NASCAR, la opción en lo que era gran día del automovilismo
El Gran Premio de Mónaco se canceló. Las 500 Millas de Indianápolis están pospuestas hasta agosto.
Sólo la carrera Coca-Cola 600 se realizará como estaba previsto, este fin de semana.
La jornada más celebrada del automovilismo ha quedado reducida a una sola carrera, de 600 millas en el Charlotte Motor Speedway. Se trata de la competición más larga de la NASCAR en el año.
Lo que comenzó como la World 600 en 1959 se convirtió en una carrera nocturna que coronaba un día espectacular para los aficionados del automovilismo.
El domingo, un día antes de que Estados Unidos conmemore a los soldados caídos en las guerras, solía comenzar para los aficionados en este país con la transmisión de la carrera de la Fórmula Uno, desde las calles de Mónaco. Esa carrera comenzó en 1929 y se había realizado ininterrumpidamente desde 1959 hasta que la pandemia de coronavirus arrasó con una buena parte del calendario de la F1.
Luego, la atención se ponía en el Indianápolis Motor Speedway, para la Indy 500. Comenzó como la Carrera Internacional de 500 Millas Sweepstakes en 1911, creció para convertirse en el “Mayor Espectáculo del Automovilismo” y se había realizado en este fin de semana cada año desde 1946.
Roger Penske, en su primer año como dueño de esta carrera y de la IndyCar, ha pospuesto la competición dos meses, debido a la crisis de salud en el planeta.
Ello dejó sola a la NASCAR, monopolizando la atención el domingo por la noche, tal como lo ha hecho en la última semana. Esta serie, mediante un estricto plan de monitoreo de la salud y apoyada por la cercanía de su sede principal con estados que tienen pocas restricciones, ha completado ya tres carreras en la semana más reciente.
La próxima competición es una joya de su corona, que suele servir también como homenaje a los militares estadounidenses. La carrera, que comienza en el ocaso y acaba en plena noche, es en realidad una fiesta del llamado Memorial Day. Héroes caídos son honrados en cada bólido, y hay al final un espectáculo pirotécnico.
En sí misma, la carrera es la más desgastante de la temporada, superando a las demás por al menos 100 millas. Se trata de una verdadera batalla de resistencia.
No siempre ha sido el evento más emocionante, pero los pilotos adoran el reto y respetan el significado que ha adquirido en los últimos 61 años.
“Pienso que para nuestros fanáticos más leales y para la gente que aprecia la historia de la NASCAR, las 600 son como un animal de una especie distinta, un show único”, dijo Martin Truex Jr. “Para nosotros en este deporte, y particularmente para los pilotos, esto es algo grande, que queremos ganar”.