LeBron James festeja sus 35 años de edad en su temporada 17
Cuando se alude a LeBron James se trata de un personaje que ni siquiera en el día de su cumpleaños tiene un respiro para estar en el centro del debate, en la mesa de discusión, e incluso ni con la colección de marcas, hazañas y estadísticas que deben levantar las cejas de expertos y aficionados al basquetbol.
Un día después de convertirse en el único jugador en la historia de la NBA en capturar 9 mil rebotes y repartir 9 mil asistencias, y en una campaña en la que, pese a desempeñarse como delantero bajo, encabeza a la liga en asistencias en su campaña 17 en la NBA, a muchos críticos, estancados en el 'esplendor' de la década de los 90, todo esto les parece insuficiente.
De origen humilde, inestable, hijo de una joven madre soltera con varios empleos y que se vio orillada a mudarse muchas veces durante la niñez del hoy astro de la NBA, saltó de la preparatoria St. Vincent-St. Mary en Akron, Ohio, directo a la NBA.
Pero ese salto es algo que también le critican, como si no haber jugado baloncesto universitario les restara mérito a sus logros y que curiosamente no achacan a otros como, por ejemplo, Kobe Bryant o Kevin Garnett. James llegó a la Liga a los 18 años y desde su primer juego, ha estado bajo un duro escrutinio, pagando el costo de que alguien le haya colocado en la espalda la etiqueta de ‘The Chosen One’ o El Elegido.
Luego de siete temporadas con los Cleveland Cavaliers, el equipo que lo reclutó como la primera selección global en el Draft de 2003, y un viaje a las Finales NBA que perdió por la disparidad de talentos y equipos ante los San Antonio Spurs, y una etapa marcada por la frustración de ponerle todo el peso del equipo en su espalda. James se marcha de manera polémica al Miami Heat, donde ganó dos títulos de la NBA, en ambos MVP de las Finales, liderando en puntos, rebotes y asistencias al equipo, pero ese asunto, para los más críticos, sigue siendo un imperdonable desliz.
Después de cuatro campañas en el sur de la Florida, el King James volvió a Cleveland para encabezar una de las más grandes proezas de la historia de la NBA, conduciendo a un equipo a darle reversa a un déficit de 1-3 en las Finales NBA en 2016, ante el equipo que había erradicado la aparentemente irrompible foja de 72-10 de los Chicago Bulls de Michael Jordan en 1995-96: los Golden State Warriors de Steve Kerr, Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green para darle a los Cavaliers su primer título NBA, de manera categórica y enfática, en un séptimo juego, ante un rival histórico.Tras una campaña de debut complicada en Los Ángeles en 2018-2019, en la más reciente aventura de James, en la que ni siquiera logró clasificar al equipo a los Playoffs, ahora, de la mano de Anthony Davis en su segundo año con los Lakers, el veterano delantero sigue amasando récords, destruyendo otros y, les guste a muchos o no, continúa afianzándose día a día en la discusión de los mejores jugadores de todos los tiempos en una carrera que quizás solo con el paso del tiempo, sus odiadores terminarán por admitir y validar porque está plagada de hitos.
Feliz cumpleaños, LeBron James.