo a las sucursales doble-A y triple-A.

Para 1981, ante las lesiones de varios abridores, el mánager Tom Lasorda decidió darle la oportunidad a "el Toro de Etchohuaquila" de ser el lanzador del partido inaugural de la temporada.

Nadie imaginaría que, en ese año, el sonorense firmaría una de las mejores temporadas en lo colectivo y en lo personal. Aquel joven con la franela "34" terminaría la campaña con marca de 13-7, siendo recordado por su gran actuación en el juego tres de la Serie Mundial, en el cual maniató a los Yankees de Nueva York.

Valenzuela encabezó la remontada de Dodgers, que a la postre se coronarían campeones de la MLB, lo que le valió para ser el primer jugador en conseguir el premio Cy Young y el de Novato del Año en la Liga Nacional, en un mismo año.

De 1981 a 1986 fue seleccionado para ir al juego de las estrellas. En 1986, quedó en segundo lugar en las votaciones por el Cy Young, pese a lograr 21 victoria en la temporada.

Más tarde, en 1990, "el Toro de Etchohuaquila" rozó la perfección con los Dodgers al tirar un juego sin hit ni carrera ante los Cardenales de San Luis.

Jugó 11 temporadas con Los Ángeles, en las que consiguió dos Series Mundiales (1981 y 1988), seis nominaciones al juego de estrellas, obtuvo el récord de más blanqueadas (seis) en la temporada de 1981, un guante de oro (1981) y tres bates de plata (1981, 1986 y 1989).

A partir de 1991, prosiguió su carrera con los Angelinos de Los Ángeles, Orioles de Baltimore, Filis de Filadelfia, Padres de San Diego y Cardenales de San Luis; con este último cerró su etapa como jugador profesional en 1997.

Sus grandes actuaciones lo convirtieron en un ídolo para la afición mexicana y logró aumentar la difusión del beisbol en territorio nacional. Es por ello que la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) decidió retirar el número 34 en honor al "Toro".



Monterrey está apto para un equipo de Grandes Ligas: Fernando Valenzuela

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Medio Tiempo,  Mexico, Nuevo León, Monterrey, 

El expelotero Fernando Valenzuela consideró que Monterrey es una ciudad apta para ser sede de un equipo de la Major League Baseball.

“Es una ciudad que ha crecido bastante, desde el 96 no había estado por acá, unas facilidades que tienen, no veo ningún problema sobre eso. Considero que es una ciudad apta para tener un equipo de Grandes Ligas, en lo que se refiere a la ciudad y el estadio”, comentó en conferencia de prensa previo al segundo juego de la serie entre San Diego Padres y Los Angeles Dodgers.

La directiva de Sultanes recientemente realizó una inversión de 100 millones de pesos para obtener la certificación y así albergar una serie de Grandes Ligas como la que se disputa este fin de semana en la Sultana del Norte.

Luego de presenciar la remodelación del Estadio de Beisbol Monterrey, el mejor lanzador que ha dado México consideró que hay infraestructura suficiente para que otros recintos del país también sean de Ligas Mayores.

“En México tenemos unas facilidades de parques para jugar un buen beisbol, ahorita lo que se ve en la ciudad de Monterrey y del estadio, pero claro, en otras ciudades hay estadios que pueden ser de las Ligas Mayores, pero es una opinión mía, no digo que pueden hacerlo. El beisbol es muy grande en México y es una de las cosas importantes”, comentó.