Un matrimonio estadunidense corrió al rescate de una ardilla cuando una amiga les llamó angustiada luego de encontrar al roedor que había sido atacado por un gato. Cuando fueron a verla, la pequeña estaba bastante afectada y parecía tener daños en el hocico, pues no podía morder su comida. Para salvarle la vida, la pareja decidió llevarla a su hogar para encontrar la manera de alimentarla mientras se recuperaba.
Así, descubrieron que podían sustituir su alimento por fórmula de leche para gato, que le daban por medio de una jeringa. Para ellos, era bastante divertido ver lo mucho que le gustaba tomarla.
Te recomendamos: La tierna reacción de un perrito al encontrarse con su dueña tras dos años perdido Por supuesto, la ardilla comenzó a sentirse cómoda junto a ellos quienes la mimaban todo el tiempo y le daban cariño, para ayudar a su recuperación.
Poco a poco, la ardilla comenzó a sentirse mejor y recuperó su capacidad para morder, después del ataque de aquel gato ocurrido a finales del año 2018. Esto, significaba que los humanos debían dejarla volver a la naturaleza, por mucho dolor que les causara, ya que se habían encariñado mucho con ella.
Fue así que él, comenzó a ejercitarla para ayudarla a ganar fuerzas y que pudiera sobrevivir en la naturaleza y, cuando observó que ya estaba completamente lista para vivir su vida salvaje, la sacó al jardín, esperando que el roedor comenzara a correr y se alejara trepando los árboles.
Sin embargo, una vez que la ponía en el pasto, la pequeña ardilla de 4 años de edad trepaba por sus pantalones y se subía a su hombro, su lugar favorito, para regresar a casa, relató el hombre a The Dodo.
Él lo intentó muchas veces más, e incluso la dejaba sobre los árboles en donde ella jugueteaba un rato, sin embargo, terminaba regresando con él a la casa, por lo que, después de un tiempo, decidió rendirse y, si eso era lo que ella quería, dejar a la ardilla ser su mascota.
Ella ha estado durante dos años con la familia que le salvó la vida y está perfectamente cómoda viviendo con ellos. Es la mascota ideal pues le encanta acurrucarse y recibir caricias. Además, es fan de los viajes en coche, pues la arrullan y, además, le encanta viajar a la playa con ellos.
Nunca se separa de su lado. En Instagram, sus padres humanos se encargan de documentar su vida y demuestran que, a pesar de estar con ellos y haberse vuelto"doméstica" no deja de ser una ardilla y también hace cosas de una, como comer insectos, trepar árboles y corretear feliz por el jardín.