Billetes emitidos durante nacionalización de banca se venden en 134 mil pesos
Coleccionistas ofertan en miles de pesos las seis impresiones de billetes vigentes en los ochentas.
En 1982 cuando se dio la nacionalización de la banca, México tenía apenas cuatro años de imprimir sus propios billetes. El proceso histórico que siguió el papel moneda fue un reflejo de los cambios en el país, en los que no solo cambiaron los diseños sino que en una década sumaron ceros y cambiaron de nomenclatura, cuando la banca regresó en 1992 a la iniciativa privada.
Es por eso que la segunda serie de billetes impresos en México, conocidos como la familia A, ya son parte de la historia, por la que los coleccionistas ofertan hasta en 134 mil pesos por las seis impresiones de billetes vigentes en esa década, según cifras por las que se ofrecen en portales como Mercado Libre.
Una mirada a la historia
Las primeras familias de billetes emitidas por el Banco de México, de 1925 a 1978, fueron impresas por la American Bank Note Company (ABNC) en la ciudad de Nueva York. A partir de 1979, los billetes ya eran 100 por ciento mexicanos.
El país había entrado en un periodo de devaluación durante la década de los 80, por lo que los billetes de baja denominación cada vez se imprimían menos hasta que se extinguió su producción.
En este punto entraron papeles moneda con tres ceros, siendo que en 1980 el Banco de México (Banxico) puso en circulación los billetes de 5 mil pesos y en los siguientes tres años se hicieron comunes los de 2 mil y 10 mil. Para 1984, a dos años de la banca ya nacionalizada incluso surgió el billete de 50 mil pesos.
Al inicio de la década de los 90 la inflación fue tan alta que en septiembre de 1991 se puso en circulación un billete de 100 mil pesos.
Debido a esto, en 1992 el gobierno decidió que si seguían igual iban a tener billetes de hasta 500 mil, un millón o más. Así Banxico creó una nueva unidad monetaria llamada "Nuevo Peso".
Coleccionistas
Actualmente hay billetes de esa serie que son muy cotizados entre los que se dedican a la numismática, aunque no se tiene certeza clara sobre cuánto es el valor justo.
Por ejemplo, el billete de 2 mil pesos, el cual tiene el busto de Justo Sierra y el edificio de la Biblioteca Central de la UNAM, puede ofrecerse desde 989 pesos hasta 12 mil pesos.