Cuarentena afecta rutinas de ejercicio de la sociedad
La cuarentena corta rutinas de actividades físicas y ejercicios de las personas, afectando mucho más a unas que a otras.
Si bien es necesaria para evitar el contagio por coronavirus, influye en las agendas deportivas de la gente que ya tenía una vida saludable; no quiere decir que hoy no pueda serlo también, pero se modifica la forma de trabajar el cuerpo y esto genera distintos estados de ánimo (y físicos).
"Trataba de sacar a mi perrita a caminar a la playa unas dos o tres veces a la semana, para que, ella como yo, hagamos ejercicio y tomáramos aire fresco, esto además de ir al gimnasio", contó María Acedo sobre su rutina para activarse, una que ha cambiado desde que inició la cuarentena.
Sus ejercicios estaban acompañados por una dieta balanceada para mantenerse saludable sin embargo, por más que mantiene su disciplina en casa, no son los mismos resultados.
"Trato de realizar actividad física en casa más que nada para sacar toda la energía, preferiría hacerla al aire libre con un ambiente diferente o en el gimnasio".
Y es que para ella el ir al 'gym' terminando sus labores era parte de su agenda, así como caminar en la playa con su mascota, esto último más como segunda opción si no sentía que era suficiente lo primero. Hoy no se puede ninguna de las anteriores.
"Ahora sales con miedo de contagiarte de maneras diferentes", aseguró la gerente de una empresa distribuidora. "El salir a la calle ya se ha vuelto todo un ritual, tienes que usar todas las protecciones".
Sus cinco comidas diarias, acompañadas de rutinas de ejercicio en casa le han mantenido en buen estado físico, sin embargo no se siente igual al estar su cuerpo acostumbrado a mayor intensidad.
"Me resulta un poco tedioso ejercitarme en casa, aunque me alimente bien y haga ejercicio, me siento pesada, sin ritmo, no es lo mismo", confesó la joven María Acedo, de 30 años de edad.
"Aparte de sentir miedo, hay que tener que usar cubreboca, guantes, etcétera, cuando sales, porque realizar tu rutina diaria no se puede", concluyó.
Evidentemente es normal sentirse diferente ante esta situación que el mundo vive, pero por más que se busque algo de cotidianidad, nunca será igual hasta que se 'controle' el virus.