NASCAR pondrá a prueba plan de seguridad en carrera
Chad Knaus, jefe del equipo de mecánicos, no podrá echarle un ojo al bólido de Hendricks Motorsports construido para la carrera en el Darlington Raceway sino hasta el domingo por la mañana, cuando llegue a la pista, unas horas antes de la competición.
¿Kurt Busch? Está ya sentado en su vehículo de Chip Ganassi Racing y se ha reunido con su jefe de equipo.
El regreso de la NASCAR a las carreras ha traído consigo una serie de protocolos de seguridad, cuyo cumplimiento será vigilado estrictamente en la pista el domingo, cuando la Cup Series, la máxima categoría, realizará una competición por primera vez desde que la pandemia interrumpió la actividad hace más de dos meses.
Pero a esta serie de automovilismo simplemente no le queda más remedio que confiar en que los competidores sigan los parámetros fuera de las pistas. Y cada escudería parece tener una interpretación distinta.
“No debe haber contacto cara a cara con estos chicos ni nada así. Todo ha sido a través de conferencias del equipo (mediante Zoom”, aseguró Knaus, quien en su puesto ha ganado siete campeonatos. “Ésa es la recomendación de la NASCAR a los equipos que viajan. Deben permanecer lo más aislados que puedan y tratar de que todos en la pista se mantengan saludables. Es el protocolo que hemos implementado y que cumplimos”.
No todos lo están haciendo.
Busch ingresó el jueves en el taller de Ganassi. Quería conversar personalmente con el jefe de mecánicos Matt McCall antes de correr en Darlington y después de dos meses de comunicarse sólo por teléfono o computadora.
“Sólo fuimos él y yo, separados del grupo”, aseguró Busch. “Hay un cambio de turno, en el cual el taller permanece vacío por una hora, así que sólo se trataba de que él y yo estuviéramos, siguiendo el distanciamiento social”.
Ryan Sieg, piloto de la segunda categoría, conocida como Xfinity Series, difundió un video de un canal noticioso de Atlanta. En las imágenes, Sieg visitaba el jueves a su equipo con sede en Georgia.
Había tres miembros de la escudería, juntos. Ninguno usaba mascarilla ni otro equipo de protección.
La NASCAR reiteró sus parámetros cuando se le pidió que aclarara la situación.
“Para que un equipo incorpore a alguien en su nómina, debe estar libre de síntomas por cinco días y no debe haberse expuesto a nadie con COVID-19”, recalcó la NASCAR. “Hemos hecho recomendaciones firmes sobre las operaciones en los talleres y sobre los viajes responsables al evento”.