Mayores perdedores del draft, prospectos sin examen médico
El receptor de Florida, Josh Hammond, se dijo “algo conmocionado” por el hecho de no recibir una invitación al evento “Combine” de la NFL.
De igual modo, le sorprendió que no le pidieran acudir al Senior Bowl.
Hammond se conformó con un lugar en el East-West Shrine Game. Imaginó entonces que alguno de los equipos de la NFL que no consiguieron verlo en el juego de estrellas de la segunda categoría tendría otra oportunidad a finales de marzo, durante el denominado “Pro Day” en Florida.
Estaba también esperanzado en las reuniones cara a cara con representantes de los equipos, lo cual le brindaría una oportunidad de mostrar su personalidad y conocimiento del fútbol americano ante gerentes generales, entrenadores y cazatalentos.
Pero una vez que la pandemia de coronavirus arruinó buena parte de las reuniones con los equipos profesionales y las visitas previas al draft, Hammond quedó en un lugar indeseable, lo mismo que muchos otros jugadores.
Es uno de cientos de prospectos que no se han sometido a exámenes médicos formales antes del draft de la NFL. Muchos equipos consideran que lo detectado en esas revisiones es tan importante como lo que se observa en un video.
“No tener esto es algo que apesta”, sentenció Hammond. “Realmente no hay una forma de hacer eso en FaceTime ni en Zoom”.
Hammond acumula cuatro años de buenas jugadas con los Gators. Atrapó 87 pases para 1.138 yardas y seis anotaciones. Logró buena parte de esos números en las dos últimas campañas, bajo las órdenes del entrenador Dan Mullen.
Fue capitán del equipo en 2019 y sólo se perdió un partido (en 2017), por lesión. Su hermano mayor Frankie pasó también dos años en la liga.
Eso debería bastar, pero Josh Hammond sabe que no. Los equipos quieren revisar muy detalladamente a los prospectos antes de invertir en ellos capital del draft y, potencialmente, millones de dólares.
Hace cinco años, los Rams, que jugaban entonces en San Luis, reclutaron a Bud Sasser, procedente de Missouri, en la sexta ronda. Cinco semanas después lo dieron de baja tras detectar problemas en el examen físico.
Sasser presentaba un padecimiento en el corazón que le impedía jugar.
Pese a atrapar 77 pases para 1.003 yardas y 12 touchdowns en 2014, Sasser no fue invitado al Combine ni a algún juego de estrellas. Así que los equipos de la NFL no pudieron someterlo a la rigurosa prueba física a la que sí se enfrentan los participantes en esos eventos.
Y nadie había detectado su problema de salud. El caso de Sasser sirve todavía de recordatorio entre ejecutivos de la NFL.
“Si un jugador estuvo en el Combine y era un chico para las últimas rondas del draft, no hay problema”, dijo el gerente general de los Jaguars de Jacksonville, Dave Caldwell. “El problema mayor que creo que enfrentamos es la parte médica de estos chicos que no estuvieron en el Combine, y tener que reclutar a un jugador de quien no estás seguro al 100 por ciento en la parte médica.
“Una cosa es reclutar a un jugador y no tener el tiempo preciso en que recorre las 40 yardas con vallas o en el cambio de trayectorias. Pero es otra cosa no lograr que un jugador venga y darte cuenta de pronto de que tiene un problema médico que lo descalifica después de que lo reclutaste”.
Otros jugadores notables que no recibieron invitaciones al Combine o a las reuniones con equipos profesionales incluyen a Oluwole Tetiku, defensive end de Illinois; Kevin Dotxon, integrante de la línea ofensiva de Luisiana; Breiden Fehoko, miembro de la línea defensiva de LSU; Mason Fine, quarterback de North Texas; Bryce Huff, defensive end de Memphis; Tyler Huntley, mariscal de campo de Utah; Joey Magnifico, tight en de Memphis; Zach Shackelford, integrante de la línea ofensiva de Texas, e Isaiah Wright, receptor de Temple.
Poco más de una docena de programas colegiales realizaron sesiones con equipos profesionales antes de que la NFL prohibiera todas las reuniones. Ello canceló en términos efectivos las visitas.
Entre los programas que sí sostuvieron reuniones con conjuntos profesionales se destacan Auburn, Clemson, Oklahoma, Oregon y Wisconsin.