Chris Paul no llega a los Suns para impartir conocimiento
Chris Paul se siente algo incómodo con la noción de que llega a los Suns de Phoenix como un sabio jugador veterano que impartirá conocimiento a la siguiente generación de estrellas.
Sabe que es un treintañero y que el tiempo no retrocede. Si, está listo para acoplarse con Devin Booker, quien cumplió 24 años y es uno de los mejores anotadores jóvenes de la NBA. Ciertamente, después de 15 años, 1.020 partidos de temporada regular y 109 de postemporada, Paul ha aprendido algunas cosas.
Pero no sólo por que tenga un doctorado de baloncesto en la liga significa que llega al desierto como profesor.
“De ninguna manera soy James Naismith”, dijo un sonriente Paul. “Es divertido para mi. Lo primero es que no vengo a enseñarle a nadie. Soy compañero (de Booker). Estamos aquí para jugar, estamos aquí para competir y así es como lo enfrento”.
A sus 35 años Paul demostró con el Thunder de Oklahoma City que aún puede jugar a un gran nivel. Fue elegido a su décimo Juego de Estrellas, promediando 17,6 puntos y 6,7 asistencias por partido. Ahora estará rodeado de Booker, quien fue elegido el año pasado a su primer Juego de Estrellas; así como Deandre Ayton, un talentoso pívot de 2.11 metros y que fue la primera selección del draft de 2018.
Los Suns no se clasifican a los playoffs desde 2010, pero vienen de una temporada prometedora. Terminaron con foja de 34-39 y estuvieron 8-0 en el reinicio de la NBA, en un burbuja en Florida, y quedaron fuera de la postemporada por poco.
El gerente general James Jones estimó que los Suns necesitaban de una figura de renombre para seguir creciendo y concretó uno de los canjes más impactantes de la pretemporada al adquirir a Paul y Abdel Nader del Thunder a cambio de Ricky Rubio, Kelly Oubre Jr., Ty Jerome y Halen Lecque.
Paul dijo que tener un equipo joven a veces es bueno, debido a que es como es borrón y cuenta nueva.
“Lo más importante que aprendió el año pasado es que tú eres el encargado de escribir tu propia narrativa”, dijo Paul. “Creo que fue lo mejor que hizo nuestro equipo. Hicimos caso omiso, y no tengo la intención de insultarles, de los pronósticos que ustedes dieron, las expectativas que ustedes tenían. Ustedes no están en el vestuario. Nosotros somos lo que hacen el trabajo”.