Las Águilas no pudieron con el Atlas
De poder a poder. Así se vivió la batalla en la Cancha Alfredo Pistache Torres, donde Atlas y América buscaron por todas las vías hacerse de tres puntos, desafortunadamente ninguno pudo hacerlo y terminaron con un ríspido empate a ceros, donde la cancerbera de las Águilas y la defensora rojinegra; Julissa Dávila fueron clave para dicho resultado.
Las de Coapa iban por su séptimo triunfo, así que una vez en el campo, no tardaron en tocar primero a puerta. Campa no esperó y decidió probar su puntería desde fuera del área y mandó un cañonazo que terminó saliendo por encima del travesaño.
Cuéllar observó con atención a sus pupilas, que en una triangulación entre Hernández, Cuevas y Espinosa pusieron una vez más a prueba la zaga local. El tiempo corría y la batalla se tornaba en ida y vuelta, lo que provocó desesperación por parte de ambos cuadros y las jugadas bruscas no tardaron.
La silbante, Diana Pérez sacó los cartones amarillos y pese a que parecía que ya no habría más, el temperamento provocó una discusión entre Cuevas y González tras la dura entrada hacia Alison González que la dejó tendida en el terreno de juego.
Ambas jugadoras fueron separadas, la delantera de Atlas se levantó y el cotejo se reanudó. La velocidad de Orejel fue vital para las visitantes. La dorsal número dos desbordó por la banda derecha, se acercó al área, mandó un centro para Campa, que desafortunadamente no alcanzó a llegar.
Fueron minutos en que las azulcremas parecía que se adelantarían en el marcador, pero Julissa Dávila empezó a erigirse como figura de las suyas.
La respuesta no tardó. Franco se hizo de la redonda, se la llevó por el centro de la cancha y asistió a Alison González, quien ya se encontraba enfrente de la cabaña de Jaidy para hacer lo suyo, se perfiló y antes de disparar, Orejel se hizo presente y cortó el peligro. Dicho acercamiento inyectó de ánimo a las de la Academia, que no tardaron en volver a intentar.
Una vez más Franco se quitó la marca Hernández, recorrió por derecha, levantó la mirada y al ver que tenía enfrente a Ximena Ríos mandó un pase para Iturbide, la ‘doctora del gol’ que brincó y remató de cabeza y aunque la jugada no llegó lejos ya que la cancerbera americanista lo detuvo sin presión, fue de las jugadas más peligrosas.
En el completo, las pupilas de Samayoa salieron con otro semblante y no tardaron en volverse protagonistas.
La mancuerna entre Ibarra e Iturbide acorraló a las de Coapa, donde Jaidy Gutiérrez salvó a las de amarillo.
Cuéllar dio pie al ajedrez estratégico y movió un par de piezas al darle ingreso a Molina y Gutiérrez, por lo que Samayoa no se quedó atrás y apostó por Arce y García. Las modificaciones le dieron vida al juego, aunque ambas plantillas se quedaron en busca del tanto.