Bravos, sin indicios de contemplar cambio de nombre
Los equipos en dos deportes contemplan seriamente la posibilidad de modificar sus nombres, considerados ofensivos para los nativos estadounidenses. En cambio, los Bravos de Atlanta no dieron indicios el sábado de estar sopesando un cambio similar.
El viernes, los Indios de Cleveland informaron que están reconsiderando su mote tras el furor que rodea al equipo de Washington en la NFL, conocido como los Redskins (Pieles Rojas).
Los Bravos emitieron un comunicado en el que aseveraron que el club “honra, apoya y valora a la comunidad nativa estadounidense. Y eso nunca cambiará”.
No obstante, los Bravos reconocieron que tienen “mucho por hacer, dentro y fuera del terreno”.
El equipo recalcó que, en los meses recientes, ha “forjado un vínculo incluso más estrecho con varias tribus nativas estadounidenses, tanto en el nivel regional como en el nacional, sobre asuntos relacionados con los Bravos y con la cultura” de esas etnias.
“También hemos sostenido reuniones con nuestro Grupo de Trabajo con Nativos Estadounidenses, que colaborará con nosotros en asuntos culturales, educación y vinculación con la comunidad para ampliar sus voces y mostrar a nuestros fanáticos que ellos están todavía orgullosamente aquí”, menciona el comunicado.
“Los Bravos de Atlanta tienen un compromiso significativo para honrar a la comunidad de nativos estadounidenses, y estamos emocionados por trabajar juntos para asegurar que esto pase”.
El club no ha precisado si alentará a que sus seguidores entonen el cántico de los “tomahawks” durante esta campaña. Ese acto causó controversia el año pasado, durante la serie divisional que Atlanta perdió ante los Cardenales de San Luis.
Ryan Helsley, lanzador de los Cardenales y miembro de la Nación Cheroqui, consideró insultante el cántico. Tras las críticas emitidas por Helsley, los Bravos dejaron de distribuir los tradicionales tomahawks de hule espuma a los fanáticos antes del quinto juego de la serie, que San Luis ganó.
Previo a ese encuentro, los Bravos indicaron que no distribuirían los tomahawks “por respeto, ante las preocupaciones manifestadas por Helsley”.
El equipo prometió que continuaría analizando el asunto después de la temporada.
No habrá público en el graderío el 23 o 24 de julio, cuando los Bravos comiencen su campaña de 2020, postergada por la pandemia de coronavirus.