UNAM desarrolla cazameteoros; quieren evitar catástrofes
Científicos mexicanos trabajan en el establecimiento de la Red Mexicana de Detección de Meteoros, para detectar su actividad y prevenir posibles riesgos, anunció Guadalupe Cordero Tercero, investigadora del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México.
“Estamos montando la Red Mexicana de Detección de Meteoros, queremos estudiar todos los objetos más pequeños, queremos tratar de ver si hay patrones en la entrada de estos objetos, en particular ya sabemos que hay un patrón interesante.
“En México, entre 2010 y 2011, ingresaron objetos relativamente grandes; calculamos que cada uno era de uno o dos metros”, explicó la investigadora.
Con motivo del paso del Asteroide 2014 J025 por la órbita de la Tierra, los investigadores Cordero Tercero y Rafael Costero Gracia, del Instituto de Astronomía de la UNAM, ofrecieron una conferencia para explicar el bajo riesgo del acontecimiento.
La integrante del Instituto de Geofísica explicó que a través de una red mundial de científicos, y con el equipo necesario, se tienen detectados más de un millar de objetos que podrían poner en riesgo a la humanidad.
“De estos asteroides potencialmente peligrosos se han detectado mil 798, de éstos 156 son asteroides con más de un kilómetro.
“A estos son a los que no se les quita el ojo de encima porque no importa en dónde se estrellen contra la Tierra, causarían un evento a nivel de extinción”, señaló Cordero.
Indicó que los objetos que han logrado superar la atmósfera son de menores dimensiones y han impactado en zonas despobladas; sin embargo, existe un riesgo para las grandes urbes.
“Es bueno, nada más como ejercicio planteárselo a Protección Civil y a los servicios de Salud: qué pasaría si esto ocurriera en la Ciudad de México, si tenemos la capacidad de atender a tres mil personas.
“Tan sólo con algo tan simple como decirle a la población ‘cuando veas entrar algo muy brillante (a la atmósfera) no te acerques a las ventanas, aléjate”, indicó Cordero Tercero.
Por su parte, Costero Gracia explicó que el acercamiento entre la Tierra y el Asteroide 2015 J025 nunca representó un riesgo para la humanidad, y volverá a ocurrir en abril de 2091.
“En abril de 2091 pasará como al doble de distancia, poco más del doble de la distancia que está pasando ahorita; un acercamiento tan grande como este no lo ha habido en los últimos 400 años, ni lo habrá en los próximos 500, hay que estudiarlo ahora porque si no, ya se nos fue”, dijo el investigador.