Alonso se aleja de McLaren
Fernando Alonso y McLaren han terminado oficialmente la relación. El español fue embajador de la marca en 2019.
El bicampeón del mundo mantuvo el año pasado los lazos con el equipo de Woking, después de su más reciente estancia en el mismo, entre 2015 y 2018, en lo que fue hasta ahora su última etapa en la Fórmula 1.
En su papel de embajador, Alonso mantuvo estrechos vínculos con McLaren, ayudando a asesorar a los pilotos e ingenieros del equipo y realizando una prueba de neumáticos Pirelli en el coche de 2019.
También formó parte de los esfuerzos de McLaren en las 500 Millas de Indianápolis del año pasado, pero ese intento terminó en decepción cuando no logró clasificarse.
El acuerdo de embajador de Alonso estuvo vigente hasta finales del año pasado, y McLaren ha confirmado que no fue renovado para 2020.
El equipo tenía claro desde mediados del año pasado que sentía que su futuro estaba bien atendido por los actuales pilotos Carlos Sainz y Lando Norris.
Un portavoz de McLaren dijo a Motorsport.com que: "Fernando es un competidor de clase mundial y le deseamos lo mejor para el futuro. Mientras que nuestra relación ha llegado a una conclusión natural, él siempre seguirá siendo parte de la familia McLaren".
Alonso participó recientemente en el Rally Dakar, y su próximo foco de atención competitiva será la Indy 500. La opción más probable para él allí es correr con Andretti Autosport, con quienes ha tenido su única participación en la parrilla.
Sin embargo, ha sido claro en que después de eso podría analizar las oportunidades que tiene para volver a la F1 en el 2021.
"Creo que las razones por las que dejé la Fórmula 1 siguen presentes ahora, con el dominio de un equipo y las carreras un poco demasiado predecibles, pero en 2021 estas cosas pueden cambiar y quizás sea una buena oportunidad allí", dijo durante una aparición en una carrera el año pasado.
Alonso participó en un total de 95 grandes premios para McLaren en 2007 y luego de 2015 a 2018, ganando cuatro carreras en total. También compitió en la Indy 500 de 2017 en un coche con motor Honda.