En 2019, alrededor de 8 mil 300 mexicanos dejaron de ser millonarios, aunque la riqueza de la población con mayores ingresos creció 2%, de acuerdo con el Reporte Mundial de Riqueza 2020 elaborado por la consultora Capgemini.

De acuerdo con el estudio, al cierre del año pasado, se contabilizaron 120 mil mexicanos con alto valor patrimonial neto; esto es, individuos que tienen activos invertibles de un millón de dólares. Así, el estudio muestra que en promedio la riqueza de mexicanos con este rango de recursos superó los mil 574 millones de dólares al año pasado, una ligera mejora de 2% en comparación de 2018.

Según el documento, en 2019, América del Norte y Europa tomaron la delantera en el crecimiento de la riqueza con alrededor del 11% y 9%, respectivamente, superando a Asia-Pacífico que tuvo 8% por primera vez desde 2012. No obstante, el estudio destaca que la pandemia del Covid-19 tendrá un fuerte impacto en la riqueza global en 2020. "De acuerdo con informes de la Federación Mundial de Intercambios, Covid-19 eliminó más de 8 billones de dólares de los mercados mundiales en el transcurso de febrero y marzo de 2020, antes de una ligera recuperación en abril. El análisis de Capgemini proyecta una disminución de entre 6% y 8% en la riqueza global hasta finales de abril de 2020. La firma dijo que las prioridades de inversión también han cambiado ya que los capitales destinados a inversiones sostenibles que respetan las prioridades ambientales y sociales están cobrando una importancia considerable después de la pandemia.

"Ante la extraordinaria incertidumbre actual, los gestores patrimoniales y las empresas se encuentran en territorios desconocidos. Este período imprevisible también puede presentar oportunidades para que las empresas reevalúen y reinventen sus modelos comerciales y operativos para ser más ágiles y resilientes. El análisis, la automatización y las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, pueden permitir a las empresas incrementar los ingresos a través de mejores experiencias de los clientes y reducir los costos al agilizar los procesos", dijo el director general de de Servicios Financieros de Capgemini, Anirban Bose.

Luego de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden comentó que un escenario de recesión "no es inevitable", el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la fórmula para enfrentarla es producir lo que consumimos y continuar con la política de subsidiarios a los combustibles.

“En México estamos haciendo lo que consideramos ayuda para enfrentar el problema de la inflación mundial. Lo principal es producir, no puede enfrentarse ningún problema económico, ninguna crisis si no se tiene una actividad productiva fuerte”.

En conferencia de prensa, el Jefe del Ejecutivo dijo que la guerra de Rusia y Ucrania está afectando al sector energético.

“Pero nosotros somos de la idea, desde hace años, es algo que nos hace distinto a los neoliberales, es el sostener que debemos producir lo que consumimos. …. nosotros dijimos vamos a buscar la autosuficiencia en energéticos”.

Recordó que gracias a que está alto el precio del petróleo se ayuda a los consumidores con un subsidio a las gasolinas para que eso no impacte en la inflación.

Aseguró que su gobierno tiene recursos para mantener los precios de las gasolinas sin aumentos.

Durante el cuarto trimestre del año pasado la economía mexicana habría registrado un retroceso de 0.1% respecto al periodo inmediato anterior con base en cifras desestacionalizadas, de acuerdo con los datos de la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) trimestral publicados por el Inegi.

De confirmarse lo anterior y tomando en cuenta que durante el tercer trimestre del año pasado el PIB ya había reportado una disminución secuencial de 0.4%, se habrían acumulado dos periodos consecutivos de retrocesos trimestrales, con lo que la economía habría entrado en recesión técnica, de acuerdo con los especialistas de Bank of America.

En todo el año se estima que la economía mexicana habría registrado un crecimiento de apenas 4.8% con base en cifras originales, tasa inferior al 5.4% estimado por el Banco de México y mucho menor al 6.3% previsto por la Secretaría de Hacienda, impactado por un desempeño menor al anticipado a lo largo del segundo semestre de 2021.

Durante los últimos tres meses del año persistieron varios problemas como las disrupciones en las cadenas de suministro que han tenido un impacto adicional; mayores presiones en precios, con un efecto no solo en las categorías relacionadas al consumo, sino también en la construcción; así como condiciones climatológicas retadoras, impactando las cosechas.

Por principales componentes, el sector servicios, relacionado con el comercio, transporte, finanzas y profesionales entre otros, sería el segmento más débil de la economía con una contracción de 0.7% en los últimos tres meses del año respecto al periodo inmediato anterior, con lo que ligaría dos trimestres consecutivos a la baja.

Por su parte, las actividades industriales habrían reportado un crecimiento trimestral de 0.4%, con lo que se habrían mantenido en terreno positivo durante seis trimestres consecutivos.

Finalmente, el sector agropecuario habría reportado un aumento de 0.3% en el último trimestre del año, tasa inferior al 1.3% registrado en el periodo anterior, debido a que los reportes climáticos fueron menos favorables, pero también ante un efecto de base difícil.

En su comparación anual, la estimación oportuna del PIB mostró un avance de 1.0% en el último trimestre del año pasado respecto al mismo periodo del año pasado con base en cifras ajustadas por estacionalidad.

Por actividad económica, los incrementos fueron de 4.8% para el PIB de las actividades primarias, de 1.6% para el de las secundarias y de 0.1% para el de las terciarias.

En 2021, el PIB oportuno aumentó 5% respecto a 2020, con datos desestacionalizados.

El Inegi aclara que las estimaciones oportunas publicadas este lunes podrían cambiar respecto a las cifras generadas para el PIB trimestral tradicional, las cuales se publicarán el próximo 25 de febrero de 2022.

Al cierre de 2020, ante el golpe de la pandemia, el número de personas con un patrimonio superior a un millón de dólares en México se ubicó en 264 mil, es decir, una disminución de 10 mil millonarios respecto a 2019, de acuerdo con Credit Suisse.

En el Informe de Riqueza Mundial 2021, presentado ayer por la firma, México se encuentra en el décimo lugar entre países que tuvieron la mayor reducción en la cantidad de millonarios, encabezada por Brasil, India, Rusia y Hong Kong, Emiratos Árabes, Arabia Saudita, Tailandia, Kuwait y Chile.

El reporte de Credit Suisse detalla el comportamiento de la riqueza en Brasil, Chile y México, donde el impacto sanitario por el Covid-19 fue severo respecto a otras economías.

Además, resalta que los tres países sufrieron mucho durante la primera ola de la pandemia en la primavera y verano de 2020, con tasas de infección por encima del promedio de América Latina y muy por encima del promedio mundial. En la segunda y tercera olas, que comenzaron a finales de 2020, Brasil y México se destacaron aún más, en comparación tanto con su región como con el resto del mundo.

“La renta disponible personal se redujo en un promedio de 1.6% en los tres países durante 2020. El consumo privado cayó 2.4%, lo que implica que cualquier aumento en el ahorro personal fue modesto, a diferencia de la experiencia en muchas economías avanzadas”, destaca.

De acuerdo con el análisis, al cierre de 2020 la riqueza por adulto era de 18 mil 272 dólares en Brasil, 42 mil 689 dólares en México y 53 mil 591 en Chile.

El reporte de Credit Suisse muestra que la desigualdad de riqueza es alta en América Latina, especialmente en Brasil, que tiene uno de los niveles más altos de disparidad de riqueza en el mundo, mientras que en general ha cambiado poco en Chile o México. En estos dos últimos países, la desigualdad de la riqueza ha aumentado entre 90% inferior de la población, contrarrestando la línea de desigualdad en la parte superior. Para 2025, Credit Suisse estimó que en México habrá alrededor de 434 mil millonarios, 170 mil más respecto a los registrados a finales de 2020.

El reporte resalta que las diferencias de riqueza entre los adultos se ampliaron en 2020 en todo el mundo.

La inflación aceleró su marcha en marzo superando las expectativas de los especialistas, impulsada por el alza en el precio de gasolinas, gas LP, tortillas y huevo, de acuerdo con los datos más recientes dados a conocer por el Inegi. 

En la primera quincena de marzo de 2021 el Índice Nacional de Precios al Consumidor presentó un incremento de 0.53 por ciento respecto a la quincena inmediata anterior, la tasa más alta para dicho periodo en 23 años.

Lo anterior trajo como consecuencia una inflación anual llegará a 4.12%, con lo que se ubica en su nivel más alto desde mayo de 2019, rebasando el 4.0%, límite superior del rango objetivo del Banco de México.

Entre los bienes y servicios cuya alza de precios y tarifas incidió más en la inflación, destacan: las gasolinas de alto y bajo octanaje con incrementos quincenales de 3.67% y 0.98% respectivamente; gas doméstico LP, 4.05%; tortilla de maíz, 1.79%; huevo, 3.87%; transporte aéreo, 15.8%; tomate verde, 17.3%; loncherías, fondas, torterías y taquerías, 0.33%; limón, 11.22%; y electricidad, 0.72%.

El índice de precios subyacente registró un incremento de 0.35% quincenal y de 4.09%; por su parte, el índice de precios no subyacente subió 1.08% quincenal y 4.19% anual.

Al interior del índice de precios subyacente, a tasa quincenal, los precios de las mercancías aumentaron 0.40% y los de los servicios 0.28%.

Dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios crecieron 0.76% quincenal y los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno lo hicieron en 1.31%

A partir del siguiente reporte los especialistas esperan que inicie una joroba en la inflación debido al efecto aritmético que provocará una baja base de comparación del año pasado, lo que dificultará que Banco de México continúe con su ciclo de relajación monetaria. 

Entre abril y octubre del año pasado, cuando se dio el primer confinamiento por la pandemia de Covid-19, los puestos en el sector tecnológico aumentaron 57% según el estudio Empleos en Auge.

El análisis realizado por LinkedIn encontró que trabajos como programador back-end y front-end destacan por su alta demanda en México al contar con entre 116 a 210 vacantes abiertas el año pasado.

Mientras que puestos como ingeniero informático en la nube, especialista en SAP, expertos en servicio al cliente y venta en línea, también presentaron un crecimiento en el número de ofertas de trabajo por la digitalización de empresas que tuvieron que trasladar sus servicios y procesos a un formato en línea.

Los empleos relacionados con el análisis de datos presentaron un aumento de 68% el año pasado con vacantes de puestos como ingeniero de datos, analista de validación de datos, ingeniero de aprendizaje automático y arquitecto de datos.

"La evolución del mercado laboral y su transición a un entorno digital donde prevalece el trabajo en casa ha permitido que aquellos roles relacionados con la tecnología se encuentren experimentando un auge nunca antes visto", menciona Ramiro Luz, head of Hispanoamérica LinkedIn Talent Solution.