Germán Vázquez Rubio regresó a su tierra después de más de 40 años, convertido en un laudero internacional, pues es el autor y fabricante del modelo de guitarra de la película animada Coco.
Será homenajeado por el pueblo que lo vio nacer hace 65 años, debido al beneficio económico y turístico que dio su obra a los habitantes de este municipio, ubicado a 150 kilómetros de la capital michoacana.
Entrevistado por EL UNIVERSAL, Germán Vázquez revela que el precio que le pagó Disney Pixar por la creación del modelo y la fabricación de la guitarra que utilizan los protagonistas de la película fue de casi 20 mil dólares (380 mil pesos).
El laudero internacional fue recibido en la esquina de las calles Independencia y Cuauhtémoc, en el centro de Paracho, el lugar donde aprendió de manos de su tío, Manuel Rubio Cano, el arte de construir artesanalmente las guitarras.
Germán recordó que desde los 15 años se inició en la laudería y hoy a sus 65, la guitarra que creó para Coco ha sido uno de sus más grandes retos.
Relató que Disney Pixar, a través de una empresa dedicada a la música y relacionada con el mundo de Hollywood lo contrató para hacer el modelo para la Noche de Muertos que se celebra en México.
“Me dieron una fotografía para que hiciera algo en la vida real, como dándole la vida a un sueño, y yo tuve que hacer una guitarra tipo mexicana, pero con un sonido clásico”, relató.
En su taller en Estados Unidos, ubicado al sur de Los Ángeles, California, Germán tardó nueve meses para elaborar el modelo y construir la apreciada guitarra. No fue fácil armonizar los colores, los materiales y los adornos, porque la solicitud que le hicieron fue: un instrumento con características de una guitarra clásica.
La guitarra tenía que cumplir con todas las medidas, y para eso debía ver los espesores de la madera, decidir qué tipo de madera y cómo usar la pintura blanca, ya que las capas de tinta no deberían ser muy gruesas porque eso contrarresta el sonido.
Para que la guitarra fuera perfecta utilizó Maple Europeo y la tapa de una madera de reserva alemana, de 15 o 16 años más o menos, así como un detallado de concha nácar y madre perla; además le hizo incrustaciones de oro de 24 kilates.
Construir esta guitarra, relató Germán, no sólo le llenó de orgullo. También sintió una gran responsabilidad, al saber que las manos de un “parachense” podrían ser la proyección de su pueblo para que éste se reactivara su economía.
Más aún, confió, como una aportación a su gente, luego que salió de su pueblo desde la década de los años 70 y no regresó más.
Desde su llegada a los Estados Unidos siempre trabajó en talleres para elaboración de guitarras: “Yo siempre buscaba trabajar en esto, porque esto es lo que a mí me gusta. Yo soy como el Miguelito de la película. Como él es un fanático de la música, yo soy un enamorado de las guitarras, y de mi gente también”, expresó.
Germán Vázquez afirmó que si bien los derechos de autor de la guitarra original los tiene Disney Pixar, las réplicas no idénticas del instrumento han ayudado a los guitarreros de Paracho.
Germán no buscó posicionarse de otros modelos similares, para que fueran sus paisanos los que pudieran explotar y gozar de la fama de la guitarra por el bien de sus familias; “y así todos tenemos bendiciones”, afirma.
El trabajo de Germán Vázquez y el resultado del éxito de la película Coco generaron que sábado y domingo su pueblo se llenara de fiesta y se congregarán cientos para rendirle un homenaje, entre otras cosas, por la derrama económica que ha representado para los artesanos de la “Capital Mundial de la Guitarra”.
Sin dar cifras, la alcaldesa de Paracho, Marisol Castro Baca, agradeció al laudero que en este momento y desde que se estrenó el film animado, la producción y ventas de guitarras similares a las de la película se hayan duplicado.