Néstor Araujo, defensa central del Celta de Vigo, señaló que espera pronto recibir la nacionalidad española, luego que desde hace unos meses comenzó los trámites para recibirla.

Y es que el central mexicano, llegó desde el 2018 al conjunto de Vigo, por lo que ya tiene más de dos años viviendo ininterrumpidamente en territorio español, lo cual es requisito para adquirir la nacionalidad.

"Ya llevo algunos meses que ya metimos todo. Ahora puede tardar una semana o se puede ir hasta el verano, y más con lo de la Pandemia, pues está todo un poco más parado, más complicado", dijo Araujo este viernes en conferencia de prensa virtual.  

Araujo señaló que tanto para él como para el club será bueno que tenga ya la nacionalidad española, para que así deje de contar como extranjero y ocupe plaza de comunitario.

"Esperemos que llegue pronto y ojalá salga en todos lados que me den la nacionalidad, que me ayude para que llegue porque obviamente es bueno para todos. Ahí estamos con el tema de la nacionalidad y esperemos que llegue pronto".

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La etapa de Néstor Araujo en el futbol de Europa ha terminado.

El defensor mexicano se fue del Celta de Vigo, de España, para regresar a la Liga MX, como nuevo refuerzo del América.

Por ello este viernes el cuadro de Coapa hizo oficial la llegada del central de 30 años.

Araujo se suma a Jonathan Rodríguez, el 'Cabecita', como los nuevos futbolistas de los azulcrema para el Apertura 2022, donde el banquillo estará a cargo de Fernando Ortiz.

Así le dio la bienvenida el América al también seleccionado nacional.

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— Club América (@ClubAmerica) June 24, 2022

Al internacional mexicano Néstor Araujo no le preocupa demasiado la racha de cuatro jornadas sin ganar que ha encadenado el Celta de Vigo, porque, a su juicio, están haciendo “muchas cosas bien” para superar esta crisis de resultados que atraviesan.

“Es cierto que los resultados no están llegando y siempre van a hablar por encima de las sensaciones, pero si todos damos más acabaremos revertiendo esta situación porque se están haciendo muchas cosas bien”, explicó el central celeste.

 

Araujo, que cumple su tercera temporada en Vigo, pidió a los aficionados del Celta que no se “desanimen” porque todavía queda mucho campeonato por delante.

“Cada derrota es un golpe fuerte, pero esto no ha hecho más que empezar”, subrayó el mexicano en una entrevista con LaLiga, en la que admite haber cumplido “un sueño” con su llegada al fútbol español.

“Es un objetivo cumplido, el Celta apostó fuerte por mí y lo menos que puedo hacer por ellos es entrenar fuerte y estar al cien por cien por si se me necesita en la cancha”, declaró Araujo, que ha participado en seis de los siete primeros partidos de LaLiga Santander.

El Levante asaltó Balaídos con una victoria (2-3) que entorpece la permanencia del Celta en la Liga Santander, pues ahora tendrá que certificar la salvación en el campo del Espanyol en la última jornada.

El conjunto celeste ofreció, pese a jugar con uno más durante cuarenta minutos por expulsión del visitante Miramón, una pobre imagen que contrastó con la seriedad del equipo de Paco López.

El Levante, que presentó la gran novedad del portero Koke Vegas, necesitó muy poco para intimidar al Celta.

Su inicio fue sorpresivo. Con solo tres minutos, Bardhi obligó a Iván Villar a estirarse para despejar un lanzamiento; poco después, el centrocampista macedonio culminó un gran ataque elaborado por Miramón, Mayoral y Campaña, que asistió para el gol de Bardhi. No había asimilado el Celta el impacto, cuando un grave error defensivo facilitó otro gol, de Mayoral, pese a que esta vez el tanto fue anulado porque el VAR avisó al árbitro de un fuera de juego de Clerc antes del pase final.

La imagen del equipo celeste fue preocupante: blando, poco intenso, asustadizo. El Levante tuvo la pelota. Jugó cómodo, presionó arriba. Se apoderó del partido con desahogo. Y es que mediada la primera parte, la única aproximación del conjunto gallego fue un tiro lejano de Brais Méndez. 

Los roles esperados estaban cambiados en Balaídos: un Celta tímido contra un Levante animoso. El equipo de Paco López manejó el partido a placer durante la primera media hora. Aspas perdió un balón en el centro del campo y el contragolpe granota, sensacionalmente elaborado por Mayoral y Roger, lo finalizó con gol Bardhi, que aprovechó un resbalón de Araujo para quedar solo ante Iván Villar.

El Celta dio hasta ese momento la sensación de ser un colador. Sin embargo, fue ahí, con dos goles de desventaja, cuando despertó el conjunto celeste. Su primera acción con peligro fue un tiro de Brais Méndez, que desvió a córner Clerc; en el saque de esquina, Araujo peinó el centro y Santi Mina marcó con un remate en el área pequeña. 

Ese gol dio confianza al Celta. También el Levante flaqueó. Murillo avisó al cabecear una falta lateral. Más letal fue Aspas, que cerca del descanso, calmó todos los miedos con el gol del empate, una jugada académica que resolvió con sencillez: defensa visitante adelantada, pase en profundidad de Santi Mina y carrera de Aspas para llegar a la pelota antes que los centrales y el portero. El Celta arregló con los diez minutos finales la catástrofe del primer tiempo.

Óscar García hizo cambios en el descanso. Metió a Bradaric y Nolito. Pero el escenario no fue el que esperaba. La segunda mitad abrió con otra gran acción del Levante, que se asoció en la zona central con una pared Campaña-Mayoral, continuó con un centro de Clerc desde la izquierda y coronó con un gol de Mayoral, libre para rematar tras calcular mal Araujo, 

El Celta quedó herido, sin ideas en ataque, pese a tener un jugador más por expulsión de Miramón -el VAR mandó al árbitro a revisar en el vídeo una dura falta a Aspas-. Se nubló el conjunto gallego.

Sólo creó un par de centros peligrosos hacia Santi Mina. Fue una escasísima amenaza durante cuarenta minutos para un equipo que se juega la permanencia, un Celta pobre que rozó el empate en el minuto 93 con un gol de Nolito que posteriormente anuló el árbitro, que revisó la jugada con el VAR y, quizás, observó que Gabriel Fernández tapaba desde una posición de fuera de juego la visión del portero en el momento del remate de Nolito.

 La prensa española destaca que las charlas entre el Valencia y el Celta de Vigo, para negociar por Néstor Araujo, central mexicano se han reactivado. Hace un mes comenzó a correrse el rumor de un posible cambio del zaguero se Vigo a tierras naranjeras, y ahora dicha versión periodística ha tomado más fuerza en el país ibérico.

El diario de la ciudad de Vigo, Atlántico.net, afirma que el Valencia ha puesto la mirada sobre el ex de Cruz Azul y Santos. "El Valencia va por el céltico Néstor Araujo, que parece el elegido para suplir la ausencia de Ezequiel Garay. Las conversaciones ya se han iniciado, aunque falta por ver si finalmente se llega a un acuerdo por un futbolista que todavía tiene tres años más de contrato en Vigo y que en verano de 2018 costó 7 millones de euros (7.9 millones de dólares). Las negociaciones se prevén arduas, ya que "Araujo ha mostrado esta temporada haberse adaptado a la Primera División". De hecho, ha sido indiscutible tanto para Fran Escribá como para Óscar García Junyent, formando primero dúo con Joseph Aidoo y, desde el pasado enero, con Jeison Murillo. El mexicano pasó un primer curso de dudas, pero ha demostrado capacidad de aprendizaje y apenas se ha perdido tres jornadas ligueras, dos por sanción, la última el pasado martes ante el Atlético".

El portal deportivo agrega: "No le vendría nada mal realizar alguna venta de cierto calado en este mercado, sobre todo si quiere afrontar la continuidad de futbolistas caros como Jeison Murillo o Rafinha Alcántara. Araujo, que cumplirá 29 años el próximo mes, sabe que está ante una de sus últimas oportunidades de firmar un contrato sustancioso en lo económico y, posiblemente, en lo deportivo. Es bien sabido que el canal entre Celta y Valencia está siendo muy transitado en las últimas fechas, con operaciones como las de Fabián Orellana, Facundo Roncaglia, Daniel Wass o Maxi Gómez. Ahora, el central mexicano puede seguir el mismo camino".

 El Celta dio continuidad a la goleada ante el Deportivo Alavés y sumó su segunda victoria consecutiva al ganar en el Real Arena (0-1) con un gol de penalti de Iago Aspas que aparta virtualmente a los donostiarras de la lucha por la Liga de Campeones.

Comenzó muy bien la Real, ofreciendo su mejor versión, aquella que si vio antes del parón y que ha quedado en el olvido en esta reanudación, y lo intentó ante un celta con problemas para sacar el balón de su campo.

Los donostiarras comenzaron a ponerse nerviosos a medida que transcurría el partido y no llegaban con claridad a la portería de Blanco, mientras que el equipo gallego iba creciendo poco a poco y se empezaba a intuir peligro para Remiro.

Cualquier jugada al área de la Real en los últimos partidos está siendo sinónimo de peligro y cuando estaba cerca de acabar la primera parte, una obstrucción de Llorente a Aspas fue señalada por el árbitro con la pena máxima, penalti que Iago aspas no desperdició para adelantar a su equipo en un momento psicológico y dejar muy tocada a la Real.

Aspas, un auténtico martirio para los guipuzcoanos, marcaba así el noveno tanto de su carrera ante el equipo blanquiazul y demostraba que ha recuperado el olfato goleador, algo que a su equipo le va a venir de perlas en el final de liga.

El Celta pensó que todo estaba hecho y en la segunda mitad se echó atrás, dejó la iniciativa a un equipo local que mordió en los primeros 15 minutos de la reanudación y pudo marcar por medio de Januzaj, en un libre directo en el minuto 61 al que Blanco contestó con una gran intervención.

Los vigueses quedaron maniatados, o hicieron que así lo pareciera, y los vascos llegaban una y otra vez a los dominios celtiñas, con Januzaj como principal artífice de las acciones ofensivas y Merino llegando a cada balón que se ponía en el área pequeña.

El Celta sufriría con los arreones finales de una Real que atacaba más con el corazón que con el cerebro porque su pólvora sigue mojada otra jornada más y celebró en el campo un triunfo que vale oro para escapar del peligro.

- Ficha técnica:

0 - Real Sociedad: Remiro, Monreal (Muñoz, min. 58), Llorente, Elustondo, Zaldua (Gorosabel, min. 75); Merino, Zubimendi; Oyarzábal (Isak, min. 75), Odegaard (Portu, min. 58), Januzaj; William José.

1.- Celta: Blanco, Olaza, Murillo, Aidoo, Vázquez; Rafinha; Bradaric (Araujo, min. 77), Beltrán (Brais, min. 46); Aspas (Saéz, min. 77), Mina (Smolov, min. 84) y Suárez (Nolito, min. 70).

Gol: 0-1, min 44: Iago Aspas, de penalti.

Árbitro: Prieto Iglesias (Comité Navarro). Amonestó a Monreal, Llorente, Zubimendi, Rafinha y Smolov.

Incidencias: encuentro disputado con 21 grados y más de un 90% de humedad en el aire en el Reale Arena. EFE