Carmen Salinas habla de su origen humilde a niños enfermos
Aunque dice que siempre ha realizado labores altruistas y no nada más desde que tiene una diputación plurinominal, la actriz Carmen Salinas, indicó que ayudar a los demás porque siempre tiene presente y recuerda su origen humilde y carencias que tuvo en su infancia.
Durante su visita, en la que llevó medicamentos y alimentos a las organizaciones no gubernamentales; casa Candy donde atienden a niños que sufren parálisis cerebral, así como a pequeños que sufren cáncer, en la Casa de la Amistad, refirió que por su origen humilde desde pequeña empezó a trabajar.
Al recordar su infancia dijo: "Éramos muy pobres y desde niña comencé a trabajar, lavaba platos, ayudaba a las vecinas de la vecindad dónde vivía, allá en Torreón, Coahuila, en la calle de Leona Vicario, a hacer quehacer, para poder apoyar a mi mamacita. Recuerdo que le pedía a una vecina una taza de frijolitos, se los llevaba a mi mamacita (Carmen Lozano Viramontes), y ella, freía tortillas y las embarraba de frijolitos que nos sabían a gloria".
Durante el tiempo que permaneció en la casa, Candy, dónde la atendió el doctor en rehabilitación, Jorge Hernández Sánchez, se enteró de que con la aplicación de una ampolleta de toxina botulínica tipo "A", a niños con parálisis cerebral espástica, (rígidos) de moderada a severa, su efecto paraliza el músculo, así es más fácil que logren mover estos pacientes las partes afectadas. El costo de la inyección es de quince mil pesos, pero aquí su costo va de los 200 a 600 pesos.
Asimismo, Salinas observó el proceso de la preparación de la ampolleta que se dosifica de acuerdo a las necesidades del paciente y tuvo la oportunidad de saludar a Eleazar de 22 años de edad, quien visiblemente emocionado, agradeció el gesto de la actriz y diputada, con un beso en la mejilla.
Además fue enterada de los motivos por los cuales un ser humano puede sufrir parálisis cerebral, ya sea que se dé desde su gestación o por algunos métodos que pueden emplearse cuando se presentan complicaciones para que nazca el bebé.
Recordó, que el hijo de una asistente que tuvo en su casa, de nombre Rodolfo, siempre lo apoyó y ayudó a su mamá para que construyera una casa y vivieran lo mejor posible: "Ayudé a esa familia para que Rodolfito, tuviera lo necesario para estar lo mejor posible y ayude a construir su casita, siempre que me veía trataba de correr a abrazarme, son muy inteligentes estos niños".