Con varias armas de Pats, Titans los enfrentan en playoffs
En los playoffs que siguieron a la temporada de 2017, el gerente general de los Titans, Jon Robinson, destituyó al entrenador Mike Mularkey, tras una derrota ante Nueva Inglaterra en la ronda divisional. Y al hacerlo, el dirigente se apoyó en su pasado con el objetivo de labrar un nuevo futuro para Tennessee.
Cinco días después, Robinson, quien comenzó como cazatalentos en la NFL con Nueva Inglaterra de 2002 a 2013, contrató como entrenador a Mike Vrabel, quien había ganado tres anillos del Super Bowl como linebacker de los Patriots.
Tennessee contaba ya con un exjugador de los Patriots, el cornerback Logan Ryan. Vrabel incorporó a más jugadores y colaboradores que habían tenido vínculos con Nueva Inglaterra. Ese grupo incluía al exasistente de los Pats, Dean Pees, como su coordinador defensivo; al cornerback Malcolm Butler, quien salvó el Super Bowl de 2015, y al corredor Dion Lewis.
Fue un esfuerzo evidente por sembrar en Tennessee algunas semillas producidas por el entrenador de Nueva Inglaterra, Bill Belichick, cuya disciplina y cultura de trabajo se conocen desde hace tiempo como el “Patriot Way”.
“¿No es ésa la calle donde está el cine?”, bromeó Vrabel esta semana cuando se le hizo referencia a ese término.
Dos temporadas después, los esfuerzos de Robinson y Vrabel se combinaron con la llegada del ex quarterback de los Dolphins, Ryan Tannehill, quien desde hace tiempo causa problemas a los Patriots. Y todo ello ha desembocado en un duelo de comodines previsto para el sábado, entre los Titans y la franquicia a la que han tratado de emular.
Cierto o no, Vrabel insiste en que no piensa en los vínculos entre ambos equipos.
“Esto no se trata de mi carrera, de mis ocho años en Nueva Inglaterra”, dijo Vrabel, quien guio a los Titans a un triunfo por 34-10 sobre los Pats la temporada pasada en Nashville. “Se trata de los Titans y de nuestra preparación para ir allá y enfrentar a un equipo que ha ganado tres veces el Super Bowl en los últimos cinco años. En ese periodo, tienen un récord de 8-0 como locales, tienen la defensa número uno, tienen al mejor entrenador y al mejor quarterback. Así que será todo un desafío”.
Nueva Inglaterra se mide con uno de los equipos más enrachados. Los Titans ganaron siete de sus últimos 10 compromisos para conquistar su segundo boleto de playoffs en tres temporadas, y su primero bajo las órdenes de Vrabel.
Ryan fue reclutado en el draft por los Patriots en 2013, y pasó sus primeras cuatro campañas en Nueva Inglaterra. Consiguió anillos de Super Bowl durante las temporadas de 2014 y 2016. Ha dicho que aprovecha las lecciones que aprendió durante su estadía en Nueva Inglaterra.
“Es una nueva temporada, y tenemos que jugar bien el sábado. Es lo que he aprendido por haber sido un Patriot”, dijo. “No importa lo que hiciste. No importa... dónde vas a jugar. Debes tomarte un partido a la vez en los playoffs y tienes que dar todo”.
La derrota de Nueva Inglaterra ante Miami en el último encuentro de la temporada regular lo relegó a la ronda de comodines por primera vez desde 2009, cuando cayó 33-14 ante Baltimore. Los Patriots tienen una foja de 2-1 en el partido de comodines durante la era de Belichick y del quarterback Tom Brady.
Pero en estos años, nunca han avanzado al Super Bowl cuando han tenido que disputar ese duelo de primera ronda de los playoffs.
“Tenemos una oportunidad de emprender una gira de la revancha”, destacó el linebacker de los Patriots, Kyle Van Noy. “¿Qué mejor forma de comenzar que ante Tennessee, que nos ganó el año pasado? Hay una gran motivación. No estábamos contentos con nuestro desempeño. Ellos vendrán a nuestra casa. ¿Qué mejor forma de iniciar los playoffs?”.