Un total de 16 analistas del Instituto del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Infonacot), fueron separados de su cargo, además de que se les inició una investigación administrativa y penal al vinculárseles con actos de corrupción.
Las anomalías se detectaron en Ciudad de México y Edomex.
Investigaciones del Órgano Interno de Control de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) determinaron que los ex empleados recibían documentos, presuntamente apócrifos, para el otorgamiento de créditos.
Las irregularidades se detectaron en las oficinas de Infonacot de Vallejo, Mixcoac y Zaragoza, en la Ciudad de México; así como en el municipio de Tlalnepantla de Baz, en el Estado de México.
La STPS informó que, ante la pérdida de la confianza, el titular de la dependencia, Alfonso Navarrete Prida, determinó separar de su cargo a los 16 analistas.
Por instrucción del responsable de la política laboral del Gobierno Federal, se indicó se iniciaron las investigaciones administrativas ante el Órgano Interno de Control, además de que se presentó la denuncia correspondiente ante la Procuraduría General de la República (PGR).
También se giraron instrucciones para que los 16 exfuncionarios involucrados en este caso no ingresen a ninguna oficina de la dependencia.
La STSP solicitó a los trabajadores que presenten su denuncia, ante cualquier acto irregular que detecten en el otorgamiento de sus créditos en las oficinas de Infonacot.
Agregó que las visitas de inspección se mantendrán en cada una de las oficinas, representaciones y direcciones en donde se detecten presuntas irregularidades que afecten el bolsillo de los trabajadores y de la propia institución.
Este es el segundo caso de presuntos actos corrupción revelados esta semana por parte de la STPS, luego de que el jueves se informó que la subdelegada de dependencia en León, Guanajuato, Dulce María Alcantar, fue separada de su cargo.
La exfuncionaria y dos mujeres más, que no trabajaban para la dependencia, están relacionadas con un caso de usurpación de funciones.
Según las investigaciones, las cómplices de Alcantar ingresaban a las oficinas de la subdelegación y, tras revisar documentos, acudían a las empresas a hacer supervisiones, con la aparente intención de extorsionar.