Aníbal, del abismo a abrir el Juego 3 de la SM
En poco más de un año y medio, Aníbal Sánchez ha pasado de estar en peligro de ver terminar su carrera como lanzador a ser el abridor de los Nacionales contra los Astros para el Juego 3 de la Serie Mundial el viernes en el Nationals Park.
“Para muchos, quizás era más fácil era decir que Aníbal se retirara, que no continuara”, expresó el maracayero, quien tratará de ayudar a los capitalinos a tomar una ventaja de 3-0 en el Clásico de Otoño. Creo que hay mucha gente que apostaron a mí, otras que no, pero gracias a Dios estoy aquí”.
Es poco decir. Sánchez tuvo marca de 11-8 y efectividad de 3.85 en 30 aperturas de la temporada regular, pero 11-2 con 3.42 desde el 29 de mayo, cuando regresó de un tirón en la corva izquierda.
Es un Sánchez bien diferente al de hace dos años, cuando el veterano venía de tener promedio de carreras limpias de 6.09, EFE+ de 71 y WHIP de 1.515 entre el 2016 y el 2017, sus últimas dos temporadas con los Tigres. Luego, tras permitir seis carreras en 5.0 innings en la pretemporada del 2018 con los Mellizos, el derecho fue dejado en libertad.
Sánchez no se dio por vencido. Con otra oportunidad en los Bravos, el serpentinero empezó a exhibir un repertorio más amplio que en años anteriores, lo cual incluía una recta cortada, una recta de cuatro costuras, otra de dos costuras, un slider, una curva, un cambio de velocidad y hasta la lentísima “mariposa”.
El resultado fue efectividad de 2.83 con Atlanta la campaña pasada y un contrato de dos años y US$19 millones con los Nacionales a partir de la presente temporada.
“Orgulloso de lo que estoy viviendo. Bendecido”, dijo Sánchez, quien tendrá como rival monticular a Zack Greinke el viernes. “Muy agradecido con Dios. Quizás en el 2016, 2017, no fueron años muy buenos en mi carrera. Estar hoy en día aquí es sentir esa parte de que gracias a Dios, no me rendí. Gracias a Dios, continué trabajando y gracias a Dios estoy aquí en este momento, disfrutando de una Serie Mundial más”.
Sánchez, un veterano de 14 temporadas de Grandes Ligas, ha sido un sólido cuarto abridor de Washington detrás de Max Scherzer, Stephen Strasburg y Patrick Corbin. En las primeras dos rondas de los playoffs, el diestro permitió una sola carrera en 12.2 entradas, con 14 ponches.
“Cuando lo firmamos, sabíamos la clase de lanzador que era”, dijo el manager de los Nacionales, el boricua Dave Martínez. “Habíamos escuchado algunas cosas de lo que podía ser en el clubhouse y el dugout. Ha sido todo eso y más”.
El viernes, Sánchez estará lanzando después de dos semanas de descanso, tras tirar 7.2 ceros de un solo hit ante los Cardenales en el Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional el 11 de octubre. No obstante, el también veterano de la Serie Mundial del 2012 con los Tigres asegura que eso no será un factor.
“A esta altura de la temporada, descanso, no descanso…uno viene lanzando pelota desde febrero”, comentó el serpentinero de 35 años. “Un descanso más, un descanso menos, no creo que sea una parte que afecte a uno. Éstas series son difíciles, son muy, muy difíciles. A la final, nada está escrito; todo es bien difícil. Yo creo que con descanso o sin descanso, las cosas van a salir como tienen que salir”.
Martínez piensa igual.
“Él lo entiende y es un profesional”, manifestó el piloto, quien reveló que Sánchez tiró en días pasados un juego simulado de 80 lanzamientos. “Se ha mantenido preparado. Ha estado involucrado en su programa todo el tiempo”.