Boicot, a 40 años; cuando Carter golpeó a Moscú 1980
En el momento en que las noticias le llegaron, Edwin Moses había dejado ya un promisorio empleo de ingeniería para dedicarse exclusivamente al atletismo.
Moses tuvo suerte. En un muro de su casa colgaba ya una medalla olímpica de oro, y años después le llegaría otra. Otros cientos de deportistas estadunidenses jamás tuvieron una oportunidad. Eran parte de la delegación olímpica de EU para Moscú 1980, que jamás llegó a competir, luego que el presidente Jimmy Carter encabezó la decisión de boicotear los Juegos. Toda la junta del Comité Olímpico de EU (USOC) respaldó la determinación, de la que hoy se cumplen 40 años: fue el 12 de abril de 1980.
Yo había dejado mi carrera a fin de prepararme para los Juegos Olímpicos de 1980, y todo fue muy polémico”, dijo Moses a la AP. “Fue horrible, para mí y para todos”.
Moses recordó que una delegación del USOC, de casi 2,400 personas, se reunió en el hotel Antlers de Colorado Springs, un sábado de abril por la mañana. El vicepresidente Walter Mondale asistía al encuentro. Pero incluso antes de la reunión era un secreto a voces que los deportistas estadounidenses no viajarían a Moscú.
Carter había manejado esta idea desde finales de 1979, luego que la Unión Soviética insistió en una campaña militar en Afganistán.
Mike Moran, exvocero del USOC, relató una conversación ocurrida años después entre Carter y el luchador Jeff Blatnick, quien terminó conquistando el oro en Los Ángeles 1984, cuando fue la Unión Soviética la que boicoteó los Juegos. “Le dije: ‘Presidente Carter, soy un deportista olímpico’’’, dijo Moran, citando las palabras de Blatnick. “Me mira y dice: ‘¿Estabas en el equipo de hockey de 1980?’ Le contesté: ‘No, señor, soy un luchador, del equipo veraniego’. Y él me dijo: ‘¡Oh!, aquélla fue una mala decisión, lo siento’’’.
Lo irónico en este aniversario es que llega justo cuando los Olímpicos de Tokio han debido posponerse por la pandemia de coronavirus. “Como deportista, uno pierde una de sus nueve vidas de gato’’, dijo Moses.
De los 466 deportistas estadunidenses que habían clasificado a Moscú, 219 jamás tuvieron otra oportunidad de competir en JO.
La mayoría de los que sí lo lograron lo hicieron en 1984, cuando el boicot no fue sólo de los soviéticos, sino de numerosos países del bloque oriental.