Robots ¿harán noticias para Internet?
El proyecto Radar financiado por Google tiene como objetivo generar más de 30 mil historias periodísticas al mes, utilizando lenguaje de programación e inteligencia artificial. Con esta intención la agencia de prensa británica Press Association y Urbs Media obtuvieron una beca de parte de Google por 706 mil euros para construir un servicio de noticias por computadora que creará Reporters and Data and Robots (Radar por sus siglas en inglés).
Gary Rogers editor jefe de Urbs Media comentó que Radar busca combinar el periodismo tradicional con la producción automatizada: “Vamos a usar bases de datos para contar historias que han pasado desapercibidas. El objetivo es analizar la información de las alcaldías locales, las autoridades sanitarias, la policía, las ONG, los hospitales y otros organismos públicos y privados para generar noticias de interés en cada región de Gran Bretaña”.
Mencionó que el proceso de creación de las noticias parece sencillo: una vez el periodista a cargo identifica una posible historia, la máquina recolecta los datos, los ordena, los analiza y utiliza una plantilla de escritura creada con inteligencia artificial, que en teoría puede capturar todos los ángulos y reflejar las diferentes direcciones de la historia; la segunda fase de Radar tendrá la capacidad de generar, automáticamente, gráficas, imágenes y videos para acompañar los artículos.
Por su parte David Chavern, presidente de la Alianza de Medios de Comunicación de Estados Unidos, señaló “El periodismo de calidad es fundamental para sostener la democracia y la sociedad cívica. Para asegurar que ese periodismo tenga futuro, las organizaciones noticiosas que lo financian deben poder negociar colectivamente con las plataformas digitales que controlan la distribución y el acceso de la audiencia en la era digital”.
Finalmente Chavern comentó “Lo cierto es que por muy complejos y avanzados que sean los algoritmos del futuro, no podrán reemplazar la capacidad y el criterio editorial de los buenos periodistas. En este momento es imposible que el texto de una máquina produzca la empatía, el reconocimiento y la credibilidad que todavía distingue a uno de los oficios más bellos del mundo”.