Los juegos de cartas más populares del mundo: el blackjack, el póker y el bridge
Los juegos de cartas son de los juegos más antiguos que existen. Teniendo más de 600 años, en la actualidad pueden encontrarse una gran variedad de estos juegos. Hoy vamos a hablar de 3 de los más populares de todos los tiempos: el póker, el blackjack y el bridge.
Además de su versión tradicional, todos estos juegos también pueden jugarse de forma completamente digital. En estos últimos años, las versiones de póker, bridge y blackjack online se han vuelto cada vez más populares, ya que permiten jugar constantemente desde la comodidad del hogar.
Blackjack
Vamos a empezar con el Blackjack. A diferencia de otros juegos de la lista, este es jugado únicamente por una sola persona, lo que lo hace mucho más rápido y dinámico. Como veremos a continuación, el blackjack tiene reglas muy simples.
También conocido como 21, el objetivo de este juego es conseguir una mano que se acerque lo más posible a 21 sin superar nunca este valor. El puntaje es muy simple, ya que cada carta mantiene su número, salvo los reyes, reinas y jacks, que valen 10 y los aces que valen 1 o 11, dependiendo de lo que más le convenga al jugador.
Al principio de cada turno, tanto jugador como a la mesa se les da dos cartas. Las cartas del jugador permanecen boca arriba, mientras que una de las cartas de la mesa estará boca arriba y otra boca abajo.
El jugador entonces puede elegir recibir otra carta o mantener su mano actual. Si al final de la ronda la mano del jugador se acerca más a 21 que las de la mesa, gana, si no, pierde. Por otro lado, si las cartas del jugador superan 21 en cualquier momento este pierde.
Además de sus versiones presenciales, hoy en día cada vez son más los jugadores que optan por probar el blackjack online, ya que les permite acceder a muchas de las variedades de este juego.
Póker
Sin lugar a dudas el póker es el juego de cartas más popular de todo el mundo. Este juego es conocido por hacer que sus jugadores tengan que participar en juegos mentales. El póker gira en torno a conseguir la mejor mano posible, para luego compararla con la de los oponentes y decidir así quien gana una ronda puntual.
Durante cada ronda, cada jugador apuesta una cantidad de fichas igual o mayor que el jugador anterior, y el jugador con la mejor mano se lleva las apuestas de todos los demás. En estas rondas, los jugadores tienen la opción de retirarse, igualar o aumentar la apuesta. Al retirarse, uno se pasa de la ronda sin apostar nada, al igualar uno apuesta lo mismo que el jugador anterior y al aumentar uno incrementa la apuesta al valor que quiera.
La gracia del juego es que uno debe intentar adivinar las manos de sus oponentes y hacer que piensen que uno tiene una mano buena o mala, dependiendo el caso. Además de distintas técnicas más sutiles cómo usar el lenguaje corporal, la cantidad de fichas que uno apuesta es generalmente la forma más común de tratar de convencer a los oponentes.
Hoy en día pueden encontrarse varias versiones distintas de este juego. Entre ellas las más destacadas son Texas Hold em, Omaha y Seven Card Stud, que, por lo general, ofrecen pagos en dólares.
Bridge
Por último, vamos a cerrar nuestra lista de hoy con otro juego muy querido, el bridge. A diferencia de los anteriormente mencionados, el bridge es un juego de cartas en equipos. En él, 4 jugadores divididos en dos equipos
El principal objetivo en el juego de bridge es acumular el mayor número de bazas posible. En este tipo de juegos, una baza son 4 cartas jugadas por cada uno de los distintos jugadores en sus respectivos turnos. Una baza es ganada por el jugador que pone la carta más alta del palo de la baza.
En cada ronda, se juegan trece bazas, que se conforman por las cuatro cartas jugadas por cada jugador en orden. El jugador que inicia cada baza tiene la libertad de jugar cualquier carta de su mano. Los otros tres jugadores, por su parte, deben seguir el mismo palo que se jugó inicialmente, siempre que tengan una carta del mismo palo en su mano.
Si no tienen una carta del mismo palo, pueden jugar cualquier otra carta. A pesar de la obligación de seguir el palo, el juego permite una gran flexibilidad en cuanto a la elección de las cartas que se juegan en cada baza.