Policías de Estados Unidos y Europa anunciaron este jueves que cerraron dos importantes sitios en la denominada "Dark Web" donde se traficaban armas y drogas de manera muy discreta.

El secretario de Justicia estadounidense, Jeff Sessions, afirmó que ambos sitios, Alphabay y Hansa, permitían a miles de revendedores de drogas poderosas, como el Fentanyl, y otros bienes ilegales, captar a unos 200 mil clientes a lo largo y ancho del planeta. 

Durante más de dos años de operación, AlphaBay fue usado para vender drogas, documentos de identidad robados y fraudulentos, productos falsificados, malware y otras herramientas informáticas ilegales, armas de fuego y productos químicos tóxicos en todo el mundo, indicó la dependencia en un comunicado.

"Este caso, conducido por agentes y fiscales dedicados, demuestra que uno no se puede ocultar de manera segura. Esa persona será encontrada, se desmantelará su red y se le llevará ante la justicia", advirtió Sessions en un mensaje dirigido a los personajes importantes de la llamada "Dark web".

El anuncio se produjo tres semanas después que AlphaBay, considerado el mayor y más lucrativo "mercado negro" en internet, dejara repentinamente de funcionar. 

Para visitar estos sitios se requería utilizar “Tor”, un navegador o software que garantiza el anonimato, al ocultar el rastro del usuario.

Su predecesor, Silk Road ("la ruta de la seda"), 10 veces menor que AlphaBay, había sido cerrado por las autoridades en 2013.

El 5 de julio el canadiense Alexandre Cazes alias “Alpha02”, creador y administrador de AlphaBay, fue detenido en Tailandia. Esta semana fue hallado muerto en su celda. La policía local explicó que Cazes se ahorcó utilizando una toalla.

El cierre de AlphaBay condujo a sus usuarios a redirigirse hacia el sitio Hansa, de menor envergadura.

La policía holandesa ya había infiltrado y tomado clandestinamente el control de Hansa, lo que permitió a los investigadores identificar a vendedores y clientes que intercambiaban bienes ilegales en esta plataforma.

Hansa fue también cerrado, según las autoridades. 

"Otras operaciones de este tipo van a tener lugar", advirtió Rob Wainwright, director de la agencia europea de policía Europol. 

Uno de los sitios emblemáticos de la ciudad, conocido como el “Mercado Negro” pasa por una etapa crítica, y la economía que se movía hace algunos años como sustento de miles de familias, hoy sortea el paso del tiempo y pone en riesgo la manera de vivir de muchos.

Ubicado a la entrada de la ciudad, el conocido lugar ha dejado de ser poco a poco, un atractivo turístico debido tanto para locales como para extranjeros; el descuido y la falta de apoyo para locatarios ha mermado su “popularidad”.

Quienes han estado ahí por años, lamentan la situación actual. La pandemia tampoco ayudó a que las cosas mejorarán, pero, se aferran a “levantar” este rincón de Ensenada que hace muchos años, fue el escaparate de los fines de semana, sobre todo, en verano.

Alrededor, se pueden ver varios comercios de comida; mariscos frescos, los tradicionales tacos de pescado, cócteles de camarón y otros platillos que se ofrecen al que camina por los pasillos. Esperan ansiosos que comensales llenen las mesas.

“Esta es una temporada muy buena para el mercado; el año pasado fue muy difícil para todos. Algunos tuvieron que irse y buscar otra manera de vivir para sostener a sus familias. Ya no había paseos, producto para vender y teníamos que seguir adelante”, compartió Socorro, quien ayuda cada temporada de verano en un local.

La pandemia detuvo por un momento todas las actividades, y los pescadores, relató, tuvieron que buscar nuevos empleos, esperar apoyos de gobierno; aceptar las despensas que les dieron, pero no era suficiente. Hoy, tienen la esperanza que se vaya recuperando la economía del tradicional mercado.

Llegarán apoyos e inversión 

Este fin de semana, autoridades estatales y municipales, dieron a conocer que serán invertidos más de 10 millones de pesos para el remozamiento del Mercado Negro de Ensenada.

La próxima semana se dará a conocer el proyecto ejecutivo, mediante una presentación sobre cómo quedaría la fachada y diversos espacios; por parte del estado, serían 6.55 millones de pesos, aproximadamente, mientras que el Gobierno Municipal y la API, participarían con 2 millones de pesos, respectivamente. 

También que será incluido en la oferta turística de promoción por parte del Estado de Baja California.