Panteón Rococó lleva calor a Europa
Para Panteón Rococó ya es un ritual el irse cada año a Europa. Con esta gira, que acaban de culminar hace unos días, ya son 18 años consecutivos en los que van a repartir un poco de calor al viejo continente.
Pero ésta no es una aventura sencilla, recuerda en entrevista Paco Barajas, trombonista de los "vendedores de caricias". Han sudado la camiseta, pasado hambres, dormido en donde sea como historia de película.
Se trata de un sacrificio placentero que les ha dado tablas para afrontar retos mayúsculos, desde grabar un concierto en vivo en la Arena Ciudad de México con invitados estrella, hasta ser los cabezas de cartel de festivales como el Pepsi Ska Fest 2017 (a realizarse el próximo 2 de septiembre, en el Pepsi Center WTC).
-Paco, ya es toda una tradición para Panteón Rococó esta visita anual a Europa.
Paco Barajas (PB): Tenemos 18 años viajando constantemente a Europa, sobre todo a Alemania. Lo hacemos desde el 2000.
-En Europa, ¿tocan para público mexicano que radica allá o para alemanes?
(PB): Fíjate que son aproximadamente un 80% alemanes, aunque en esta ocasión vimos a muchos mexicanos, comienza a darse ese fenómeno de mexicanos viéndote en otros países.
-¿Qué le vende Rococó a los alemanes?
(PB): Mucho baile, mucha fiesta, el público alemán es muy receptivo a la música, la han pasado muy bien desde la primera vez que fuimos hace 18 años y por eso hemos regresado; supongo que las bandas de allá hacen música no tan bailable, nosotros les llevamos un poco de calor.
-¿Qué hace falta para que más bandas mexicanas crucen el "charco"?
(PB): Las bandas necesitan atreverse. Nosotros tuvimos la suerte de ser invitados a un festival y nos pegamos a todo lo demás, fue un trabajo muy duro, dormir donde sea, comer donde sea durante meses, las bandas necesitan foguearse en cualquier territorio; no como ahora, que creen que subir una rola a Facebook es tener una carrera, no, hay que conocer nuevos públicos y tomar experiencia de ello...