La denominada cuesta de enero no quedó sólo hasta ahí, porque el impacto de los mayores precios en los bolsillos de la población se extendió a los primeros 15 días de febrero, de acuerdo con datos del Inegi.

El Índice Nacional de Precios al Consumidor registró un aumento de 0.33% en la primera quincena del segundo mes del año, la variación más elevada en los últimos 17 años para un periodo similar.

Aunque el precio de la gasolina no se incrementó en febrero, la inflación continuó fuera del objetivo del Banco de México —entre 2% y 4%—, al situarse en forma anualizada en 4.71%.

Los productos que mayor variación de precios reportaron en la primera quincena del segundo mes fueron los automóviles nuevos, gas doméstico LP, restaurantes y similares, carne de res, limón, pan de dulce, gas doméstico natural y tortilla de maíz.

Los líderes de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, y en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, afirmaron que para 2020 la economía verá mejores resultados y se traducirán en más empleos.

Pero los partidos de la oposición PAN y PRI llamaron al gobierno federal a corregir la plana en esa materia, pues el crecimiento económico de este año fue cero y no prevén buenos avances en 2020.

Ricardo Monreal afirmó que los indicadores fundamentales de la economía están mejor hoy que hace un año y que el gobierno está listo para generar mejores condiciones de empleo para el próximo año.

"Sin excesos ni festejos, pero los indicadores fundamentales de la economía están mejor hoy que hace un año: tasas de interés, tipo de cambio, inflación, salario mínimo, déficit público, endeudamiento y riesgo país. La 4T está lista para dar a México crecimiento y empleo en 2020", escribió.

Mario Delgado aseguró que el nuevo modelo económico está basado en una "economía moral" y que 2020 "será un buen año económicamente para los mexicanos, pues existen factores que convertirán a nuestro país en uno más atractivo para la inversión.

"En 2020 se va a consolidar la austeridad en el gobierno, donde cada vez se hace más con menos, porque se ha cortado todo el despilfarro y el desperdicio de recursos a través de una estricta austeridad republicana, que permitirá una inversión social histórica en los programas del bienestar", indicó.

El presidente de la Junta de Coordinación Política también señaló que las inversiones públicas en proyectos prioritarios, como el Tren Maya, el Tren Transístmico y la refinería de Dos Bocas, "son proyectos que detonarán el desarrollo regional del sureste del país".

Además, la vicepresidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna (Morena), afirmó que para 2020 y 2021 se verán los primeros resultados en materia de seguridad, sector energético y salud.

En ese sentido, Padierna Luna destacó que en temas como el combate a la corrupción "ya se observan avances sustantivos e inmediatos", pero a nivel institucional falta ver los resultados de la Guardia Nacional, el plan de rescate de Pemex y del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi).

En contraste, el coordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, René Juárez Cisneros, calificó de insuficiente el crecimiento económico que ha tenido el país, que ha sido de 2%, pero que para avanzar, dijo, debería ser de 5%.

"Debemos buscar todas las variables, todos los instrumentos, tomar decisiones para que la economía del país vuelva a crecer. Porque crecimiento es sinónimo de empleo, empleo es sinónimo de ingreso, ingreso es sinónimo de tranquilidad y serenidad en los hogares.

"El año que concluye tuvo un crecimiento cero y eso no es bueno para nadie. Tenemos que hacer algo, todos, para que la economía vuelva a crecer. Las familias mexicanas esperan mejores oportunidades en materia económica y social", señaló.

El presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, aseguró que "es urgente reactivar la economía" y que las fracciones de Acción Nacional en el Congreso de la Unión priorizarán en su agenda el apoyo a la economía familiar de los mexicanos.

Alertó que algunas malas decisiones del gobierno, como "cancelar e impulsar grandes proyectos sin criterios técnicos, han generado gran incertidumbre, desalentado la inversión y la generación de empleo.

El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que hay una mejor orientación del presupuesto, por lo que los programas sociales llegan a más gente.

En conferencia de prensa resaltó que el bienestar y el desarrollo se están financiando con la austeridad, puesto que los ahorros han permitido tener finanzas sanas.

"Hay más inversión, de cada 10 hogares en 5 está llegando el apoyo, de cada 10 hogares pobres en comunidades indígenas, en 9 hay apoyo y pronto va a llegar a los 10 hogares, es una orientación distinta del presupuesto", indicó.

Añadió que "no estamos aumentando impuestos, se está financiando el desarrollo, el bienestar con la austeridad y no permitiendo la corrupción, porque se gastaron 3 mil millones porque ahí estaba el gasto de mantenimiento a los aviones, nadamas es cosa de hacer la investigación de cuánto gastaba presidencia en viajes, sólo el sexenio pasado cuando viajaban iban dos aviones grandes, se llevaban hasta el perico, ahora viajamos, nosotros tenemos que viajar en aviones de línea y compramos diez boletos, 15 cuando mucho".

No sólo para los mexicanos; en general, conseguir ahorrar para el futuro es una asignatura pendiente universal. Las tentaciones cada vez son más gracias a un comercio globalizado y a una sociedad cada vez más basada en el consumo y, sobre todo, en la obsolescencia programada. Es normal, por tanto, que cada vez menos familias tengan una buena suma ahorrada, y que las excusas se multipliquen.

Ha pasado ya prácticamente una década desde la irrupción de la crisis financiera, pero no ha afectado a todos por igual. Lo que sí es cierto es que los salarios no han subido tanto como los impuestos, así que el motivo principal por el que no nos decidimos a ahorrar es porque pensamos que supone un gran sacrificio destinar parte de ese poco dinero obtenido a final de mes al ahorro. Sin embargo, si nos detenemos a analizar, los gastos hormiga son los principales culpables de que no lleguemos a fin de mes: el café diario, una revista o periódico, un chocolate… Al final se traducen en más de veinte pesos al día, y si decidimos invertirlos, representan casi 7500 pesos anuales de ahorro, que en 20 años se convierten en 150 000 pesos, una cantidad aceptable como ayuda al retiro.

Guardar en una alcancía es tener la tentación muy a la mano. Sabemos que podemos crear una cuenta bancaria que genere intereses y dar una orden al banco para que pase esa cantidad automáticamente al mes o a la semana al fondo de inversión. Lo más importante es conocer exactamente las condiciones de esa cuenta, si tendrá gastos anuales o si podremos retirar el dinero en caso de emergencia.

La fórmula perfecta, sin embargo, consiste en no dejar todo el dinero en el mismo lugar. Podemos ahorrar en una cuenta corriente o en un fondo de inversión; incluso invertir una pequeña cantidad en valores o intentar hacer más dinero destinando una cantidad pequeña y fija a la lotería (y nunca exceder esa cantidad). De este modo, sabremos que si un sistema falla, otros quedarán, y tendremos una mayor sensación de control, aparte de ver resultados en más de un sitio a la vez, lo que supondrá una gratificación emocional superior y nos animará a no dejar estos buenos hábitos.

La primera mitad de la cuesta de enero, en materia de inflación, fue menor a la reportada en el mismo periodo de los últimos dos años. De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), este resultado es gracias a la disminución en los precios de gasolinas, gas, servicios turísticos, entre otros bienes y servicios en la primera quincena del año.

El Índice Nacional de Precios al Consumidor presentó un incremento de 0.11% en la primera mitad de enero de 2019, el aumento quincenal más bajo para dicho periodo desde 2016. Lo anterior tiene como consecuencia que la inflación anual se ubique en 4.52%, tasa ligeramente inferior al 4.83% con que cerró el año pasado.

Entre los bienes y servicios que tuvieron una mayor incidencia sobre la inflación durante la primera mitad de enero se encuentran: chile serrano, con un incremento quincenal de 46.56%; cebolla con 15.33%; jitomate 3.06%; automóviles 1.32%; loncherías, fondas, torterías y taquerías 0.53%; plátanos 5.26%; derechos por el suministro de agua 1.23%; vivienda propia 0.10% y autobús foráneo 1.23%.

Por el contrario, entre los genéricos cuya baja de precios contribuyeron a contener la inflación destacan: la gasolina de alto y bajo octanaje con retrocesos quincenales de -1.44% y -1.54%, respectivamente; gas doméstico LP -2.03%; transporte aéreo -30.56%; tomate verde -21.58%; servicios turísticos en paquete -9.64%; hoteles -4.92%; pollo -0.48%; nopales -4.84% y ropa de abrigo con -2.44%.

Por entidades, los estados que reportaron una disminución en su nivel general de precios (deflación) fueron: Baja California con una disminución de -1.37%; Chihuahua -0.42%; Tamaulipas -0.38%; Quintana Roo -0.26% y Chiapas-0.22%. Por el contrario, entre los que reportaron la mayor inflación quincenal se encuentran: Guerrero con una alza de 0.99%; Querétaro 0.71%; Durango 0.53%; Michoacán 0.42% y Tabasco 0.41%.

El índice de precios subyacente que excluyen los bienes y servicios cuyos precios y tarifas son más volátiles registró un aumento quincenal de 0.08% y una tasa anual de 3.64%; mientras que el índice de precios no subyacente creció 0.19% quincenal, colocando su variación anual en 7.31%.

Dentro del índice de precios subyacente, el costo de las mercancías reportaron un alza de 0.22%, en tanto que los precios de los servicios retrocedieron 0.06%, quincenal.

Al interior del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.28%; en contraste, los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno bajaron 0.60%, quincenal.