Ferrari en apuros y la temporada apenas comienza
Apenas se ha disputado una carrera en la temporada de la Fórmula Uno y Ferrari ya se encuentra en apuros, improvisando para reforzar la aerodinámica de sus monoplazas para el Gran Premio de Estiria el domingo.
En vez de acortar diferencia con el favorito Mercedes esta temporada, el SF1000 de Ferrari evidenció estar más lento que el modelo del año pasado y también se expone a rezagarse de otros equipos.
“El SF1000 no estuvo a la altura, ni siquiera cerca de las expectativas”. Tal fue el honesto balance que dio Ferrari.
La escudería italiana vivió un fiasco en la clasificación para el GP de Austria, la primera prueba del campeonato. Charles Leclerc figuró séptimo en la parrilla de salida, luego de liderar la tabla de poles en 2019. Peor le fue a Sebastian Vettel, largando 11mo.El segundo puesto conseguido por Leclerc en la carrera reflejó más bien el aplomo del monagesco en medio de choques de sus rivales que la velocidad de su máquina. Vettel, quien terminó décimo, se expresó con tono irónico y describió que era muy difícil manejar el monoplaza.
Todo esto le complica la vida al jefe de Ferrari Matti Binotto, ya que su equipo se había rezagado bastante de Mercedes, tanto en la clasificación de pilotos como la de constructores, en 2019.Las decisiones de Binotto también fueron cuestionadas a raíz de un súbito cambio de estrategia, tres días antes de la primera sesión de ensayos en Austria.
Binotto anunció una actualización aerodinámica para cambiar el rendimiento del monoplaza, lo que esencialmente significa que las mejoría no se plasmaría hasta la tercera carrera, en Hungría, la próxima semana.Pero la plana mayor de Ferrari intervino.
El director ejecutivo de Ferrari Louis Camilleri consideró que era necesario no rezagarse más y que parte del nuevo paquete aerodinámico — previsto a debutar en Hungría — entre en escena en Austria.
“Ferrari no puede encontrarse en esta posición en la parrilla y vamos a responder de inmediato”, dijo Camilleri. “Es evidente que debemos mejorar en todos los frentes”.
La carrera de este fin de semana es la segunda de ocho durante un agitado ciclo de 10 semanas en Europa.
El propio GP cambia de nombre al disputarse otra vez en el circuito Red Bull Ring en Spielberg — rodeado por la cordillera de Estiria.
Nombre distinto, mismo objetivo para el piloto de Red Bull Alexander Albon.
Mientras que Lando Norris, de 20 años, logró su primer podio el pasado fin de semana — el piloto británico más joven en hacerlo en la F1 — Albon rozó su primer podio por segunda vez en tres carreras.
Y en ambas ocasiones Lewis Hamilton estuvo involucrado.Cuando negociaban las últimas vueltas el pasado domingo, Albon tenía mejores condiciones en sus neumáticos que los Mercedes de Hamilton y Valtteri Botas, quien se llevó la victoria.
En una súbita pero limpia maniobra, Albon trató de rebasar por el exterior a Hamilton, quien pareció acercar su monaplaza hacia la izquierda, tocando la rueda del tailandés. Albon se salió de la pista y Hamilton recibió una sanción de cinco segundo, que significó caer del segundo al cuarto lugar.El pasado noviembre en Brasil, la penúltima carrera de 2019, ambos peleaban el segundo puesto en la penúltima vuelta. Hamilton buscó adelantar a Albon por adentro y acabó haciendo un contacto que provocó un trompo de Albon, quien terminó 14to.
Albon no ocultó su desaliento tras la carrera del domingo, la cual deparó otra frustración para Red Bull cuando Max Verstappen se retiró temprano y figuraba segundo.
Pero el jefe del equipo Christian Horner encontró señales para sentirse optimista.
“Creo que tenemos la calidad para darle pelea a Mercedes. Quizás no en una sola vuelta, pero en todo el curso de una temporada”, dijo.
No se está claro si los pilotos volverán a arrodillarse como gesto de apoyo al movimiento por la igualdad racial previo a la carrera del pasado domingo. Hamilton lució una camiseta de Black Lives Matter en la anterior, cuando 14 de los 20 pilotos se ahincaron.
“Quiero que la gente se siente entusiasmado por ser parte del cambio”, dijo el reinante campeón británico. “Para mí fue un momento emotivo y conmovedor para que la F1 sea un deporte más diverso e inclusivo”.