El rugby en Nueva Zelanda abre sus puertas al público
El Súper Rugby Aotearoa, una versión del Súper Rugby reducida a los clubes de Nueva Zelanda, será el sábado la primera competición deportiva importante en el mundo en reabrir sus puertas al público, que será autorizado a acudir sin restricciones a las gradas de los estadios.
Súper Rugby Aotearoa será la primera competición de rugby profesional en el mundo que permitirá un retorno masivo de los aficionados en la era del COVID-19 cuando se reanude el sábado en Dunedin", anunció este lunes la federación neozelandesa, New Zealand Rugby, en un comunicado.
Esta competición es una versión reducida del Súper Rugby, en el cual se enfrentaban equipos de Nueva Zelanda, Sudáfrica, Australia, Argentina y Japón antes de la suspensión prematura en marzo debido a la epidemia de coronavirus.
El campeonato Súper Rugby Aotearoa será disputado solamente por los cinco equipos neozelandeses y sustituye temporalmente a la competición multinacional.
El torneo comenzará el sábado con el choque en Dunedin, en la isla del sur, entre la franquicia local, los Highlanders, y los Chiefs de Hamilton. El domingo, los Blues de Auckland recibirán en Eden Park a los Hurricanes de Wellington.
A los espectadores se les recomendará, sin obligación ninguna, geolocalizarse en el estadio, con una aplicación en el teléfono móvil, en caso de síntomas de coronavirus.
El mundo va a poner los ojos en nosotros", dijo Roger Clark, presidente de los Highlanders.
Estamos increíblemente orgullosos de ser la primera competición deportiva profesional en el mundo en permitir a nuestros equipos jugar de nuevo ante nuestros aficionados", declaró, por su parte, el presidente de New Zealand Rugby, Mark Robinson.
- Otras competiciones con público -
Varias competiciones deportivas se han reanudado en el mundo entero, pero la mayoría lo hicieron a puerta cerrada, o con un número limitado de espectadores.
En Hungría, por ejemplo, la Federación de Fútbol (MLSZ) autorizó a los aficionados a volver a los estadios el último fin de semana de mayo, ocupando solo un asiento de cada cuatro y dejando al menos una fila horizontal de separación entre ellos.
En Praga, un mini-torneo de tenis, reservado a la élite checa, también fue disputado durante tres días con presencia de espectadores.
Pero su número fue limitado a algunos centenares, diseminados.
En Taiwán, el béisbol se juega también desde mediados de mayo con el apoyo del público, pero limitado a 1.000 personas por partido.
Entre estos raros ejemplos, y si se excluye a Azerbaiyán y Bielorrusia, donde las competiciones con público nunca han cesado desde el inicio de la pandemia, algunos campeonatos de grandes naciones de fútbol, como Alemania y Portugal, se han reanudado. Pero a puerta cerrada.
España, cuyo campeonato de fútbol se reanuda este fin de semana, no excluye la presencia de público, pero su gobierno se muestra más prudente en la materia.
El campeonato de Súper Rugby Aotearoa debía inicialmente reanudarse sin espectadores, pero el gobierno neozelandés anunció este lunes el levantamiento de las restricciones en el país gracias a los avances registrados en la lucha contra la epidemia.
Las autoridades anunciaron en este sentido que Nueva Zelanda no contaba con ningún caso activo.
El archipiélago del Pacífico Sur, que tiene una población de cinco millones de habitantes, contabilizó en total 1.154 casos confirmados y 22 fallecimientos.
Ninguna nueva contaminación ha sido registrada desde hace 17 días y desde hace una semana no hay casos activos.