Un honor y distinción para Daniela Souza Naranjo recibir el uniforme de BC
La seleccionada nacional por México en la disciplina de Tae Kwon Do, Daniela Souza Naranjo, recibió con orgullo el uniforme de la selección de Baja California.
Tras una breve visita a las instalaciones del CAR (Centro de Alto Rendimiento), la artemarcialista tijuanense, se mostró muy contenta por esta distinción y aseguró que para ella se genera un gran sentimiento al competir por el Estado o bien por México en donde se presente.
“En lo personal todavía recuerdo cuando recibí mi primer pants. El uniforme completo de Baja California, es un sentimiento que nunca voy a olvidar. Y ahora estoy doblemente orgullosa ya que no me lo esperaba, para mí es un regalo muy grande, especial y agradezco al INDE, a su director David González Camacho, que se acuerden de mí y me tengan presente en estos momentos”.
“Uno como deportista porta los colores de tu país, o llevas el nombre en la espalda de tu estado, y trabajas más fuerte porque sabes que detrás hay muchas personas que quieren estar en tu mismo lugar, y ese ha sido el sentimiento que yo he tenido cada vez que porto el uniforme de Baja California, quiero dar buenos resultados, que estos reflejen el esfuerzo, el apoyo de mi familia y entrenadores”.
No pudo evitar recordar sus inicios en el Tae Kwon Do allá en el lejano 2011 cuando arrancó una carrera muy prometedora de trabajo y empeño por parte del equipo de Baja California, “han sido muchos pasos los que se han dado desde entonces y no terminaría de contarles, el esfuerzo ha sido bueno, fuerte y por eso tengo cimientos sólidos para labrar una carrera llena de satisfacciones personales”.
Sobre cómo ha sobrellevado la pandemia del Covid-19, encerrada en casa seis meses, explicó que, “ha sido un proceso duro, realmente muchos de los atletas de alto rendimiento estamos acostumbrados a tener mucho movimiento o de estarnos trasladando de un lugar a otro en las competencias, entrenar y luego volver a irte, y ahora nos detuvo esta situación, y eso es un cambio completo en la estructura en la que entrenamos en la que vivimos y ahora sí que no nos quedó de otra que adaptarnos para seguir nuestros sueños, porque nuestros sueños son más grandes que la adversidad”.
Daniela detalló que en su casa está llevando un trabajo de rutina general, “lo que estamos buscando es no perder el ritmo, sin salir del enfoque de que pronto podremos regresar a las competencias, aunque ahorita el objetivo principal es mantenernos sanos, aprovechar el tiempo con la familia, y obedecer las indicaciones de la Secretaría de Salud, pero siempre activos”.
Solidaria y buena compañera, Daniela sugirió que, si un atleta necesita apoyo emocional porque puede ser complicado estar aislado, deben de apoyarse unos con otros, “para apuntalar, para escucharnos, para darnos la mano, siendo un equipo, aunque sea a la distancia”.
Se despidió por ahora del Centro de Alto Rendimiento, con un consejo, “que traten de hacer las cosas paso por paso con el mismo ánimo de siempre y plantearnos objetivos para que no se vuelva más tedioso el asunto”.