El Ejército Popular de Liberación de China llevará a cabo ejercicios con fuego real en las cercanías de Taiwán del 4 al 7 de agosto.
Lo hará en respuesta a la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EU, Nancy Pelosi, a Taiwán, donde aterrizó este martes, y donde el miércoles visitó el Parlamento local y se reunió con la presidenta Tsai Ing-wen.
Pekín reclama la isla como territorio propio y ha tomado el viaje de la líder parlamentaria, el de más alto rango de una autoridad estadounidense a Taiwán en 25 años, como una grave afrenta.
Poco después del aterrizaje de Pelosi en Taipei, los medios chinos anunciaron el ejercicio militar con la prohibición de que todos los barcos y aviones civiles ingresen a las regiones próximas al lugar.
"Los que juegan con fuego se quemarán", dijo el Ministerio de Exteriores de China, que consideró el viaje como "extremadamente peligroso".
Más tarde se supo que el Ministerio de Relaciones Exteriores de China convocó a consultas al embajador de Estados Unidos en Pekín, Nicholas Burns, para protestar contra el viaje.
El viceministro de Relaciones Exteriores chino, Xie Feng, dijo que la naturaleza de la visita de Pelosi fue "despiadada" y advirtió de graves consecuencias. Dijo que China no se quedaría de brazos cruzados.
La advertencia de China
Los ejercicios militares chinos incluirán "disparos en vivo de largo alcance en el Estrecho de Taiwán", según el ejército.
"Esta acción está dirigida a la reciente e impactante escalada de Estados Unidos en el asunto de Taiwán", aseguró un portavoz militar en un comunicado.
También aseguró que es "una seria advertencia para las fuerzas independentistas taiwanesas o para aquellos que buscan la independencia".
Los ejercicios comenzarán una vez que Pelosi ya no esté en Taiwán, según estiman analistas.
De momento se han observado incursiones aéreas chinas en las cercanías de Taiwán, acciones con las que el gobierno de Xi Jinping suele mostrar su fortaleza militar en situaciones de tensión.
El Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán indicó que 21 aviones chinos ingresaron el martes a la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán (ADIZ).
Entre las aeronaves se cuentan 10 Shenyang J-16, uno de los cazas avanzados de China.Una zona de identificación de defensa aérea es un área fuera del territorio y el espacio aéreo de un país, donde sin embargo este identifica y supervisa las aeronaves extranjeras.
Son zonas autodeclaradas y técnicamente forman parte del espacio aéreo internacional.
Por otra parte, Pekín también anunció sanciones económicas contra Taiwán al suspender las importaciones de 100 empresas del sector de la alimentación del país.
Un "grave impacto" en las relaciones
El Ministerio de Exteriores de China condenó enérgicamente la visita de Pelosi a Taiwán, calificándola como una "grave violación del principio de una sola China".
Aseguró que "vulnera gravemente la soberanía y la integridad territorial de China" y tendrá un "grave impacto" político en las relaciones entre China y Estados Unidos.
"Socava gravemente la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán y envía una señal muy equivocada a las fuerzas separatistas para la 'independencia de Taiwán'", indicó el ministerio en su comunicado.
Pekín instó a Estados Unidos a "no seguir por el camino equivocado y peligroso" y a "dejar de jugar la 'carta de Taiwán' e interferir en los asuntos internos de China".
La posibilidad de la visita, que forma parte de una gira por Asia, ya había elevado las tensiones entre Washington y Pekín, y el gobierno chino había amenazado con "fuertes consecuencias" si Pelosi llegaba a Taipei.
La Oficina de Asuntos de Taiwán del Partido Comunista de China (PCCh) también cuestionó la visita y añadió que cualquier intento de buscar la independencia de Taiwán "será destrozado por la poderosa fuerza del pueblo chino".
China ve a Taiwán como una provincia rebelde que se reunificará con el continente tarde o temprano.
Mientras, Taiwán se ve a sí mismo como un país independiente, gobernado democráticamente, pese a que nunca ha declarado oficialmente su independencia.
Si bien Estados Unidos mantiene lo que llama una "relación sólida y no oficial" con Taiwán, tiene vínculos diplomáticos formales con China y no con la isla.