Ezra Miller comenzará tratamiento por “problemas complejos de salud mental”
“Quiero pedir perdón a todos a quienes he alarmado y ofendido con mi comportamiento”
Ezra Miller buscará tratamiento para lo que describe como “problemas complejos de salud mental”, tras años de comportamiento público cada vez más inquietante y errático –que incluye cargos por allanamiento de morada, acusaciones de manipulación a menores, arrestos por conducta desordenada y acusaciones por robo artístico–.
Reportado inicialmente por Variety, Miller se disculpó por su comportamiento reciente en una declaración publicación proporcionada por un representante. “Habiendo pasado recientemente por un momento de crisis intensa, entiendo que estoy sufriendo problemas complejos de salud mental y he empezado tratamiento”, se lee en la declaración. “Quiero pedir perdón a todos a quienes he alarmado y ofendido con mi comportamiento. Me comprometo a hacer el trabajo necesario para regresar a una etapa saludable, segura y productiva de mi vida”.
Las noticias llegan apenas días después de que Rolling Stone revelara que la policía había visitado la granja en Vermont del actor de 29 años, tras preocupación por la salud de una madre joven y sus tres hijos, que estaban alojados en la residencia. La semana pasada, la Policía Estatal de Vermont intentó en múltiples ocasiones emitir una orden de emergencia para remover a los hijos –de uno, cuatro y cinco años– de su cuidado. Un documento de la oficina del fiscal del estado de Vermont mencionaba que Miller parecía “evitar el servicio” al negar que la mujer y sus hijos seguían en la propiedad. Las visitas de autoridades locales también coincidieron con cargos por allanamiento de morada en contra del actor, después de que Miller supuestamente entrara a una casa cercana para robar alcohol en mayo.
El actor y la joven madre se conocieron antes este año en la estancia extendida en Hilo, Hawaii de Miller, durante la cual fue protagonista de una serie de incidentes violentos ocurridos a lo largo de varias semanas. Estos encuentros con la ley incluyeron un arresto por conducta desordenada y acoso en un bar local, problemas con una orden de restricción temporal después de entrar al cuarto de una pareja y amenazarlos, y otro arresto por aventar una silla que le pegó a una mujer durante una fiesta en una residencia privada. El comportamiento de Miller en Hawaii provocó una junta de emergencia entre los ejecutivos de Warner Bros. y DC para discutir el futuro del actor con el estudio y el de la franquicia de The Flash.
En junio, la madre dijo que Miller la ayudó a escapar de un “ex violento y abusivo”. Agregó: “Mis niños ahora pueden relajarse más para curarse, gracias a la seguridad y el cuidado que Ezra les ha proporcionado”. Sin embargo, el padre de los niños y diversos individuos con conocimiento directo de la situación en la propiedad de 96 acres de Miller, afirmaron que el recinto era un ambiente caótico e inseguro para niños, describiendo un incidente en el que el niño más chico recogió una bala suelta y la metió a su boca.
También en junio, los padres de un activista de Standing Rock solicitaron una orden de protección para su hijo de 18 años, Gibson, alegando que Miller lo manipuló desde temprana edad y le proporcionó LSD. Gibson le dijo a Rolling Stone que su relación con Miller se estaba llevando fuera de proporción. “La noción de que me ha lavado el cerebro o de que he sido coercido en cualquier contexto es grotescamente falso”, escribió Gibson en un correo electrónico. “Que los medios y el público crean y sensacionalicen las afirmaciones de mis padres es una violación horrible de mi dignidad y de la de Ezra”. Tan solo semanas después, una madre de Massachusetts también obtuvo una orden temporal de prevención de acoso en contra de Miller para proteger a su hijo de 12 años.
De acuerdo a Variety, los ejecutivos de Warner Bros. apoyan la decisión de Miller de buscar tratamiento. Se espera que el actor protagonice la próxima película de DC Comics, The Flash, que aún está programada para un estreno en el verano de 2023.