Báez enfocado en 2020, no su futuro a largo plazo
No todo el mundo tiene la suerte de ser vecino del un as de Grandes Ligas. Afortunadamente para el campocorto de los Cachorros, Javier Báez, no solamente había un as bien cerca de su casa en Puerto Rico, sino que dicho lanzador pertenecía a su familia.
Durante los últimos tres meses, mientras esperaba que se reanudara la acción de las Mayores, Báez mantuvo afinado su swing gracias a que pudo enfrentarse a su cuñado, el as de los Mellizos, José Berríos.
“Fue divertido para mí”, dijo Báez en una videoconferencia. “Pero me dio un poco de miedo. Tira duro siendo tan temprano”.
Para Báez, es un alivio que su familia se encuentre en salud y que lo haya podido acompañar en Chicago mientras MLB intenta realizar una temporada 2020 en medio de la pandemia del COVID-19.
De parte de Báez, no hubo titubeo con respecto a jugar bajo circunstancias tan extrañas, pero la situación actual ha detenido otros asuntos. Hace unos días, el gerente general del equipo, Jed Hoyer, señaló que el enfoque de la gerencia era la venidera temporada y no las negociaciones de contrato ni los cambios. Báez hizo echo de esos comentarios, recalcando que las conversaciones sobre un posible acuerdo a largo plazo están en pausa.
“Ha sido bien difícil con todo lo que está pasando ahora mismo”, dijo el oriundo de Bayamón. “Tenemos muy buena comunicación. [Existe] una buena relación entre los dueños y yo, y obviamente mi representante. Creo que vamos a hablar cuando pase todo esto".
Báez, de 27 años, es uno de varios integrantes del núcleo de los Cachorros que podrán convertirse en agentes libres después de la temporada del 2021. Dicho grupo incluye también a Kris Bryant, Anthony Rizzo y Kyle Schwarber, mientras que el receptor venezolano Willson Contreras será elegible para la agencia libre después de la campaña del 2022. Durante la temporada muerta, Báez y los Cachorros platicaron sobre una extensión, pero terminaron acordando un contrato de un año y US$10 millones para evitar el arbitraje salarial.
Hace dos años, Báez terminó en el segundo lugar en la votación para el Premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional. El año pasado, el torpedero bateó .281 con 29 jonrones, 38 dobles, 85 remolcadas y 89 carreras anotadas, pero disputó apenas 138 juegos debido a lesiones. En el 2019, Báez fue el campocorto titular del Viejo Circuito para el Juego de Estrellas, luego de ser el intermedista titular el año anterior.
“Me conocen”, dijo Báez. “Creo que todos los equipos me conocen y saben lo que soy capaz de hacer”.
Báez enfatizó que ahora mismo está enfocado en prepararse para la temporada de 60 juegos que encaran los Cachorros y no en firmar un contrato multianual. El boricua agregó que no siente prisa por llegar a un acuerdo a largo plazo en estos momentos.
“Todo el mundo quiere cobrar, pero tenemos que esperar el momento indicado”, dijo Báez. “Vamos a poder saber lo que les conviene a ambas partes. No tengo prisa. Obviamente, ahora mismo, estoy preocupado por regresar al terreno, disputar partidos y obviamente [tratar] de ganar en esta temporada que va a ser tan extraña.
“Sinceramente, con lo que está pasando ahora mismo, todo va a cambiar. Ya el 2020 cambió”.
Báez dijo que pasó los últimos meses entre su casa y su finca en Puerto Rico, dedicado a su familia y entrenando a diario. Fue de gran ayuda que Berríos estuviera tirándole todos los viernes para mantenerse listo para los Mellizos. Berríos se enfrentaba a Báez y a su hermano, además de algunos jugadores aficionados del área.
Hubo un momento en que Báez se puso los útiles de receptor para recibir algunos pitcheos de su cuñado.
“Fue buenísimo”, dijo Báez. “Pensé que sería más difícil”.