Diálogo sin imposiciones, responde Cuba a Trump
El Gobierno cubano afirmó hoy que cualquier estrategia que pretenda cambiar el sistema en la isla está condenada al fracaso, opinó que Estados Unidos no está en condiciones de dar lecciones sobre derechos humanos e insistió en su voluntad de continuar el diálogo y la cooperación con el país vecino.
En una declaración difundida simultáneamente en todos los medios estatales, el Ejecutivo de Raúl Castro respondió a los anuncios realizados ayer en Miami por el presidente estadunidense, Donald Trump, quien endureció las políticas de Estados Unidos hacia la isla.
Cualquier estrategia dirigida a cambiar el sistema político, económico y social en Cuba, ya sea la que pretenda lograrlo a través de presiones e imposiciones, o empleando métodos más sutiles, estará condenada al fracaso", afirmó el Gobierno de la isla en su primera reacción al nuevo posicionamiento de Washington.
Sostuvo que los cambios que sean necesarios en Cuba, como los que se están realizando ahora como parte del proceso de actualización del modelo económico y socialista de la isla, los "seguirá decidiendo soberanamente" el pueblo cubano.
Asumiremos cualquier riesgo y continuaremos firmes y seguros en la construcción de una nación soberana, independiente, socialista, democrática, próspera y sostenible", recalca el texto de la declaración.
La declaración cubana opina que el presidente estadunidense ha estado otra vez "mal asesorado", al tomar decisiones que favorecen los intereses políticos de una "minoría extremista" de origen cubano residente en el estado de Florida, que por "motivaciones mezquinas no desiste de su pretensión de castigar a Cuba y a su pueblo".
En el apartado de los derechos humanos, el Gobierno de Cuba rechaza la "manipulación con fines políticos" y el "doble rasero" en el tratamiento de ese tema y asegura que el pueblo del país caribeño "disfruta de derechos y libertades fundamentales", y exhibe "logros de los que se siente "orgulloso", que son una "quimera" para muchos países del mundo, incluidos los Estados Unidos.
"Los Estados Unidos no están en condiciones de darnos lecciones", añade y manifiesta "serias preocupaciones" por el respeto y las garantías de los derechos humanos en ese país, donde cita "numerosos casos de asesinatos, brutalidad y abusos policiales, se explota el trabajo infantil, discriminación racial y se amenaza con imponer más restricciones a los servicios de salud".