El joven estratega, Benjamín Mora, estuvo en exclusiva en Grupo Cadena platicando sobre su experiencia en Malasia y en su carrera cono director técnico. 

El mexicano ha sido multi campeón en Malasia, donde ha batallado para ganarse su lugar en las bancas pero ahora, es un hombre respetado en aquél país. 

"Yo me encontrado con muchas sorpresas, tuve que ser relegado del primero equipo en alguna ocasión en Malasia porque la licencia del Endit no me avalaba para dirigir torneos internacionales en Asia, me sorprendieron porque era la única licencia que tenía en ese momento", dijo Benjamín. 

Tal vez la única comparación con Mora es Javier Aguirre, pero el joven director técnico ha tenido que ganarse el respeto de todo el balompié, tricolor y mundial. 

"Es más grande el deseo que la conformidad, no tengo otra forma de pensar", dijo Benjamín. "Si nosotros prorizamos lo emocional y la familia y estas cosas que te van a atar sentimentalmente, no podrás ser el mejor", aseguró. 

"Si ya gané 4 títulos, ahora quiero más en 2020 y tengo una estrategia para ganar los cuatro títulos".

Si no fuera por la comida, Benjamín Mora tendría la vida perfecta, a más de 16 mil kilómetros de casa. Se trata de un técnico mexicano que picó piedra en las divisiones de ascenso hasta que el instinto de aventura se impuso, se fue a dirigir al futbol de Malasia, a la Súper Liga, donde se ha vuelto el mejor entrenador en los últimos tres años, ganando el tricampeonato con su equipo, el Johor Darul Takzim, o como todos lo conocen, el JDT.

“Estoy aquí desde hace cinco años. Quería dirigir en Primera División, aunque nunca pensé que sería en Malasia”.

Eso hasta que un contacto argentino le dijo: “Están buscando técnico en un club en el ascenso de Malasia y no lo dudé, sólo quería una oportunidad para poder mostrarme y bueno…”.

Mora ha conseguido los títulos en las temporadas 2017, 2019 y 2020, que está a punto de terminar, “y vamos por la Copa, y los torneos internacionales de Asia”.

¿Cuál es el secreto del éxito?, quizá sea lo nuevo, lo extraño, pero antes que nada “el profesionalismo. Ningún mexicano había venido acá, y les llamó la atención. Al principio los jugadores no estaban muy acostumbrados a practicar de esta forma. Poco a poco nos fuimos estableciendo [su principal auxiliar es el también mexicano Leonardo Medina],  y dimos resultados”.

Por ahora está feliz en Malasia, y volver a México es un sueño, pero no una obsesión. “En la Liga Mexicana a veces suceden cosas que no entendemos, entrenadores que van de equipo en equipo, sin proyectos sólidos y a las cuatro fechas [sin ganar] te vas a tu casa; sin embargo, ir a México sería un paso adelante”.

Llevar jugadores tricolores a Malasia no está en sus planes, “no me dedico a eso, sí me han ofrecido, pero no entro en ese juego”.

Pero no todo es futbol, Malasia es mucho más que eso, “la cultura  las tradiciones, todo es diferente,  pero a todo me he acostumbrado, todo lo respeto y me han respetado”. El único “pero”, lo único que añora extraña,  desea, “es la comida mexicana”, la mejor del mundo… “Aquí la comida no es mi favorita, extraño eso”, por lo demás, seguirá en busca del éxito.