Incertidumbre para "Checo"
Hace poco más de un año, durante un evento en su kartódromo de Guadalajara, Sergio Pérez se mostraba ilusionado con el futuro, pues recientemente había renovado contrato con Racing Point hasta el término de la temporada 2022 de la Fórmula Uno y el Gran Premio de México estaba a la vuelta de la esquina.
Aquel día, el 11 de septiembre de 2019 para ser exactos, el piloto mexicano se dijo contento con el proyecto de su escudería, recién adquirida por un grupo de inversionistas encabezados por Lawrence Stroll (padre de su coequipero Lance), y a pesar de que ese contrato contaba con una cláusula de salida en caso de que Checo tuviera una oferta de alguno de las llamadas escuderías grandes, el mexicano fue claro al señalar que estaba comprometido con el equipo británico.
Para su desgracia y la del automovilismo mexicano, fue Racing Point el que a final de cuentas decidió romper su relación laboral con Pérez, y es debido a esto que el futuro del tapatío se ha tornado incierto, a pesar de que por la intervención del propio Sergio la escudería fue salvada de desaparecer por los problemas legales y económicos que enfrentaba el anterior dueño, Vijay Mallya
¿Mudanza al Norte?
Por una parte, entre las opciones más viables para seguir en la Fórmula Uno, Checo Pérez podría ser del agrado de Haas, una escudería que aún no tiene definidos a sus pilotos para la Temporada 2021, y que incluso podría interesarse en el mexicano, debido a la poca fiabilidad de Romain Grosjean y Kevin Magnussen, sus titulares actuales.
Alfa Romeo es otra puerta que podría abrirse para el mexicano, pues ante el posible retiro de Kimi Raikkonen, Sergio podría llamar la atención de este emblemático equipo italiano.
Por desgracia para Pérez, tanto Haas como Alfa Romeo manejan una amplia lista de posibilidades, pues por dar un ejemplo Gunther Steiner, jefe de Haas, ha sido claro al señalar que su lista de probables pilotos asciende a más de 10 candidatos y que a pesar de la experiencia y fiabilidad que ofrece el tapatío, esto no es garantía para que se gane un asiento con el equipo estadounidense.
MANIOBRA FAMILIAR. Checo tiene contrato hasta 2022, pero la escudería le jugó rudo.
Un grande sería opción
Otra alternativa para Pérez Mendoza sería Red Bull, pues hace algunos días trascendió que el mexicano habría entablado una conversación vía telefónica con Christian Horner, mandamás de la escudería, quien se mostró interesado en los planes a futuro del jalisciense en medio de la incertidumbre que ha generado la actuación de Alex Albon y que en AlphaTauri, equipo hermano de los austriacos, ni Pierre Gasly ni Daniil Kvyat han sabido aprovechar del todo las circunstancias que se presentan.
Más allá de esta tercia de escuderías el panorama no es tan alentador para Pérez, ya que una larga lista de equipos ya tienen definidos a sus tándems para las próximas temporadas, situación que deja latente el riesgo de que el jalisciense no encuentre un asiento para 2021.
Sin embargo, un factor importante a considerar es que los patrocinadores del tapatío saldrían con él de Racing Point y la inyección de recursos que éstos podrían aportar sería de suma ayuda para alguna escudería que pretenda desarrollar un mejor vehículo de cara a la próxima temporada.
De no tener cabida para el siguiente año, Checo también podría decantarse por correr en otra serie (Indy, Le Mans), pero esto luce poco probable, debido a que los sueldos no se comparan a los que se manejan en la categoría reina del deporte motor.
Se viven días cruciales en la carrera del mexicano.