Wilder y Fury se disponen a despejar las dudas
Las mejores peleas llegan cargadas de interrogantes y son muchas las que rodean a Deontay Wilder y Tyson Fury en su combate de revancha, que podría ser el duelo más trascendental en la categoría de los pesados desde que Lennox Lewis demolió a Mike Tyson hace 18 años en Memphis.
Por lo general, los mejores peleadores ofrecen respuestas, y es lo que convierte el pleito del sábado en una función imperdible incluso para los aficionados casuales.
¿Puede opacar Fury a Wilder con su boxeo como ocurrió en la primera contienda, que finalizó en empate? ¿Puede Wilder asestar los mismos golpes devastadores que enviaron a Fury a la lona en el 12do asalto de esa pelea, en su 11ra defensa del campeonato?
¿Es posible que uno de estos dos pesos completos brinde al boxeo, y a la división, el campeón que han añorado durante todos estos años?
No se pierdan la función del sábado en busca de las respuestas a todas estas preguntas, en un pleito que ha tomado tal magnitud que incluso fue mencionado por la senadora Amy Klobuchar en el debate entre aspirantes demócratas a la candidatura presidencial en Estados Unidos, donde la pelea se transmitirá en la modalidad de “pago por ver”.
“El boxeo está de vuelta”, aseguró el promotor Bob Arum. “Y como un deporte realmente importante, ya no más como un deporte de nicho”.
La división de los pesados está también de regreso. Wilder y Fury encabezan una lista de atractivos peleadores que incluye al también británico Anthony Joshua y al regordete pero carismático mexico-estadounidense Andy Ruíz Jr.
Wilder y Fury podrían ganar 40 millones de dólares cada uno en su anticipado combate, y existen varias peleas que podrían provocar que el público vuelva a hablar de los pesos completos.
Una estatura de 2 metros (6 pies 7 pulgadas) y un peso de 104 kilogramos (230 libras) reflejan el poder de Wilder. Fury es un poco más boxeador, pero de una talla incluso mayor con 2,05 metros (6 pies 9 pulgadas) y 122 kilos (270 libras), lo que fue evidente para Wilder mientras se encararon en la última conferencia previa del miércoles.
“Mira lo pequeño que eres, enano”, le dijo Fury a Wilder.
“Tu eres el que terminó tirado”, le respondió Wilder. “Yo estaba encima de ti”.
Es exactamente donde Wilder estuvo en el 12do asalto de su primer combate en Los Ángeles, y pensaba que Fury no iba a levantarse. Tenía motivos para considerar eso, porque los demás peleadores que ha derribado en su carrera — 31 de 42 antes de Fury — no se reincorporaron.
Pero Fury (29-0-1, 20 KOs), no sólo logró levantarse, sino que terminó el combate con fuerza. La decisión oficial fue un empate que no dejó satisfecho a nadie, pero el combate resultó tan entretenido que dejó pocas dudas de un segundo enfrentamiento.
Catorce meses después, aquí están.