"Verdugo" Guarneros presume hazaña
Dormir en un gimnasio y subir a pelear sin comer, han sido algunos de los sacrificios que Hugo "Verdugo" Guarneros ha hecho en busca de consolidar una carrera en el boxeo.
A los 30 años, el pugilismo le hizo justicia, aunque fue muy lejos de su tierra, en Sheffield, Inglaterra, un lugar desconocido al que llegó con su maleta y la esperanza de salir como campeón. "Todo salió después de una pelea en Monterrey, la gané y unos días después mi promotor, Miguel Ortiz, me propuso ir a Sheeffield y así comenzó la aventura".
Un reto teñido por las desventajas de una pandemia, que cambió las formas de entrenar. "Hicimos la estrategia vía remota. Él (su entrenador) me mandaba videos y así pudimos hacer la preparación".
Aunque el destino le tenía una sorpresa previa al viaje. Su entrenador, Miguel Ortiz, se contagió de Covid-19 y no pudo acompañarlo. Así que tomó el avión cargado de sueños, pero sin nadie con quien compartirlos. "Allá me ayudó un entrenador español, sin conocernos, con la desconfianza de lo que podía pasar, pero salió todo bien".
Con el cinturón intercontinental avalado por la FIB en su poder, "hay una posibilidad de pelear con Rey Martínez por el campeonato del mundo (CMB), es algo que me catapultaría a otro nivel. Voy por él, en el 2021", sentencia el púgil.