Gobierno de México anunció la creación de Olinia, una armadora de autos eléctricos que busca ofrecer soluciones de movilidad accesible y sustentable. Este proyecto, con capital estatal y privado, producirá tres modelos distintos enfocados en movilidad personal, de barrio y para entregas de última milla, con precios que oscilarán entre 90 mil y 150 mil pesos.

El primer modelo de Olinia será presentado durante el partido inaugural del Mundial de Fútbol 2026 en el Estadio Azteca, marcando un evento clave para la industria automotriz nacional.

Un esfuerzo de innovación y sustentabilidad

En la conferencia matutina, la secretaria de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, Rosaura Ruiz Gutiérrez, destacó que Olinia surge como un proyecto impulsado por el sector académico y de investigación en asociación público-privada. Se anunció una inversión federal de 25 millones de pesos, con el objetivo de contribuir a la transición energética y reducir las emisiones contaminantes.

“El diseño compacto de estos vehículos no solo reducirá las emisiones, sino que también optimizará la ocupación del espacio urbano, haciendo más eficiente la movilidad en las ciudades mexicanas”, afirmó la funcionaria.

El encargado del Proyecto de Desarrollo Sustentable del Estado de México, Hidalgo y Ciudad de México, Roberto Capuano Tripp, señaló que el principal objetivo es ofrecer vehículos eléctricos de bajo costo, accesibles para la mayoría de las familias mexicanas. Comparó esta iniciativa con el éxito de los minivehículos eléctricos en China e India, donde se vendieron más de 1.3 millones de unidades en 2023.

Tres modelos sobre una plataforma modular

Capuano detalló que los tres modelos se desarrollarán a partir de una plataforma modular multipropósito, lo que significa que chasis, motor, tren motriz y batería serán diseñados una sola vez, mientras que las diferentes carrocerías se adaptarán a cada tipo de uso:

• Movilidad personal: Ideal para jóvenes y madres que trasladan a sus hijos.
• Movilidad de barrio: Pensado para trayectos cortos y entornos comunitarios.
• Última milla: Un modelo diseñado para entregas de mercancía en áreas urbanas.

Con este proyecto, el Gobierno de México busca no solo fomentar la movilidad eléctrica, sino también incentivar el uso de tecnología nacional, posicionando a Olinia como una alternativa económica y sustentable frente a los vehículos eléctricos actualmente disponibles en el país.

La expectativa es que, con un precio competitivo y un enfoque en la movilidad urbana, Olinia pueda contribuir significativamente al desarrollo del mercado de autos eléctricos en México, acercando la tecnología a más personas y fomentando un entorno más limpio y eficiente.

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Un alemán que quería reemplazar su antiguo automóvil por un Tesla Model 3 acabó comprando 28 unidades de este auto electrónico debido a un error de la plataforma de compras por Internet de la compañía, según cuenta el hijo del damnificado a través de una publicación en Reddit.

De acuerdo a la historia compartida en la red social, la familia buscaba cambiar el auto Ford Kuga que tenían en ese momento, y aprovechando las ayudas que ofrece el Gobierno alemán por la compra de un auto eléctrico, optaron por el modelo de Tesla.

Sin embargo, al intentar realizar la compra, un error en la página web de Tesla hacía que esta no pudiera formalizarse "por un problema de pago (o algo por el estilo)", a pesar de que todos los datos habían sido ingresados correctamente, señala la publicación. Ante este contratiempo, los frustrados compradores lo intentaron 27 veces más.

Dos horas después de haber tratado de adquirir el auto por primera vez, en el intento número 28, finalmente pudieron realizar la compra. Sin embargo, para su sorpresa en cada una de las ocasiones se había generado un pedido, del que no recibieron ninguna notificación al respecto.

Por lo tanto, el pedido final era de 28 unidades de Tesla Model 3 por un valor de 58.473 dólares cada una, lo que sumaba una cuenta total de 1.574.298 millones de dólares, en la cual se incluía una tarifa no reembolsable de 112 dólares por auto.

Sin embargo, el incidente fue reportado al Departamento de Servicio al Cliente de Tesla y, después de que explicaran la situación, la compañía decidió cancelar la totalidad del pedido de forma gratuita.

Cuando Carlos Pardo iba en secundaria recibió una mesa de ping pong de regalo; sin embargo, él sólo pensaba en hacer autos. Un día, su padre volvió del trabajo y lo encontró cortando la mesa con un serrucho. Su objetivo era hacer un modelo a escala del auto deportivo italiano Lamborghini Countach Lp500s, sólo con cajas, yeso y madera.

"Siempre he sido así, busco las formas de lograr mis sueños, a pesar de no tener todos los recursos. Yo quería trabajar en una réplica del auto y mi papá no tenía dinero como para darme y empezar a hacer mi modelo. A mi papá le sorprendía que yo ya quería armar coches, aunque no tuviera nada de dinero", recuerda el ingeniero Pardo.

El padre de Carlos era trabajador de la planta de Renault ubicada en Ciudad Sahagún, Hidalgo. Su gusto por los autos viene desde entonces; lo acompañaba casi todos los días a la fábrica y allí veía cómo se construían los automóviles y también cómo se desarrollaban los prototipos.

Según la Organización Internacional de Constructores de Automóviles (OICA, por sus siglas en inglés), nuestro país es el séptimo productor de vehículos en el mundo. De enero a junio de este año, se fabricaron cerca de 2 millones de autos, informó la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz.

Aunque los autos se hacen en México, son de marcas alemanas, estadounidenses y japonesas. Hasta ahora no ha existido una marca nacional de coches que se produzca en serie y mucho menos que piense en competir contra las empresas extranjeras. Sin embargo, existen, y han existido, intentos de mexicanos que tratan de incursionar en este mercado.

Carlos Pardo dirige una empresa que se dedica a producir escalas y modelos de coches a través de encargos. Ha hecho autos de exhibición para eventos de Fórmula 1 y Fórmula E, entre otros. Sin embargo, su sueño de hacer automóviles sigue vigente y actualmente trabaja en el Andrea Go, uno de los primeros autos mexicanos 100% eléctricos.

¿Una marca nacional?

El taller del ingeniero se encuentra a unas calles de la zona centro de Ciudad Sahagún, en Hidalgo. Está escondido entre las casas que lo rodean, por fuera, parece una vivienda más. Cruzando el portón cambia el panorama, hay un patio lleno de piezas de fierro acomodadas por todas partes y algunos de sus trabajadores pintando o cortando los modelos a escala.

Pardo explica que hay múltiples proyectos para desarrollar un automóvil mexicano; sin embargo, "todos tienen una estrategia diferente y cada uno piensa que es la mejor".