El costo de la canasta alimentaria, la cual contempla productos considerados indispensables para la despensa de un hogar, se encareció 4.1% mensual durante marzo, con lo que en el primer trimestre de 2017 acumula un aumento de 11.2 por ciento.

De acuerdo con un levantamiento de precios realizado por Excélsior, para adquirir esta canasta básica se necesitó gastar 1,339 pesos el 28 de febrero pasado, cantidad que se elevó a 1,394 pesos con 50 centavos en un mes, tomando como referencia los precios de los mismos productos registrados el 31 de marzo, lo que representó un incremento de 55 pesos con 50 centavos.

El encarecimiento de esta canasta alimentaria se incrementa si se considera que el 31 de diciembre de 2016 se requirió erogar 1,254 pesos para adquirirla, lo que representa una diferencia de 140 pesos con 50 centavos contra el valor que registró el último día del mes de marzo.

Cuesta prolongada

Los números indican que el aumento mensual es superior a la inflación registrada en productos y servicios durante todo 2016, la cual se ubicó en 3.3% de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). En tanto que el aumento trimestral casi cuadruplica la cifra.

El levantamiento de precios indica que los productos que registraron mayor incremento durante el primer trimestre del año fueron el limón, cuyo kilo pasó de 20 pesos el 31 de diciembre de 2016 a 50 pesos el 31 de marzo de 2017, lo que representó un aumento de 150 por ciento; le sigue el kilo de manzana que transitó de 40 a 52 pesos en el mismo periodo, lo que significó un alza de 30 por ciento.

Al listado se suma el huevo, que el último día de diciembre se comercializó en 25 pesos el kilo, en tanto que el pasado viernes se ubicó en 32 pesos, lo que representó un avance de 28%, lo que se agrava por el hecho de que es una de las proteínas más consumidas. Mientras que el kilo de plátano tabasco, pasó de 12 a 15 pesos en el último trimestre, lo que significó un aumento de 25 por ciento.

Los especialistas coinciden en que los incrementos de diferentes productos de consumo general fueron provocados por la liberalización del precio de la gasolina, que entró en vigor el primer día del año, el cual incidió en el costo del transporte, la energía eléctrica, el gas y otros insumos básicos de toda la cadena productiva, lo que hará que el valor de la canasta alimentaria se eleve por encima de la inflación general.

Ante firma del Acuerdo de Apertura contra la Inflación y la Carestía (Apecic) entre la iniciativa privada y el gobierno federal, que reduce ocho por ciento el precio de 24 productos de la canasta básica, hasta el 28 de febrero de 2023, el doctor Alfredo Valadez García señaló que será una tarea complicada.

Será una tarea compleja por tratarse justamente de productos cuyo precio es más volátiles por distintos factores, afirmó el académico de la Escuela de Administración y Negocios de Cetys Universidad Campus Tijuana. 

Refirió que el precio de todos los productos que consumimos diariamente se establecen en función de la oferta y la demanda, sin embargo, tras la pandemia y la afectación a la cadena de suministros, así como eventos como el conflicto Rusia-Ucrania (por la exportación de trigo y maíz), han elevado los precios a niveles no vistos en 40 años para ciertas economías, por lo que los costos actuales dependen cada vez más por la inflación mundial que por la misma oferta y demanda.

 “Mantener esta contención de precios, es complicado ya que las presiones inflacionarias en México parecen no ceder en el corto plazo y se avecina justamente el trimestre (de octubre a diciembre) con más dinámica de demanda por parte de la población, donde típicamente lo que se observa son aumentos en los precios, así que, seguir con esta reducción de 8% es una meta compleja” afirmó. 

El pasado lunes se firmó un plan antiinflación entre el gobierno de México y 15 empresas de producción y distribución, este tiene la meta de reducir 8% el precio de los 24 productos que integran la canasta básica, de 1129 pesos a 1039, los cuales se mantendrían así hasta el 28 de febrero del siguiente año.

“Justamente los productos de la canasta básica forman parte de lo que llamamos inflación no subyacente, los más volátiles en la economía, como frutas, verduras y energéticos. El mercado no puede controlar si una sequía severa o unas torrenciales lluvias afectan la producción de tomate y ante su escasez, tenga que subir de precio. Por eso y otros motivos, los alimentos y todo lo que proviene del campo, es lo que más comúnmente presenta aumentos significativos de precio” explicó. 

¿APLICARÁ PARA LA FRONTERA?

El Dr. Valadez García, aclaró que, en teoría, la frontera norte está incluida en la iniciativa, sin embargo, se tiene que examinar si los efectos de cambio de precios son en términos nominales o reales, ya que muchos de los productos que se consumen de este lado de México, son importados o adquiridos desde Estados Unidos. 

“Estamos viendo esfuerzos inusuales para contener la escalada de precios. Por lo regular, le compete exclusivamente al Banco Central, en este caso al Banco de México, mediante su política monetaria el mantener estable la inflación” indicó.

Sin embargo, dijo, los aumentos históricos de la tasa de interés por parte de Banco de México no han sido suficientes y esto era previsible, ya que los efectos no son inmediatos, sino que suelen tardar hasta 1 año.

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La naranja y el aguacate son los alimentos que han subido más de precio en la administración actual. Foto: Juan Boites/ EL UNIVERSAL

En este gobierno, México sufre una carestía alimentaria dos veces más severa que en el anterior, lo que traerá consigo enfermedades y más población que no podrá comer tres veces al día.

La canasta de más de 100 tipos de alimentos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) se encareció 32% durante los primeros 43 meses y medio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador; es decir, del 1 de diciembre de 2018 al 15 de julio de 2022.

Se trata de más del doble que la que se presentó en el gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando los alimentos se encarecieron 15% en un periodo similar.

Con el expresidente Felipe Calderón Hinojosa, la inflación alimentaria fue de 24% durante el lapso igual, mientras que con Vicente Fox Quesada acumuló una tasa de 19%.

La naranja, incluida en el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), es el alimento que ha visto mayor incremento de precio durante el gobierno actual, al dispararse 150%.

A ésta le sigue el aguacate, en 125%, y luego el chayote, con 102% de aumento.

Considerada el alimento principal de los mexicanos, pues más de 90% de la población la incluye en su dieta, la tortilla de maíz acumula un incremento de 36%, mientras que con Enrique Peña Nieto fue de apenas 5%.

“Para nosotros, si estamos bien en la economía se tiene que reflejar en el precio de la tortilla y en el salario mínimo”, expuso el presidente López Obrador el 2 de julio del año pasado.

El pollo, que es el cárnico más consumido del país, ha subido de precio 53%, mientras el costo de la carne de cerdo se ha elevado 29%, de acuerdo con información del Inegi.

La población con carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad ha venido en aumento, de 21.9% en 2016 a 22.5% durante 2020. Esta situación ha alcanzado a 28.6 millones de personas, según muestra la información más reciente disponible del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Si permanece esta situación de alta inflación en lo que resta del año, es probable que se incremente la población con inseguridad alimentaria, estimó José Nabor Cruz, secretario ejecutivo del Coneval.

“Con el encarecimiento de los alimentos, lo que va a ocurrir es que, si un hogar tiene con regularidad tres comidas al día, ahora solamente tenga dos. O si con regularidad consumía carne dos o tres veces a la semana, ahora solamente sea una vez”, comentó a EL UNIVERSAL.

La directora general de la organización México, ¿Cómo vamos?, Sofía Ramírez, explicó que cuando hay choques tan importantes de precios, “no es que la gente deje de comer, sino que disminuye la calidad de los alimentos y prioriza la ingesta calórica, por lo que tenemos una prevalencia de enfermedades derivadas de una mala alimentación, que van desde hipertensión hasta diabetes”.

Señaló que hasta noviembre de 2019, los alimentos tenían poca incidencia dentro de la inflación general, pero a raíz de la pandemia han venido empujando la carestía y reduciendo el poder de compra de las familias.

Sofía Ramírez externó su preocupación de que el conflicto energético en el T-MEC pueda traer el próximo año sanciones comerciales que encarezcan las importaciones de granos y fertilizantes que realiza México desde Estados Unidos.

Destacó que los niveles más altos de pobreza laboral se encuentran en el sureste mexicano, por lo que no deja de ser relevante que en Chiapas y Oaxaca hay altas tasas de inflación.

El Coneval estima que 38.8% de la población, aproximadamente 49.7 millones de personas, tenía un ingreso laboral inferior al costo de la canasta básica alimentaria en marzo pasado.

El presidente López Obrador reconoció ayer que la carestía de alimentos impacta más a México que a la Unión Americana.

“Si bien en Estados Unidos lo que les impacta más en inflación son los energéticos, a nosotros nos impactan más los alimentos, incluso más que a ellos, el incremento en el precio de los alimentos. Por eso estamos ahora impulsando toda la actividad productiva, porque la fórmula es ser autosuficientes en energéticos y ser autosuficientes en alimentos. Eso es lo que hemos propuesto desde hace muchos años, a diferencia del modelo neoliberal”, señaló el mandatario.

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) aseguró que gracias al programa del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) ha presentado una situación de estabilidad, donde los precios altos de la canasta muestran una baja, y el precio bajo de los productos se encuentra con tendencia hacia la baja. 

Los 24 productos de la canasta básica que tomó en cuenta la Profeco son: 

1. Aceite de canola o maíz 1 pieza de 946 ml;
2. Aceite de canola o maíz 1 pieza de 946 ml 
3. Arroz en grano 1kg 
4. Azúcar Morena 1kg 
5. Bistec de Res 1kg 
6. Cebolla 1kg 
7. Chile Serrano 1kg 
8. Chuleta de puerco 1kg 
9. Frijol en grano 900 grs 
10. Huevo blanco 18 piezas 
11. Jabón de tocador 1 pieza 
12. Jitomate Saladet 1kg 
13. Limón 1kg 
14. Manzana 1kg 
15. Melón 1kg 
16. Pan de caja 680g 
17. Papa 1 kg 
18. Papel higiénico 4 piezas 
19. Pasta para sopa 220 grs 
20. Pollo entero 1 kg 
21. Tortilla de maíz supermercado 4 kg 
22. Zanahoria 1kg 
23.  Cinco litros de leche 
24. Dos latas de atún 
25. Una lata de sardinas 

“Hay una estabilidad ya en el Índice Nacional de Precios al Consumidor, en lo referente a bebidas y alimentos, una baja ya muy significativa en los precios máximos de los 24 productos y estabilidad con una tendencia ligera a la baja en los precios mínimos”, afirmó. 

En la zona centro, la opción más cara fue Walmart Express, en el Estado de México, donde el paquete se ubicó en mil 94 pesos, y La Comer, en Querétaro, a mil 76 pesos, mientras que las más económicas fueron: Chedraui, en Morelos, a 958 pesos, y Mercado Soriana, en el Estado de México, a 960 pesos. 

En la zona centro norte que abarca Baja California Sur, Aguascalientes, Durango, Jalisco, Michoacán, San Luis Potosí, Sinaloa y Zacatecas; el más caro es Walmart, en Baja California Sur, a mil 73 pesos, y Walmart Express en Michoacán, a mil 65 pesos. 

Las más económicas: Soriana Híper, en Sinaloa a 971 pesos, y Mega Soriana, en Jalisco, a 976 pesos. 

En la zona norte que abarca Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, los más caros son: Central de Abasto, en Nuevo León, a mil 97 pesos, y S Mart, en Chihuahua, Juárez, a mil 077 pesos. 

Las más económicas fueron S Mart, en Chihuahua, Chihuahua, a 951 pesos, y Soriana Híper, en Chihuahua, a 981 pesos. 

Y para la zona sur que abarca Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán los más caros son: Walmart, en Chiapas, a mil 63 pesos, y Walmart, en Veracruz, a mil 61 pesos. 

Las más económicas fueron: Bodega Aurrera, en Tabasco, a 954 pesos, y Bodega Aurrera, en Yucatán a 955 pesos.

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El gobierno de México lanzó el miércoles un plan temporal contra la elevada inflación pactado con las principales empresas de alimentos del país y que incluye un aumento en la producción de granos como maíz, frijol y arroz, pero descarta la aplicación de controles de precios.

En medio de una espiral inflacionaria agudizada por la invasión de Rusia a Ucrania, el índice de precios local se aceleró más de lo previsto en la primera quincena de abril a un 7.72% a tasa interanual, superando con creces el objetivo oficial de un 3%. "Quiero agradecer la colaboración de los productores, empresarios, comerciantes porque han aceptado participar de manera voluntaria y esto nos ayuda a todos", dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador en un acto frente a ejecutivos de firmas nacionales e internacionales presentes en México.

En rueda de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el plan busca garantizar que la canasta básica de alimentos tenga un precio justo, mientras que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez, detalló que las medidas tendrán una duración inicial de seis meses.

El funcionario informó que la iniciativa busca aumentar unas 4.8 millones de toneladas en la producción de granos básicos, con medidas como reforzar el apoyo a programas gubernamentales, la entrega de fertilizantes para el campo y la eliminación de la cuota compensatoria para la importación de sulfato de amonio.

Además, se fortalecerá la estrategia de seguridad en las carreteras para evitar el robo de alimentos, se mantendrán las tarifas en los peajes de carreteras y en rutas de tren, y se suprimirá la contraprestación por interconexión entre una línea ferroviaria y otra.

"Todas estas medidas, en gran medida, son oferta, reducción de costos, no estamos incidiendo sobre programas de control de precios ni ninguna otra medida directa", aclaró el funcionario, quien agregó que se creará una reserva estratégica de granos básicos y leche.

En el mismo acto, la vicepresidenta de Asuntos Corporativos del mexicano Grupo Bimbo BIMBOA.MX, Liliana Mejía, anunció que la firma no aumentará durante medio año el precio del pan blanco grande pese al alza del precio de muchos insumos.

"Pensamos que vamos a impactar muy rápidamente la expectativa sobre el precio de la canasta básica, ese es el objetivo, no es resolver todo el problema pero es resolver una parte muy importante del problema", agregó Ramírez de la O. 

Adquirir la canasta básica resulta cada vez más complicado para las familias en Baja California. El aumento de algunos productos de primera necesidad ha llevado a alguna familias a reducir sus gastos. 

"Esta muy mal porque los sueldos, solo les aumentan una miseria y suben los precios de los productos casi al doble, no está parejo", dijo una madre de familia residente de Tijuana.

De acuerdo al Grupo Consultor de Mercados Agrícolas proyectan que la cuesta de enero se pueda extender hasta febrero o marzo de 2022.

"Los sueldos no están como para lo que hoy tenemos en la canasta básica, tenemos que ajustarnos el cinturón", agregó una ciudadana.

Madres de familia que radican en las zonas urbanas de Tijuana han tenido que hacer un ajuste en sus compras. 

"Todos los precios están súper altos, las frutas y las verduras en costos se han ido hacia arriba", agregó molesta otra ciudadana.

Algunos de los productos que registran un aumento de precios en México, se ha debido a una alta demanda en los diversos productos tras la apertura de la economía ante los cierres por covid-19.

Para las familias que perciben reducidos ingresos, no tienen otra opción que ajustarse el cinturón ante larga cuera de enero.

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Adquirir la canasta básica resulta cada vez más complicado para las familias en Baja California pic.twitter.com/Q16Hryguob

— Cadena Noticias (@cadena_noticias) January 5, 2022

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