No más compañere | RAE lanza polémica respuesta y rechaza el lenguaje inclusivo
Hace unas semanas se volvió viral el caso de Andra, quien mientras estaba en clase virtual, pidió que utilizaran la palabra compañere cuando quisieran que participara, ya que se identifica como una persona no binaria. Ante la polémica que se desató, muchos se preguntan si el uso del lenguaje inclusivo es correcto.
La Real Academia Española, RAE, es a quien las personas acuden para que les resuelva sus dudas en cuanto al uso correcto de una palabra y en esta ocasión, un usuario en Twitter realizó la pregunta que muchos tienen: ¿Es correcto el uso del lenguaje inclusivo?
Aunque en ocasiones la RAE nos sorprende con divertidas respuestas a las dudas que le llegan a través de Twitter, en esta ocasión mostró una postura un tanto dura en cuanto al uso del lenguaje inclusivo, en el que no se distingue el género masculino o femenino.
Un usuario en Twitter le preguntó lo siguiente a la RAE: “Hola, RAE. Tengo una duda, este famoso lenguaje inclusivo ¿es una jerigonza o un galimatías?” Las últimas dos palabras, que pueden sonar un tanto extrañas, significan “un lenguaje difícil de entender”, esto respecto a la primera, mientras que para la segunda quiere decir que algo puede ser confuso.
Tras recibir el tuit, la Real Academia Española lanzó una respuesta que muy pocos esperaban y rechazó el uso del lenguaje inclusivo.
“Lo que comúnmente se ha dado en llamar lenguaje inclusivo es un conjunto de estrategias que tienen por objeto evitar el uso genérico del masculino gran., mecanismo firmemente asentado en la lengua y que no supone discriminación sexista alguna”.
Ésta no es la primera vez que la RAE habla sobre el lenguaje inclusivo, ya que en algunas ocasiones cuando se le pregunta sobre este tema usa el sarcasmo y menciona que no le parece correcto el uso de este lenguaje.
¿Qué es el lenguaje inclusivo?
El lenguaje inclusivo hace referencia a toda expresión verbal o escrita que utiliza preferiblemente vocabulario neutro, o bien hace evidente el masculino y el femenino, evitando generalizaciones del masculino para situaciones o actividades donde aparecen mujeres y hombres.