Mila Kunis y Ashton Kutcher le han dado la bienvenida al verano con una nueva casa de playa en la ciudad de Carpinteria, California, justo a las afueras de Santa Bárbara. La propiedad, valuada en 10 millones de dólares y de casi una hectárea, tiene seis habitaciones, seis baños, sala con chimenea y cocina con barra y comedor. Justo lo suficiente para sus dos hijos, Wyatt Isabelle y Dimitri Portwood. Además está ubicada cerca de la entrada de un vecindario privado. De acuerdo al sitio de bienes raíces Trulia.com, el nuevo hogar de la famosa pareja está a tan solo un par de horas de su apartamento de 10.21 millones de dólares en Beverly Hills. Con esta propiedad, Mila y Ashton se unen a las celebridades con mansiones a la orilla del mar. Natalie Portman, por ejemplo, recientemente compró una nueva casa de playa a tan solo unos metros de Kunis y Kutcher, mientras que Jennifer Lawrence tiene una casa a tan solo unos metros de donde están ellos.
Mientras Amanda disfrutaba de la fiesta, sus hijos agonizaban al interior del auto en que los dejó por 15 horas. La joven de 19 años disfrutó de bebida, comida chatarra, baile… a escasos metros, sus dos hijas, de uno y dos años, respectivamente, lloraban.
Las desatendió, no le importó que, incluso, algunos de los asistentes le hicieran saber que las pequeñas estaban llorando. ‘¿Por qué no las traes?’, le cuestionaron.
Uno de los conocidos de Amanda Hawkins le pidió las llaves de su auto para dormir, accedió, pero tampoco se percató de la condición en la que se encontraban las bebés.
Fue hasta el mediodía del miércoles, 15 horas después de haberlas dejado al interior del auto, y con una temperatura que rebasaba los 30 grados centígrados, que las halló inconscientes.
Al darse cuenta de su descuido las llevó a su casa, las bañó y las trasladó a un hospital, donde aseguró que se habían desmayado después de oler unas flores en el parque al que solía llevarlas.
Los titubeos en sus declaraciones terminaron por delatar a la joven, quien confesó su desatención. Autoridades del condado ed Kerr, en Texas, presentaron dos cargos contra la joven y se le ha fijado una fianza de 70,000 dólares. En caso de que sea declarada culpable, podría recibir una condena de dos años.